Cliché

-Una vez soñé con un mundo regido por los tormentos eternos del infierno, una vida guiada por el dolor, el silencio reinante en la absoluta soledad. Mi maestro lo llamo una premonición de mi futuro-Kai bajo la cabeza llorando

-Ahora sabes que no fue un sueño, hoy despertamos entre cenizas y bocanadas de humo, esa fue una premonición-Rei le acaricio el cabello

-Mi sueño se cumplió, puede haberles advertido, si yo hubiera actuado antes...

-No, no fue tu culpa, un enorme meteoro cayó en el centro de nuestro planeta, creando un cráter de tal magnitud, que la traslación de la tierra se detuvo por medio segundo, creando catástrofes naturales, destruyendo ciudades, asesinando más de la mitad de la vida y dejando a unos pocos sobrevivientes vagando entre escombros, esperando morir de hambre o vivir sin esperanza. Jamás te hubieran creído de todos modos.

-Pero al menos, podría haber salvado a más personas.

-Quizá sí, quizá no. No podemos saberlo, lo importante es tratar de sobrevivir y adaptarnos a nuestro nuevo mundo.

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-Wow, esto es...- Los ojos de Yakumo se estaban poniendo rojos y tenían indicios de lagrimas

-Lo sé Tsukamoto-san, es algo exagerado ¿no? 

-No, está bien, es, es una gran idea. Algo trágica, pero siento que ira bien en tu manga Harima-san.

-Por favor, sé sincera, ¿no te parece algo cliché?

-Bueno, tal vez un poco, pero me gusta –le sonrío y dejo el escrito en la mesa

-Te agradezco que sigas ayudándome con la edición, no terminaría a tiempo de no ser por ti –Cabeceo en dirección de la chica y volvió a centrarse en la hoja que estaba entintando frente a él.

-No hay nada que agradecer, para eso están los amigos –Yakumo dio un suspiro silencioso viendo anhelante hacia su sempai y siguió leyendo el borrador del nuevo manga.