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Escuchemos como alguien carraspeaba a nuestro lado, los dos miramos hacía el carraspeo, donde se encontraba un SeoJun con el ceño fruncido y brazos cruzados.

— ¿Qué están haciendo? —pregunto con un tono molesto, sonreí antes de acercarme a él y dejar un beso en su mejilla.

Esta semana, después de haber estado hablando con su amiga, y ahora la mia, Kethia, habíamos estado en contacto toda la semana, incluso habíamos estado quedando, también cin Kethia, pero cuando estábamos sólos era otro royo.

Siento que la pregunta fue más para Dylan, ya que solo lo estaba mirando a él, igualmente contesté yo.

— Dylan estaba pidiendo algo, yo estoy trabajando, ¿tú qué haces aquí? —hablé rapido, queriendo cambiar de tema lo más rápido posible, ¡ni yo sabía porqué quería cambiar de tema!

SeoJun dejo de mirar a Dylan para mirarme atentamente a mí, me alzó una ceja, como examinando lo que acababa de decir.

— Quería venir a verte. —se encogió de hombros, antes de apoyae su espalda en la pared, aún con los brazos cruzados.

Iba a contestarle, pero Dylan se adelantó a hablar;
— EunJi, amor, —SeoJun al escuchar eso se volvió a enderezar, la verdad, era la primera vez que Dylan me llamaba asín— tengo prisa, ¿me pones un café? —asentí.

Fuí a prepararle el café a Dylan, sin dejar de estar atenta a SeoJun, de esa manera pude escuchar que le dijo.

— No parecía que tuvieras prisa antés que yo estuviera presente. —rechisto, Dylan solo lo ignoró por completo.

Hice el café rápidamente y me giré hacía ellos, SeoJun se había vuelto a apoyar en la pared, está vez con tranquilidad, o eso parecía. Dylan se despidió de mí y me dejo a solas con el chico que me gustaba.

Habían pasado veinte minutos, en los que SeoJun sólo estaba ahí, apoyado en la pared mientrás me miraba atender a la gente.

— Se puede saber qué te pasa. —pregunte irritada, estaba segura que le pasaba algo.

— Nada. —contestó seco, sin mover ni un músculo de su cuerpo.

Lo examiné un momento, de pies a cabeza, estaba muy guapo, bueno, siempre lo estaba, pero cuando se comportaba de esta manera lo podía ver incluso más guapo.

— ¿Vas a pedir algo? —le pregunto, ignorando el tema, volviendo mi vista a la pantalla de pedidos.

Había aprendido como funcionaba, ni siquiera era tan difícil, sólo tenía que picar lo que quería y darle al botón de "cobrar" y ¡listo!

Escucho como el chico de mi lado hace un sonido, chiscando su lengua, ardido por mi ignorancia en el tema.

— ¿Me vas a ignorar? —pregunta, si voz llena de drama me hace contener un risa.

— No, guapo, tengo que trabajar sino quiero que me echen el primer día. —explicó, SeoJun me mira con una sonrisa.

— Guapo, eh... —dice sonriendo, ruedo los ojos— Me encanta que me digas cosas asín, me haces querer besarte. —me puse roja al instante en que lo escuché, me acerqué a él para taparle la boca antés de que pudiera decir algo más.

— No hagas eso. —reproche, aún con la cara roja, bajando mi mano de sus labios, él sonrió divertido.

— Vale, prometo... bueno, no prometo nada. —le pegué flojo en el hombro para volver a la pantalla de pedidos, por si venía alguien— ¿Ha qué hora sales? —pregunto mirándome.

— Ocho, ¿por qué?

— ¿Quieres saber a qué venía? —lo miré con una ceja alzada.

— Obvio que sí, ¿qué pregunta es esa? —respondí con una sonrisa.

— Venía a... bueno, pues... —estaba nervioso— venía a pedirte una cita.

Al escuchar eso mí corazón empezó a latir tan fuerte que creí que se me iba a salir por la boca, había venido aquí para tener una cita conmigo.

Mis hormonas adolescentes se habían alborotado bastante.

— ¿Venías? Entonces, ¿ya no sigue en pié?

— Mhm.. Pensé qué te gustaba Dylan, digo por la mirada que os dais. —rodé los ojos, claro, estaba celoso.

No pude responder porqué me vi atendiendo a un cliente, cuando acabé con su pedido el hombre se despidió de mí, le dí una sonrisa y cuando estuvo fuera de mi vista me gire hacia SeoJun.

El estaba bebiendo un café porque mi compañera de trabajo le había dicho que no podía estar aquí toda la tarde sin tomar nada, asín que ahora estaba sentado en la barra.

— Entonces... ¿Te gusta Dylan? —preguntó intentando irritarme, acerco sus labios al café y le dio un pequeño sorbo, al mismo instante se lo alejo de la boca, con la lengua fuera cual perro— ¡Lee EunJi, esto está ardiendo! —replico, empecé a carcajearme de él.

SeoJun empezó a soplar, se había quemado toda la lengua porqué no le he avisado de que estaba caliente.

— Debería haber grabado. —dije cuando calmaba mi risa, él me miro unos segundos para después ensanchar una sonrisa divertida.

— ¡Deberías haberme avisado! —dijo conteniendo una risa.

— ¡Perdón! —contesté, ambos riendo.

Tuve que calmar mi risa cuando vino una chica, ella quería un bocadillo de jamón con queso, y se habían acabados asín que tenía que ponerme manos a la obra.

En el momento que me gire para preparar el bocadillo, escuché como la chica empezó a hablar con SeoJun.

×××

Love, M 🧡

¹ Don't let me go   ✔Onde histórias criam vida. Descubra agora