¿Que hacer cuando sin querer y sin previo aviso empiezas a sentir cosas por tu amigo, ademas de eso el libero del equipo?
Asahi al no saber como expresar sus sentimientos decide escribirle cartas a su compañero de equipo, dejándolas en su locker de...
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Narra Asahi:
Estaba en la entrada esperando a Noya mientras se ponía los zapatos, lo observé y vi como tachoneaba la carta que le había dejado, la volvió a dejar en el casillero y nos fuimos, mañana la abriré y sabre si debo abrir su carta o no.
Llegué a primera hora antes que Noya, como había cogido de costumbre últimamente, abrí el locker, cogí la carta, la abrí y se veía como Nishinoya había tachado el sí y lo había vuelto más oscuro. Es momento de abrir la carta y responderla.
Hola admirador secreto
Últimamente has estado dejando cartas en mi casillero, me ha parecido algo muy bonito de tu parte, se siente el cariño que me tienes con esas letras, pero no se quién eres, quiero saberlo, para decirte algo en persona, ya que no me parece justo que te escondas, por ti claramente Jajaja. Espero tu respuesta. Yuu~
Termine de leer la carta, como siempre Nishinoya siendo directo. ¿Será bueno que me muestre? No quiero perder su amistad por estos sentimientos, pero de cierto modo quiero que sepa quién soy, no sé si tenga la valentía de mostrarme, de dejar de esconderme en estas cartas.
Guardé la carta en mi bolso y me dirigí al salón, sin dejar alguna respuesta en ese casillero, necesitaba algún consejo.
- Oh, Asahi – escucho atrás de mí, a lo que me volteo a saludar al dueño de la voz, el cual será mi consejero.
- Daichi hola – respondo un poco nervioso.
- ¿Vas al salón – pregunta llevando uno de sus brazos por mis hombros, yo solo me limitó a asentir antes de hablar nuevamente.
- ¿Te puedo preguntar algo? – bajo un poco la mira para ver la expresión de Daichi.
- Claro que sí, pregunta – responde a lo que yo empiezo a hablar, un poco indeciso y tambaleante.
- Bueno, verás – hago una larga pausa pensando lo que diré – conozco a una persona que ha estado enviándole cartas a la persona que le gusta – otra pequeña pausa – todas han sido anónimas, pero la persona a la que él envía esas cartas, lo quiere conocer en persona – continuo con cierto temblor en mi voz – él no sabe si sea lo mejor, se me olvido mencionar que son amigos, el claramente no quiere perder esa amistad, ni admiración de la persona que le gusta – empiezo a hablar un poco más rápido inconscientemente por los nervios – por eso le da miedo mostrarse frente a esa persona – respiro y vuelvo a hablar más tranquilo - si fuera tu caso ¿qué harías? – miro nuevamente al capitán del equipo, su expresión es confusa.
- Bien – se atreve a hablar, después de un largo silencio – si fuera yo, en un principio, no le hubiera escrito cartas sin remitente – con su mano libre se agarra la barbilla y me mira con complicidad – pero conociéndote, sé que lo harías así – no quería que me descubriera, no puedo evitar abrir los ojos y que se me suba la sangre a la cara – acerté – ríe y me da ligeras palmadas en el hombro – sabes, te conozco hace 3 años Asahi, sé que a pesar de tener ese tamaño y expresión de pandillero, tienes un corazón muy grande y noble, también se perfectamente que eres un miedoso del carajo – lo ultimo lo dice entre risas y no puedo evitar reírme también – también se que esa persona que te gusta, no va a dejar de admirarte por saber que tú eres su enamorado secreto – otra palmada en mi hombro y una sonrisa que me reconforta y alienta – reúnete con esa persona y dile lo que sientes de frente, animo – la siguiente palmada es más fuerte causando que pierda un poco el equilibrio, no puedo evitar reír, Daichi me sigue.
- Gracias – respondo entre risas.
Ya decidido con lo que hare empiezo a redactar la carta y probablemente la última:
Querido Nishinoya Yuu:
Está bien, veámonos cuando termines con tu entrenamiento atrás del coliseo.
