Ｓｏｕｌｍａｔｅｓ

Vínculo

Y pensar que pudimos ser una de las mejores historias de amor...

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Langa no podía sacar de su mente el intento fallido en el hotel, se sentía culpable. Ver a Reki sufriendo y todo por su culpa y su maldita amnesia. Había desmoronado una de las esperanzas al ilusionarlo llevándolo a aquel lugar, quería hacerlo sentir mejor y estar con él todo el tiempo.

Había notado que últimamente Reki actuaba extraño, disfrutando cómo un niño sin preocupaciones y en vez de alegrarse al verlo feliz, sentía una tristeza gigante.

- Si lo que siento ahora es así de fuerte, me imagino cómo será estar vinculados - pensaba Langa mientras miraba las fotos en su celular, Reki realmente era hermoso.

- ¿Qué sucede hijo? - preguntó Nanako al ver al muchacho deprimido.

Langa le contó todo lo sucedido y le pidió consejos.

- Quizás deberían salir un fin de semana, podrían ir a unas aguas termales que hay cerca de acá - le recomendó su madre.

- ¿Aguas termales? - recordó la historia que le había contado Reki.

- Llámalo y pregúntale - le dijo Nanako.

- No quiero llamarlo... Yo quiero verlo, creo que recuerdo su dirección, mamá ayúdame con mi bolso, iré a raptar a Reki, algo me dice que este fin de semana será especial, quizás en esas aguas termales logre recordar todo.

Habían pasado una semana desde que fue el festival, y desde esa vez no había visto a Reki, no había asistido a clases, cada vez que Langa lo llamaba, el muchacho le respondía que se encontraba bien y que sólo se había quedado dormido.

- Realmente lo extraño - Langa terminó de empacar lo necesario.

- Deseame suerte mamá - se despidió Langa.
- ¡Suete cariño! Y cuida bien a Reki, recuerda que debe estar débil.

- ¡Si lo sé! - Langa tomó el nuevo skate que le había construido el pelirrojo hace unos meses y partió rumbo a la casa de los Kyan.

Golpeó nervioso la puerta, en el pasado quizás cuántas veces fue a esa casa y ahora sólo había ido un par de veces.

Koyomi abrió la puerta y al ver a Langa, se abalanzó sobre él mientras reía.

- ¿Viniste a ver a mi hermano? - preguntó coquetamente.

- Hola.. Emmm si, vengo a ver a Reki.

- Está durmiendo en su habitación, no ha estado bien esta semana, de las 24 horas que dura el día, está despierto con suerte 6 horas y el resto pasa durmiendo o con fiebre.

- Eso se escucha fatal, gracias por decirme.

Langa caminó de manera automática hacia la habitación de Reki, no sabía cómo pero recordaba el camino.