Desde su nacimiento, ha pasado por un infierno. Infierno donde cierta herida nunca sanará. Huellas dactilares, heridas e incluso lesiones psicológicas sufridas por el Creador. Hasta el día en que lo entregaron a quienes serían sus hermanos, la viole...
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* • • ◕◕════♣Es un joven de 18 años, estatura promedio de 1.96 años, su cabello rojo anaranjado resalta mucho, sus ojos son celestes, muy coloridos, y de su carácter podríamos que era jodido. El primer día de la preparatoria, causó problemas y fue expulsado. Meses después conoció a una chica que con el tiempo se convirtieron en mejores amigos, nunca se separaron, algunas personas podrían pensar que eran novios, pero no es así, ambos se consideraban hermanos. Con el tiempo, dejó de tomar lecciones y resultó que estaba resolviendo problemas que nadie conocía.
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Ya en tercer año. Los jugadores de voley masculino, comenzaron a oír a los demás estudiantes, hablar de un joven que se metía en problemas y que pronto regresaría a la preparatoria.
—Iwa chan, ¿sabes de que hablan?—Preguntó un joven de estatura alta, mientras se cambiaba de atuendo, para entrenar. —Estoy igual que los demás, no se de quien se tratara pero... Parece ser muy problemático—Confesó, para salir del vestuario. —¡Espera, Iwa... —Al salir, se tropieza con alguien, quien al rato lo ayudó a levantarse.
—Al menos eres considerad... —Silenció al ver de quien se trataba. —A—Terminó de hablar. La joven, quien lo ayudó a reponerse, le sonrió. —Oh, Taka chan, gracias y lo siento—Dijo apenado Oikawa.
Ella negó con la cabeza. —"No te preocupes, yo no veía por donde iba, lo siento"—Comunicándose con el lenguaje de señas, le comunico.
—Descuida, ¿vamos?, iré al gimnasio y de antemano, ¿por que no vienes?—le propuso y esta accede a su invitación. —Oye—Llamó Oikawa y esta lo mira. —¿tú sabes de quien hablan los demás? —Aquella pregunta, hizo que la fémina detuviera sus pasos.
—¿que sucedió?—Le preguntó Oikawa a la fémina, quien tenía la cabeza gacha. Luego de una rato de silencio, lágrimas comenzó a derramar, alertando al joven de cabellera chocolate. —¡¿Dije algo malo?!—Alertado, no sabia como tratar.
—¡Basura!—Oyó Oikawa, que gritaban su Apodo. —¡¿que le hiciste?! —Gritó furioso Iwaizumi. —N n nada—Respondió nervioso.
La fémina, se limpió las lágrimas. —"Perdón, no fue mi intención"—Comunico ella.
Iwaizumi resoplo enfadado. —Vengan, los entrenadores nos llaman y ustedes, capitanes, deberían venir—Informo Iwaizumi, caminando rumbo al gimnasio. Ambos capitanes, cruzaron miradas confundidos, pero luego se dirigieron donde a Iwaizumi.
Ya todos, estaban en el gimnasio. —"¿a que se debió mi llamado?"—Preguntó la fémina, algo confundida. —Estas son buenas noticias, tanto como para el equipo masculino, como el femenino. Verán, el día de mañana vendrán, los nuevos integrantes de ambos equipos—Informó el entrenador, sorprendiendo al resto.
