—Lo siento amor pero todo esto que está pasando me tiene demasiado mal, tengo cosas que averiguar en cuanto llegué a la mansión, y mi humor no es muy bueno ahora mismo.

—Lo sé y yo estaré ahí para ayudarte.

—Tu te mantendrás al margen de esto Jimin, esto es algo más profundo que tengo que resolver yo, no quiero que te involucres en esto.

Le dice pero Jimin negó.

—Soy tu prometido, soy tu amor, soy tu mano derecha, claro que no te dejaré solo en esto amor, sea lo que sea que venga siempre estaré contigo apoyándote en cada cosa que decidas o hagas.

—¿Y qué hay de la niña? Jimin no quiero que me veas como alguien insensible pero no podemos quedarnos, no sabemos si tiene algún otro familiar que la esté buscando.

—Podemos quedarnos sólo por un poco tiempo en lo que buscas a sus familiares, yo cuidaré de ella, prometo que no dará molestias, solo necesito que mi prometido me apoye, si...

Pucherió poniendo un carita de perrito triste, Jungkook sonríe porque sabe que jamás podría negarle algo a su rubio, incluso rompió su propia regla de hasta matrimonio, qué más daba unos días hasta que encuentre a la familia de la niña.

—Esta bien amor.— Jimin empezó a besarle toda la cara a Jeon en forma de agradecimiento, estaba feliz que su prometido dejase que sí.

—Gracias, gracias amor. Prometo que la cuidaré muy bien.

—Eso espero, porque cuando tengamos los nuestros propios tendrás que ser el mejor papá.

Jimin se sonrojo ante la idea de ser papá, tener un hijo de Jungkook lo llenaba de ilusión, tener su barriga grande y que juntos vieran el nacimiento de su primero hijo, eso lo llenaba de ilusión.

—Tú también serás un gran padre, así como lo fuiste con Soobin. Y aunque él ya no esté en nuestra vida siempre estará en nuestro corazón.

Jeon asintió.

—Lo sé, te amo

Beso sus labios mientras el avión llegaba a su destino, lo que venía para ambos sería algo difícil, sin embargo tampoco imposible, juntos podrían con lo que fuera y eso sería Don Salieri y todo Empire Bay.

Cuando el avión aterrizó, Jimin tomó a la niña y, Jeon sus cosas. Bajaron y fueron directo al coche que los esperaba, Jungkook miraba de reojo a Jimin jugar con la niña y la imagen de él y Jimin siendo padres no salió de su pensamiento.

Había sido descuidado al no usar protección pero lo bueno era que Jimin tomó las pastillas, quería un hijo de su futuro esposo pero no ahora que se venía la tercera guerra mundial con Empire Bye.

Don Salieri estaba acabado, así como la Unión de John Jeon y el hijo de Giulio contadino, quienes venían por la venganza hacia su difunto padre.

Al llegar a su mansión Jimin bajo con la niña y Jungkook camino a su lado, ambos estaban algo cansados por el largo viaje, en cuanto entraron ahí estaba Hyunjin con Félix comiéndole la boca, Jungkook arqueo una ceja y Jimin le tapó sus ojitos verdes a la niña.

Jungkook carraspeo y ambos chicos se separan.

—¡Jungkook!— dice sorprendido y avergonzado el menor— hermanito llegaste pronto.

Jimin ríe negando con su cabeza y Felix estaba demasiado rojo de sus mofletes.

—Hola Hyunjin.— saluda Jimin y Hyunjin mira a la bebé en los brazos de su cuñado.

—Hola Jimin...¿Unos días fuera y ya tiene una bebé? Que rápido es la cigüeña.¿De quien es?

—Larga historia. ¿Félix tus padres están aquí o vendrán después?

𝗠𝗔𝗙𝗜𝗔 🍷𝗸.𝗺Onde as histórias ganham vida. Descobre agora