Aprendiendo a vivir

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Una semana había pasado desde que Matteo inicio a trabajar en la cafetería del viejo Robert y sin dudas era un trabajo cansado el atender mesas, limpiarlas desde de que terminaran de comer algunas veces se le hacia desagradable limpiar algunas de las mesas de lo sucias que las dejaban y eso sin contar cuando le tocaba lavar el baño

Gracias a Dios en las noches estás tareas se las enseñaba Violetta y Luna Con el fin de que aprendiera a lavar baños, limpiar los utensilios de cocina como loza y cristalería, lavar trapeadores, a utilizar una escoba todo aquello que el miraba que hacía la servidumbre en la que un día fue su casa

Terminaba exausto después de un día laboral, sus manos que algún día fueron finas, tersas y suaves hoy se encontraba ásperas, resecas por el jabón de trastes y por el cloro, Luna cada que iba a visitarlo le recomendaba ponerse crema humectante en las manos todas las noches ella le había regalado una para que la usará

con la mudanza de sus amigos finalizaría en dos días mientras ellos terminaban de guardar todas su cosas a medida que pasaban los días más vacío se miraba el lugar y más cajas adornaban el lugar, fue cuando se dio cuenta que solo los gabinetes, la su cama, y muebles de su habitación conservaría y después de eso el no tenía realmente nada y fue ahí donde las palabras de los padres de Luna vinieron a su cabeza el no tenía nada que ofrecerles

Contaba con algunos ahorros para poder buscar algunos muebles eseciales y para comprar unos comestibles y otra cosa que lo ayudaba era que León solo le cobrará de la renta 250.°° de renta pero quería ahorrar para poder estudiar más adelante

Estaba desayunando cuando apareció Violetta quien lo saludo con una sonrisa - ¿Como estás? - le saludo cordialmente - mientras se servía una taza de café

Muy bien gracias - le contesto de regreso con una sonrisa - aunque sinceramente extrañare tus desayunos

No te preocupes te puedo enseñar a cocinar lo poco que yo sé - mientras tomaba asiento frente a el Y sacaba su agenda donde apuntaba algunas cosas - y recuerda que también Luna y su madre te ofrecieron clases de cocina

No quiero ser una molestia - mientras negaba

Sabes si algo he aprendido ahora que estoy cansada y me independice de mi padre fue que siempre necesitarás ayuda de los demás - mientras dejaba de lado lo que estaba haciendo - no creas que cuando yo empecé a vivir con León era una experta en cocina - mientras negaba - créeme muchas veces se me quemaba los huevos, se me evaporava el agua, le echaba demasiada azúcar o sal a los alimentos - mientras se reía de solo recordar - no sabes era una total inútil en la materia, por pero en lugar de que León me lo recriminara no fue así El siempre supo que de donde venía yo nunca me acostumbraron a tocar ni un sartén

<<Pedí ayuda a las empleadas de servicio de mi padre para que me enseñaran todas las labores domésticas y como también como ir hacer las compras y noe arrepiento - mientras miraba al chico de manera animada - tienes que aceptar la ayuda necesaria no te morirás por ello pero también lucha por lo que deseas

Gracias - mientras le tomaba de mano

Sabes que eres importante para nosotros Matteo - le recordó ella - quería esperar a que León estuviera acá pero me adelantaré - expréso con mucha alegría - la casa que compramos está amuebladada en su mayoría así que no nos llevaremos los muebles y en lugar de meterlos en una bodega te los dejaremos acá con una condición

¿Encerio? - pregunto el mientras ella asentía - claro dime cuál condición

Que me dejes calentar algunos alimentos de Maria - mientras le hacia un puchero

Claro no les negaré eso - mientras sonreía - es su casa después de todo - mientras ella le metía un zape - Auch - se sobo la zona lastimada

Es también tu casa recuérdalo - mientras lo retaba y el asentía - muy bien - volvió la vista a su agenda

Hasta Mi Último Dia/Dos Extraños Where stories live. Discover now