Problema

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La hora del desayuno había llegado y nuevamente Cueva se levantó muy temprano. Sin embargo, en esta ocasión, Ormeño fue el responsable de quitarle sus sueños.

"¿Por qué no puedo sacarlo de mi cabeza?", pensó Cueva mientras se llevaba un pan a la boca.

Ormeño: "Cuevita. Buenos días."

Cueva no se percató que su compañero estaba sentado ya al frente de su mesa. Al verlo nuevamente a los ojos, provocó recordar la escena en el entrenamiento anterior. El rostro de Cueva se puso roja y se atoró con su el pan que estaba comiendo en ese momento.

Ormeño: "Amigo, no manches. Déjame que te ayudo."

Ormeño, distraído como siempre, tomó a Cueva de su asiento y le apretó el abdomen para ayudarlo pensado que esta sufriendo una asfixia.

Cueva, ya muy avergonzado de lo que estaba sucediendo y escuchando como el resto del equipo empezó a reírse de los dos, empujó levemente a Ormeño.

Cueva: "Causita, ¿Qué haces?"

Ormeño: "Pensé que te estabas asfixiando...causita jajaja"

Cueva: "No nada. Solo me atoré. No lo exageres. Ves, se ríen de los dos."

Ormeño: (Girando su cabeza para ver al resto de sus compañeros) "Muchachos. Que bueno que se rían. Ayudará mucho para hoy."

Callens: "¿Todo bien entre ustedes?"

Ormeño: "Si cuate. Cuevita y yo estamos muy bien."

Ramos: "Si quieren, les dejamos asientos juntos en el avión de regreso."

Ormeño: "Sería buena idea ...causita."

Yotún: "Veo que te estas peruanizando rápido. Cuevita te ha enseñado muuuuyy bien."

Ormeño: "Jajaja Sí, el es un buen maestro."

Los muchachos empezaron a reírse de toda la conversación y a inocencia del mexicano. Cueva, ya todo rojo, decidió retirarse a su cuarto. Esta acción dejó muy confundido a Ormeño, quién no entendía lo que estaba pasando.

Cueva se encierra en su cuarto con llave para que nadie lo moleste en absoluto. 

"¿Por qué serás así de bobo e inocente Santiago Ormeño? Es esa tu forma de meterme en mi mente para no querer salir. Ahhh", pensó Cueva mientras se tiraba a su cama intentando pensar en otra cosa.

Los entrenamientos empezaron y Cueva estaba muy distante de sus compañeros quienes en la mayoría le harían recordar lo sucedido un día anterior. 

Igualmente, siempre era necesario un trabajo colectivo breve. En esas oportunidad, Ormeño y Cueva tuvieron contacto visual. Cada vez que esto pasaba, Cueva imaginaba a Ormeño acercarse peligrosamente a él con intención de besarlo. 

Cueva decidió ignorarlo por completo alejándose de él cada vez que pueda para ocultar su cara roja. Ormeño estaba muy confundido por lo que Cueva estaba haciendo. 

El entrenamiento terminó y todos regresaron al hotel de la concentración para prepararse para el partido de contra Argentina. Cueva seguía ignorando a Ormeño como si no fuera mañana.

Yotún: "Causita, ¿te puedo decir algo?"

Cueva: "Dime Yoshi."

Yotún: "¿Por qué has ignorado al gallito todo el día? Esta más confundido el pobrecito cómo cuando hablamos de jergas perruchas."

Cueva: "No lo ignoro amigo."

Yotún: "Oe, ya aquí entre nos. ¿Si te gusta no?"

Cueva: "Webón, ya te dije que no."

Yotún: "Ya te voy a creer por hoy solo porque tenemos partido más tarde, Luego, te voy a seguir jodiendo con eso hasta que lo admitas jajaja."

Cueva: "Oe cállate."

Yotún: (Alejándose poco a poco del lugar) "Solo intenta no ver a Santi en los rostros de los argentino esta noche jajaja"

Cueva: "Ya ya ya. El karma vendrá y te joderá amigo. jajaja."

Yotún: "Veremos, amigo. Veremos."

Cueva se quedó mirando como Yotún se alejaba lentamente. Por alguna razón tuvo un mal presentimiento.

Pero este mal pensamiento no duró mucho debido a que su mente volvió a traer la cara de Ormeño sonriendo con esa sonrisa boba e inocente. Su rostro volvió a colocarse muy rojo por la situación.

Ormeño: "Amigo"

Ormeño había puesto su mano en el hombro de Cueva en señal de llamar su atención.

Cueva: (Todo rojo) "¿Qué haces?"

Ormeño: "Amigo, ¿todo bien? Hoy estabas muy raro en la cancha."

Cueva: "Ahhh yo me comportaba normal. Como siempre jajaja"

Ormeño se acerca de pronto al rostro de Cueva para dar una observación más cercana. Cueva se quedó quieto ante la acción del mexicano. Luego de recuperar sus cinco sentidos, Cueva apartó con fuerzas a su compañero.

Cueva: "Aléjate bro."

Ormeño: "Chanfle. Estas peor de lo que pensaba."

Cueva: "¿Qué hablas webón? ¿Por qué te me acercas así?"

Ormeño: "Por lo general, prefiero analizar a la persona observando de cerca. Y acabo de encontrar que algo te incomoda."

Cueva: "Sí. Lo sé. Hay algo que me incomoda."

Ormeño: "¡Sí! Lo sabía. Soy bueno en estas cosas."

"¿Por qué serás así?", pensó Cueva entre un mar de confusiones por lo que siente por su compañero.

Ormeño: "Y como premio, mínimo merezco saber lo que te sucede jajaja."

Cueva: "¿Que hablas oe?"

Ormeño: "Muy aparte que estoy curioso, quiero extender mi mano amiga para ver si te doy una mano a mi ... causa"

Ormeño se queda quieto sonriendo a Cueva. El corazón del medio campista empezó a bombardear con muchas rapidez.

Era un sensación nueva que quizás Cueva no quería afrontar o aceptar. En su vida, había pensado que otro hombre podría confundirlo como tal.

Quizás aun no estaba listo.

Cueva: "Sí. Yo tengo un problema."

Ormeño: "Muy bien Cuevita. Vamos muy bien. ¿Y cuál es?"

Cueva: "Eres tú"

Ormeño: (Alarmado) "¿Yo?"

Cueva: "Sí webón tú. Tú eres el problema"

Ormeño: "Pero, ¿Yo que...?"

Cueva: (Gritando) "Déjame en paz"

Cueva decide irse a su cuarto cerrando la puerta con todas sus fuerzas dejando a un Santiago Ormeño muy confundido al escuchar que él era un problema para otra persona.

Solo era una broma [Santiago Ormeño x Christian Cueva]Where stories live. Discover now