Familia.

2.7K 297 184
                                    



Sero sentía que los huevos los tenía atravesados en la garganta. Después de un pequeño escándalo en un centro comercial, ahora estaba sentado como estatua en el sillón principal de la casa de su novio. ¿Qué había provocado, ésta vez, los 'tenues' celos del rubio? Sencillo: Sero había estado desaparecido unos días, y cuando volvió a dar señales de vida, estaba en el centro comercial con algunos amigos, siendo su cercanía más obvia con una fémina de cabello negro y una preciosa sonrisa, el cual lo traía del brazo, jalándolo de un lado a otro mientras recorrían el lugar.

Por supuesto qué tal sonrisa se borraría al instante pues, nadie contaba con que un exaltado Yūuga llegaría a hacer el drama del siglo, puesto que al no haber sabido nada de su novio y que apareciera de la nada con una mocosa, le resultaba insultante, e incluso, decepcionante. Gritos, escándalo, Sero cargando al pequeño Aoyama quién pataleaba para dejar en claro su dominancia, cosas de todos los martes. Y aunque al principio Hanta planeaba tomar el control de la situación, ahí estaba de nuevo, como un perro regañado, cabeza abajo, escuchando a su pequeño novio hablar y hablar, a veces en francés incluso, y estaba demasiado cansado como para explicarle, por novena vez, que no entendía francés.

— Yama, por favor, ¿podrías dejar que yo te explique? — buscaba interrumpir y calmarlo, pero tales intentos parecían ser inútiles.

— ¡No! ¡Yo confié en ti! — de nuevo, un falso llanto y drama. — Y después de no saber nada de ti... ¡apareces con una mujer y gente que no conozco!

— Yama...—

— Acaso... ¿no soy suficiente para ti? — ojitos brillantes y llenos de aparentes lágrimas gordas que comenzaban a deslizarse por su rostro.

— ¿Qué? ¡No! Yama, por favor, escúchame..—

— No, no, ya me quedó muy claro, sólo fui un juego para t-

— Es mi familia. —

— ... —

— ... —

— ¿Cuando...?

— Llegaron de Río de Janeiro hace unas semanas. Desaparecí por que había dejado mi teléfono en casa, y, no tenía manera de avisar. — aún cuando Sero tendría todo el derecho a enojarse, estaba sumamente tranquilo incluso calmado, a pesar de las sobre actuadas e innecesarias actitudes de su novio. — Planeaba venir mañana por ti y llevarte a conocerlos.

— ... ¿y la chica? —

— Mi prima. —

— ... Ouh. Mon dieu.

Y, aunque era obvio quién tenía la culpa de la confusión, no se iba a dejar vencer tan fácilmente. No en ese momento, o quizá, nunca jamás. Un rostro en puchero y sus brazos cruzándose dejaron en claro su postura: no iba a pedir perdón. Hanta lo noto y solo se levanto para acercarse, buscando animarlo un poco.

— Anda, todo bien. —

— No, no está bien... — suspiro, y miró a Sero a los ojos, teniendo que levantar un poco su rostro. — Sólo.. quiero que te quede claro algo, ¿si? —

— ¿Qué cosa? — interrogó inocente el pelinegro, sin esperar que en un momento específico sería empujado de vuelta al sillón y en cuestión de segundos tendría al rubio encima, sentado en su regazo. — Yūuga...

— Por sí no he, sido muy claro, mon amour. — Yama dejó caer todo su peso en las piernas de Sero, causándole a éste último un ruido de queja. — Todo lo que hagas me tienes que decir ¿si? — un movimiento suave de caderas que terminó con el trasero de Aoyama, ésta vez encima de la entrepierna del pelinegro ya más nervioso.

— Yūu, basta, yo... — fue interrumpido por un silencio pequeño, y cuando pudo levantar nuevamente la mirada topó con los preciosos ojos de Aoyama, quién lo miraba de una forma que no sabía sí cariñosa o, cazadora.

¿Eres mío, Hanta?

Miedo. Mucho miedo. Pero no un miedo malo, era más, el sentirse acorralado. Claro que al mismo tiempo le gustaba mucho, pero no quitaba el hecho de que Aoyama a veces podía ser aterrador.

— Yo, sí, sólo que... — inesperadamente Yūuga dio un improvisado sentón sobre Sero, quién apenas tuvo tiempo de reaccionar.

— Pregunté, ¿eres mío, Hanta? — moviendo de forma lenta sus caderas, buscando provocar, confundir. Pero sobre todo, remarcar quién era el que mandaba en esa relación.

— Yūu, s–sí, pero cálmate... — aquella petición fue ignorada e incluso fue reprochada con otro brusco sentón que, ya estaba estimulándole mucho.

— No me digas que me calme. No lo hagas... — acercándose a su oído, inclinándose sobre su pecho. Tensión, calidez. — Por que no me voy a calmar, mon bèbè. — moviendo lento, pero firme, su trasero. Fricción tentadora que inevitablemente ya había causado una reacción en Hanta. Reacción con la que amaría dejar en claro su obvia dominancia.

— Yūu... — más una súplica que otra cosa.

— Responde bien, Sero. ¿Eres solamente mío? ¿Sólo puedes estar bien y pasarla bien conmigo? una de sus manos se deslizó aviesa por el pecho de Hanta. Podía sentir su corazón palpitar con fuerza, su respiración agitarse. Su tensión incrementar. Buscó su mirada, topándose con el rostro sonrojado y levemente ofuscado debajo suyo.

— S–soy tuyo, Yūuga.

Un tortuoso y lento frote fue la respuesta del mencionado, sacándole a Sero un jadeo ahogado.

— Dilo de nuevo. — la mano de Aoyama ya se había colado lo suficiente como para buscar desabrochar el pantalón holgado que traía su novio.

— Soy tuyo, Yūu- ¡mh! — apenas pudo hablar cuando sintió su carne expuesta, ante los fríos y delgados dedos de su pareja. Tembló y de su boca escaparon jadeos ansiosos.

— No te dije que te detengas. ¿Cierto, amour? — una vez con aquella extensión afuera, reanudó sus arremedos de sentones, provocándole un gemido fuerte y ronco a su novio. — Dilo de nuevo, Hanta. Di que me perteneces, fais-le pour moi bébé...

— Soy tuyo, Yūuga, s–sólo tuyo. Uh... — Sero se sentía derretir con cada frote, cada movimiento ágil de la cintura de su novio. — Mi amor, meu vida, por favor...

— No me voy a detener, hasta que te quede totalmente claro, Haaaanta. — sus pequeñas manos sujetaron el rostro perdido y cálido del más alto debajo suyo, y mirándole a los ojos, sentenció. — Ésta noche haré que te quede qué tan mío eres.


Aoyama 1, familia 0.













║▌│█║▌│ █║▌│█│║▌║

Aclaraciones.
Éste proyecto no busca romantizar de ninguna manera las relaciones a base de dependencia emocional, celopatía o violencia de ningún tipo. Los tópicos tocados acá son pura ficción y comedia con toques de trama adulta.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 06, 2021 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Sólo mío.  |   SeroYama. ✧Where stories live. Discover now