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SeoJun me había traído a casa una vez me habia calmado, le dije que entrará a casa, todavía tenía los nudillos con sangre y no me gustaba dejarlo con eso, él no muy convencido acepto, hacía muchísimo que SeoJun no entraba a casa, asín qué tenía que ser raro para él.

— Voy a por algo para quitarte lo de los nudillos, —expliqué— puedes acomodarte. —asintió con la cabeza, y yo fuí hacía el baño.

Agarre un paño y lo moje un poco, dejándolo humedo, también agarre agua oxigenada y algodón, volví al salón, está vez SeoJun estaba sentado en el sofá, me senté a su lado.

— Dame tu mano. —le dije, me dio su mano, haciendo caso omiso.

Empecé a pasar el trapo húmedo por sus nudillos, con cuidado, levemente. Estaba todo muy silencioso, lo normal porqué solo nos encontrábamos él y yo en la casa.

Pare en seco cuando escuche que se quejaba, dejé de pasar el trapo y lo mire, pasé mi mirada por su rostro y después por sus nudillos, tenían raspones.

— Perdón... —susurre, preparando el agua oxigenada— A lo mejor esto va a escocer un poco. —avisé, me miro atento.

Le eché el agua oxigenada y empecé a pasarle el algodón por los raspones, tenían mala pinta.

Ante el silencio, y nuestra cercanía decidí hablar;
— No entiendo porqué pensaban que yo era tu novia, es estupido. —murmure sin mirarlo a la cara.

Por unos segundos no dijo nada, hasta pensé que no contestaría, que lo dejaría así, pero si habló.

— Puede que eso haya sido mi culpa. — se lamentó.

¿Por qué iba a ser su culpa? Ni qué él le fuera dicho a los chicos que yo era su novia. Antes de que yo pudiera contestar, él me explicó;

— Cuando me ayudaste la otra vez con JooKyung, el chico os vio, y me dijo que eras muy guapa y otras cosas... yo, por la rabia y... celos... le dije que ni se le ocurriera mirarte, que estabas conmigo, que éramos novios. —explicó— Supongo, que como siempre quiere buscarme las cosquillas y no me las encuentra, ha decidido ir por ti. —suspire.

¿Rabia y celos? ¿Él quería protegerme?
¿Cuando había sido eso? ¿Cómo nos vio si estabamos escondidas?

— ¿Cuanto hace de eso? —pregunté, limpiando su otra mano.

— La primera vez que se lo dije fue hace tres meses, la segunda y la última vez fue hace... dos días. —lo miré por unos segundos.

Dos días.

Hace dos días yo le ví abrazando a Kethia.

— Pensé que... —me quedé ahí, no iba a decir lo que pensaba.

— ¿Qué pensabas? —pregunto, interesado.

— Pensé que estabas con Kethia. —solté, ¿qué más daba?

SeoJun sonrió de lado, una sonrisa que me hizo sentir cosquillas en el estómago.

— No estoy con ella. Sólo es una gran amiga, EunJi.

Empecé a echar agua oxigenada a sus nudillos, está mano tenía menos pero seguía teniendo.

— Pensé que ni siquiera querías verme, o... hablar conmigo. —susurre, pasando el algodón con suavidad.

— Tonterías... Estaba muriendo por hablarte pero pensaba que te molestaría. —solté una pequeña risa.

— Pensaste mal. —dije, una pequeña sonrisa creciendo en mis labios, él sonrió igual.

— Ya somos dos.

Acabé con su mano, dejé las cosas en la mesita y me senté como los indios, mirando a SeoJun, él miraba sus manos, cuando se dio cuenta de que lo miraba me miró.

— No estoy interesado en tener una relación, EunJi, a menos de que seas tú.

×××

Love, M 🧡

¹ Don't let me go   ✔Where stories live. Discover now