Mi chico [En Proceso]

• Una chica linda no puede quedarse soltera

Capitulo cinco:

La semana había acabado, sin tareas o exámenes, estábamos a sábado, y en sábado que se hace? descansar...

Bueno si descansar era ir a un zoológico con tu hermano, su mejor amigo y tu mejor amiga a ver animales y estar rodeada de la popo de esos animales, que descanso mas tranquilo; no me malinterpreten amo a los animales, pero no a estar rodeada de ellos o de su popo, aparté de ser alérgica a cualquier animal que tenga exceso de pelo (a casi todos los animales en pocas palabras)

— Estas lista?— Lili interrumpió mis pensamientos llamándome al otro lado de la puerta

— no le veo el punto a ir a ver animales, aparte está lloviendo!!! — espete poniéndome mi chaqueta  

— Ya te dije que iremos así este cayendo nieve — escuche como golpeo la puerta y se fue 

Ya que, mire mi espejo revisando si llevaba todo para no morir de hipotermia, pantalones de terciopelo altos, camisa manga larga un poco apretada, chaqueta y mis botas, ¡listo vámonos! (nótese el sarcasmo)

— Hermana no exageres, aun no llega la temporada de invierno — dijo riendo mi hermano 

Saque el dedo de en medio y fui a sentarme al sillón en el cual estaba Thiago, en serio que hoy no estaba para esos comentarios 

— Hola Thiago — cerré los ojos y me recosté en el espaldar

— Hola Aluminio — escuché su ronca voz  
Esperamos a que la lluvia cesara un poco y mientras eso pasaba, traje un libro de mi estantería titulado "El reino del revés", leí como 4 capítulos mientras los demás hablaban de cualquier cosa 

— Juli puedes mirar por la ventana, a ver si sigue lloviendo — me dijo mi hermano

Me retorcí en mi puesto y con una pequeña molestia deje el libro en la mesa, al fijarme por la ventana quede hipnotizada por la escena, mis ojos se cristalizaron, esto no podía estar pasando, no podía ser real , tome un respiro y salí de la casa, escuchaba como me llamaban pero no me importaba, llame al elevador y mientras este bajaba mis nervios subían.

Al salir de la recepción me quede helada, no podía creer lo que estaba viendo, saque mi teléfono y marque el numero de mi novio, lo puse en mi oreja mientras mis ojos cristalizados miraban a esa dirección.

— H-hola ¿Dónde estas? — mi voz entrecortada no me dejaba hablar bien

— Hola, emm voy saliendo de la casa con un amigo, vamos a ir a una juntada de chicos — asentí triste

— Que te vaya bien — cuelgo viendo como George guarda su teléfono, toma la mano de una chica y besa sus labios empezando a caminar por la otra acera, cierro mis ojos dejando caer lagrimas, tapo mi cara y sollozo 

Mi cuerpo se tensa al sentir a alguien rodeando mi cuerpo, mi vista nublada no reconoce a la persona y no me importa  solo quiero a alguien que no me deje caer, lo abrazo con todas mis fuerzas

— No te preocupes, estoy aquí — reconozco la voz y me aferro mas a su cuerpo, no logro evitar seguir llorando, sus palabras hacen algo en mi interior como si nos conociéramos de años

Me alejo secando mis ojos y lo miro

— Lo siento, siento que hayas tenido que ver eso — digo ahora mirando hacia abajo

Thiago toma mi mentón y me da una sonrisa

— Que idiota debe ser tu novio para hacerte llorar, el no merece tus lagrimas  — el limpia mi mejilla con su pulgar mirándome fijamente