—En el dormitorio —dijo Lin Wuyu.

—...Oh —Ding Ji asintió con la cabeza. No vivió en la escuela durante mucho tiempo, por lo que no pudo reaccionar correctamente.

El orfanato estaba muy lejos, y cuando llegaron, Lin Wuyu estaba un poco preocupado de que la motocicleta eléctrica no pudiera regresar. 

—Imposible —dijo Ding Ji— lo cargué lo suficiente para hacer dos viajes de ida y vuelta

—Tu motocicleta está hablando por todos lados con el policía de tránsito —Lin Wuyu suspiró.

—¿Y qué está diciendo? —Ding Ji apagó la motocicleta. 

—¡Ven y atrápame! —Gritó Lin Wuyu mientras agitaba las manos. 

—No —Ding Ji le bajó los brazos, riéndose— ¿Cómo alguien que parece bastante serio poder hacer algo así? 

Lin Wuyu se rió y caminó hacia la puerta del orfanato. 

El niño que recogieron fue abandonado por una discapacidad congénita en su mano derecha. No podía abrir las palmas de sus manos y además de que no pudieron encontrar a sus padres, nadie lo había adoptado todavía.

Sin embargo, este tipo de discapacidad se consideraba menor. La da-jie que estaba a cargo en la recepción dijo que cuando el niño sea un poco mayor, tenía probabilidades de que fuera adoptado luego de pasar por una cirugía. 

Había niños con discapacidades físicas y mentales en el patio. Muchos de ellos presentan casos muy serios, y Ding Ji, sentía incomodidad al sentir sus miradas.

No sabía cómo se sentía Lin Wuyu.

Así que miró hacía atrás.

Lin Wuyu estaba mirando a un niño que estaba sentado en un pequeño sillón con una manzana en las manos. El niño tenía un problema cognitivo y los músculos en sus rostro temblaban constantemente y el jugo de manzana mientras masticaba quedaban en sus manos y rostro.

Luego, le sonrió a Lin Wuyu.

Ding Ji miró rápidamente a Lin Wuyu. Si esta personas de sangre fría se atreviera a mirarlo con indiferencia, le daría una mala mirada al instante.

Pero Lin Wuyu no lo hizo, levantó la comisura de su boca y le sonrió al niño.

—Tenemos una voluntaria que acaba de dar a luz a un bebé —la da-jie que estaba a cargo de la recepción, los llevo adentro —puede darle al niño un poco de leche materna, pero de todas maneras debe tomar la mayor parte del tiempo leche en polvo. 

—Trajimos un poco de leche en polvo —dijo Ding Ji— Wuyu-gege la compró, pero no sé si es el adecuado.

—Debe serlo —dijo Lin Wuyu— Cuando fui a la tienda la sección de maternidad, le pregunté a una Jie-jie que tenía niños a su lado.

—Ustedes son bastantes considerados. —dijo la da-jie con una sonrisa— Gracias, a pesar que los estudiantes como ustedes no deberían gastar dinero en esto. Si quieren ver al niño en un futuro, simplemente vengan.

. . .

Los niños no tenían nada de bueno, en especial aquellos que estaban durmiendo.

La da-jie llevó al niño a la cuna, y las tres personas se reunieron alrededor de la cuna, mirando al niño durmiendo como si estuvieran haciendo una solemne ceremonia.

Se sentía un poco tonto.

Lin Wuyu se hizo a un lado.

—¿Tiene un nombre ahora? —preguntó Ding Ji.

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