El chico me examina de arriba abajo antes de contestar.

-Jace. - dice con voz ronca con una sonrisa en sus labios.

-¿Eres de por aquí, Jace?

Hago como si estoy interesada en él, aun que no pone mucho interés de su parte.  Quiero irme de una vez.

Además, su nombre me suena de algo... Jace, ¿no? ¿Dónde lo he escuchado antes?

-He venido por... asuntos de trabajo. - puntualiza la palabra "trabajo" con una sonrisa burlona.

Este chico me esta tomando el pelo, y lo único que queria era demostrarle a Alex que podia hablar con él. Así que mejor me voy.

Sin decir palabra me levanto de la mesa y voy donde Alex que me mira con los ojos abiertos.

-No has sido capaz... - susurra.

-Si lo he sido. - le corto.- Cuenta.

Alex sale de sus estado de trance para mirame.

-Eh.. si, si.. - farfulla - ¿Tan evidente es?

-Soy muy observadora. - contesto.

-A ver, a Ash la conozco desde que vivo aquí, hemos vivido muchas codas juntos y... hace un año...

-¿Una año que la quieres y aun no se lo dices? - pregunto casi gritando.

-Tss, baja la voz - se queja Alex. - Y si, no se como hacerlo.

-Esta tarde queda con ella a solas, yo estaré 'enferma'. - digo poniendo las comillas en el aire y sonriendo.

-¿Y que hago? ¿Seguro que querrá? - dice nervioso. - ¿No me dirá que esta enferma?

-Lo primero, tranquilizarte. Y lo segundo decirlo lo que sientes o besarle. - le contesto. - Seguro que acepta.

-Vale, gracias. - se levanta para abrazarme. - Me voy a casa ya, luego te cuento. - dice despidiéndose con la mano al salir de la cafetería.

Me quedo sola observando todo el café, me doy cuenta que el chico de antes, Jace, me esta mirando con diversión.

De que me sonará ese nombre... Joder, de que lo he escuchado antes.

Le pego un trago a mi refresco cuando suena mi móvil.  Lo saco del bolsillo y descuelga.

-¿Si?

-¿Skyler? Soy Bairon. - contesta- ¿Donde estas?

-Estoy en el Cafe Brujas - contesto mirando la cafetería distraída.

-Vale, ven a mi casa en dos horas ¿bien?

-Si, claro, hasta luego príncipe del cielo - sigo sonriendo antes de colgar.

Me guardo el móvil en bolsillo y me acabo el refresco sin prestar atención a nada.

Hablar con Alex de sus sentimientos hacia Ash me ha hecho pensar en mi y en Derek.

Pero.. ¿qué? ¿En serio? ¿El imbécil? Lo dicho, mi vida es una película mala.

Me levanto para irme y antes de dar un paso me encuentro cara a cara con Jace.Pego un respingo, me ha asustado el idiota.

-¿Qué quieres? - pregunto cortante.

-Saber tu nombre. -responde tranquilo.

-¿Para que? - digo borde.

-Tu sabes mi nombre, no seria muy justo que tu no me dijeras el tuyo. - sonríe burlón.

-Vale. - Gruño. -Skyler.

Sin esperar respuesta lo esquivo y salgo por la puerta del café.

¿A donde voy?

¿A casa?

No, James no estará y para estar sola...

Así que.. ¿Y si voy con él? No tengo nada que perder y mejor que estar sola. Saco el movil del bolsillo y marco el número.

-¿Si? - contesta su voz ronca al otro lado.

-¿Te vienes a mi casa hasta que tenga que ir a casa de Bairon a no-se-que? -le pregunto.

-¿A no-se-que? - pregunta divertido.

-Si, me ha dicho que vaya en dos horas.

-Vale, de acuerdo. - responde burlon. -Ire en un rato.

-Gracias - digo sonriendo.

Cuelgo y guardo el móvil en su sitio.

Llego a mi casa, entro, y como suponia, James no esta y el único que me recibe es Cerbero con su movimiento de cola alegre.

-Hola, pequeño - digo alegre acariciando al animal la cabeza.

Entro a la cocina y encuentro una nota de James.

Skyler:

He salido con unos amigos todo el fin de semana.

Volveré el lunes por la tarde.

Te quiero.

James.

No se que le pasa que esta siempre fuera de casa y encima, deja a una adolescente de diecisiete años sola. Irresponsables.

El sonido del timbre me saca de mis pensamientos para avisarme de que ya a llegado. Me acerco a la puerta para abrirla pero al otro lado no esta quien yo creía.

Es un hombre de unos treinta y tantos años, pelo negro y corto, con ojos marrones. Parece un gorila de los que están en las puertas de las discotecas.

-¿Si? ¿Que desea? - le digo educada.

-A ti, princesa del infierno - dice son una sonrisa pervertida.

Y sin más, no veo nada.

********

¿Por qué a mi, joder? En otra vida tuve que ser uno de los peores asesinos que a pisado la tierra. ¿Fui Hitler? A lo mejor lo que hacia él era un juego de niños comparado lo que hacia yo en otra vida.

Hace un mes y poco era una chica mas o menos normal que solo sufria un pequeño trauma por el accidente de sus padres.

Nada de Dioses.

Nada de "princesa del infierno".

Nada de Derek.

Nada de los Cinco Hijos de Dioses.

Nada de nada.

Solo James y yo.

Los dos hermanos juntos.

Ahora ya no estamos juntos.

Ahora tengo un guardián.

Ahora tengo a cuatro "hermanos" más.

Soy como la Diosa de una especie sobrenatural.

Joder.

Ahora soy la Hija de Hades, la princesa del infierno. La Diosa del Fuego.

Ahora soy otra, y nadie va a poder conmigo.

Hijos de los Dioses  Where stories live. Discover now