Richie alza la mano para que deje de hablar en cuanto suena su teléfono. Echa una rápida mirada a la pantalla y lo veo rechazar la llamada.
-Lo siento. Creí que podía ser Ava -Encoge sus hombros de forma despreocupada- No quise ser descortés.
Esa es una de las cosas que más me enamora de su persona. Puede parecer relajado y desinteresado todo el tiempo, pero tiene bien en claro sus prioridades. Y aunque deja volar a su hija adolescente, siempre la sigue de cerca; listo para intervenir de ser necesario.
-No pasa nada. Entiendo totalmente -Le sonrío con dulzura- ¿Seguro que no quieres atender? Ya terminamos aquí, no me molesta regresar al cuarto.
Niega con la cabeza y se inclina ligeramente sobre la mesa para tomarme la mano y mirarme de cerca.
-Estoy contigo ahora, ¿crees que podría haber algo más importante que eso?
Me sonrojo y rio tontamente.
-¡Ay, Richie! No tienes que ser galante conmigo.
-Supongo que no. Me conoces mejor que muchos, ninguno de esos trucos tontos serviría. Pero estaba hablando en serio -Ríe suave- Me estabas diciendo que en tu nueva novela quieres usar más el misterio, sigue -Me anima.
Sonrío e intento ignorar el hecho de que su mano sigue sujetando la mía. Sus ojos marrones me ven expectante, así me concentro y termino de contarle sobre mi último proyecto.
-...pero no te diré más porque quiero que leas el libro y te sorprendas.
-Estoy ansioso por hacerlo.
-Bien. Creo que es mejor regresar a mi habitación y ponerme con eso. Supongo que Ava y Deen no volverán hasta el amanecer -Cosa que pasaba siempre que iban a una fiesta.
-Julia, cariño, ¿de verdad no vas a tomarte ni una noche libre?
Dejo caer los hombros y me lo quedo mirando fijamente. Él no aparta sus ojos de los míos, sabe jugar a esto mejor que yo. No podré ganarle, y tampoco quiero hacerlo en realidad. Últimamente no hemos pasado tiempo a solas, esta es una oportunidad que debo aprovechar.
-Bien, me convenciste -Suspiro con falso pesar para hacerle creer que le ha sido difícil la victoria- ¿Alguna propuesta?
-Bueno, se me pasan varias cosas por la mente -Se pone de pie y me obliga a hacerlo a mí también, especialmente porque nuestras manos siguen unidas. Salimos del restaurante del hotel y nos quedamos parados en el lobby- Podemos ir a dar un paseo -Me señala la puerta que da a la calle- o podríamos subir a mi cuarto, beber algo o escuchar música tal vez.
Su móvil vuelve a sonar. Esta vez estoy lo suficientemente cerca para leer el nombre de su novia en la pantalla.
-Deberías contestarle -Digo antes de que pueda colgar.
-Pero...
-Richie, sabes que no dejará de llamar -Mi voz suena cansada, seguro que el malestar se me nota en la cara también porque veo la culpa en sus ojos cuando alza la mano para acariciarme la mejilla.
-Será rápido –Termina cediendo.
-Seguro -Suspiro.
-De verdad. -Señala uno de los sillones- Espérame por ahí -Dice casi distraído ya que está volviendo a marcar.
Hago lo que me dice, aunque luego de esperarlo por 5 minutos mi mal humor y yo vamos por unos tragos al bar.
Siento las mejillas calientes al cabo de 20 minutos y el comienzo de mi tercer trago. Los primeros dos me los he bebido casi sin darme cuenta.
Siento una mano en la parte baja de mi espalda y escucho la voz de Richie antes de poder girarme para hacerle frente.
-Te encontré -Me dice orgulloso, como si estuviéramos en un divertido juego del cual resultó ganador.
-No me estaba escondiendo.
-Pero tampoco me avisaste que estarías aquí. Tuve que preguntarle al tipo de recepción si te había visto.
-Supongo que fue suerte entonces -Digo desanimada y alejo el vaso, ya no tengo ganas de seguir bebiendo.
-¿Lista para ese paseo? -Me imita y se pone de pie también.
-En realidad, quisiera ir a mi habitación.
-¡Claro! ¿Pido algo para picar o beber?
-Richie, por favor -Elevo un poco la voz, pero sé que el barman está atento a la conversación aunque intente aparentar estar muy concentrado preparando otras bebidas- Ven...
Le tomo la mano e ignoro el hormigueo que siento al caminar con él de ese modo. Alguna clase de tonta fantasía se ha desbloqueado en mí.
-Estás muy molesta -Dice cuando lo suelto pero sigo caminando hacia el ascensor sin él.
-Sí, estoy molesta. Y cansada... Y un poco ebria, aunque no bebí demasiado.
Ambos nos metemos en el elevador ya que las habitaciones están en el mismo piso.
-Eso es porque no estás acostumbrada.
-Igual estaría molesta -No puedo evitar el sincericidio repentino.
Frunce el ceño y sospecho que mentalmente está haciendo un repaso de la noche para encontrar el quiebre.
-Lo estás porque... ¿atendí la llamada? -Dice no muy seguro lo último. Entonces abre los ojos un poco más- Espera -Se echa a reír de un modo muy suave- No estás molesta, estás celosa.
Las puertas del ascensor se abren y yo salgo caminando molesta sin siquiera responderle.
Me empuja dentro de mi cuarto cuando abro la puerta y la cierra detrás de nosotros a pesar de mis quejas.
-¿Qué haces, Richard?
-Nikki y yo no estamos juntos desde hace semanas.
Eso me sorprende. No sé si lo nota o no, pero no lo admitiré de todos modos.
-Eso no tiene sentido. Me lo hubieras dicho... o Ava -Ahora soy yo la que repasa mentalmente los últimos acontecimientos.
-Decidimos no decirle a nadie porque apenas lanzamos la nueva campaña de ropa, ¿sabes? Pero creo que sólo estaba evitando que se filtrara porque piensa que todavía tenemos alguna posibilidad.
-¿No es así? -Me descubro preguntando con nerviosismo.
-No –Se me queda mirando en silencio por varios segundos- Creo que es hora de dejar de jugar, Julia -Me mira de forma significativa.
-Aclárame algo, porque temo que el poco alcohol en mi sistema me esté jugando una mala pasada -Cierro los ojos con fuerza y frunzo los labios mientras busco reunir todo el valor dentro de mí- Lo de hoy no fue una simple cena entre amigos, ¿no?
Sonríe con ternura y niega con la cabeza. Se acerca a mí y me mira fijamente. Me sonrojo y bajo la cabeza sin poder sostenerle la mirada.
-Creo que no estamos en el mismo lugar -Y ríe antes de besarme la frente. Se aleja nuevamente y sólo entonces me animo a enfrentarlo con mis ojos, todavía me siento confusa y estoy con el corazón acelerado- Disculpa si te molesté, Juls. Sólo olvida esto.
Y se va de la habitación, dejándome sola.
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Here comes the sun (Richie Sambora)
FanfictionDe vacaciones en un lugar de ensueño, Julia va a descubrir que el romance no sólo existe en los libros. *Historia corta*