Capitulo 22. ¿Pero... qué demonios es esto?

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28 de octubre:
- Se da por finalizada la fase de “mejoras estéticas” y procedemos a
emplearnos a fondo en el plan de seducción. Sutilezas fuera... Se pasa al ataque directo y despiadado.”

¿Pero qué demonios es esto? Habla de un plan de seducción... ¿De qué le suena a él esa frase? “Plan de seducción”... ”Sí claro, ahora lo recuerdo. Aquella vez que Mario quería que sedujera a Betty para asegurar que no nos robara la empresa, habló de algo así. ¡Como si Betty fuese capaz de una acción de ese tipo!” Sonrió con ternura al recordar a su asistente. ”Oiga pero ¿por qué Mario tiene acá todos estos datos sobre un plan de seducción? ¿A quién ha seducido ese desgraciado?”

De repente una idea viene a su mente, pero no puede creérselo... ”No, no es posible. No creo que Calderón haya puesto en práctica ese plan de seducción con... Betty... Pero lo cierto es que la sedujo... ¡Vaya si la sedujo! ¡Como que ahora son novios! ¿será eso lo que está escrito en estos informes? Usted delira, hermano. Nadie es capaz de hacer algo así... ¿Nadie? Usted por supuesto que no sería capaz... y menos a Betty, tan incondicional, tan leal, tan... ingenua... Sí, eso también... ella es muy inocente y muy ingenua, capaz de creerse cualquier cosa... y más si está enamorada y ella me confesó que estaba enamorada del desgraciado de Mario... A ver, Mendoza, analice a fondo esos informes... “

Volvió a leerlos pero ahora intentando ver si lo que allí decía encajaba con lo que él sabía de la relación entre Mario y Betty. Comenzó por los “Gastos Financieros”. ”Gastos de cafetería... bueno eso puede ser cualquier cosa... Sigamos... “Mejoras Estéticas”... Dentista y La Primorosa... ¡Ummm!
¿Dentista...? ¡Claro el dentista que le quitó los hierros de la boca! ¡Y le hizo creer que le había hecho un precio especial! Y por supuesto “La Primorosa” debe ser la factura que le pasó Modestico... ¿250.000 pesos por una sesión en el salón de belleza? ¡Vaya con Modesto Hermoso...! ¡No me extraña que se haya comprado una casa en una de las urbanizaciones más caras de la ciudad y que tenga acciones en casi todas las empresas importantes del país!
A ver Mendoza, pero no se disperse. ¿Esto significa que Mario pagó la factura del salón de belleza y le hizo creer a Betty que la papeleta que le regaló había sido premiada...? Tengo que llamar a Modestico. Mañana a primera hora lo llamo y le pregunto. Seguro que él me cuenta...”

”Veamos que dicen los otros informes. “Diario de operaciones”. Habla de que el “objetivo” ha tragado el anzuelo... ¿Qué será eso del objetivo? A ver más abajo habla de “mejoras estéticas” y más adelante dice “¡Menudas piernas tiene la fea!” ¡Será desgraciado! Sin duda se refiere al día que Betty cambió su vestuario y llegó a la empresa tan elegante y luciendo sus preciosas piernas... Y dice que el objetivo cada vez confía más en el jefe de la OA... ¡Está muy claro! El objetivo debe ser... Beatriz y el jefe de la OA el mal
nacido de Calderón... ¿Cómo puede hablar de ella en esos términos? Y vea lo que dice acá, Mendoza... que ya “finalizaron las mejoras estéticas con total éxito.” Eso fue cuando pasó por el salón de belleza y la pusieron tan
linda...¡Y la llama “preciada pieza de caza”...! ¡DEGENERADO! Y habla de
“moscones”... Claro se debe referir al día que salimos los cuatro a cenar y a bailar...”

”¿Y el último informe? Acá habla de “estrategias futuras”. Claro, iba planificando paso a paso lo que hacía... ¿Cómo se puede ser tan cruel? Y
ella, pobrecita, confiando en él ciegamente... ¡Y mira que yo le advertí! Claro que ni por un momento podía sospechar algo tan... denigrante... Acá dice que pasa al “ataque directo y despiadado”... ¡Es con usted con quien no voy a tener piedad, Calderón como pueda confirmar que todo esto forma parte de un plan siniestro de seducción!

Cogió el celular en sus manos y marcó el número de Mario. Comunicaba. Seguramente estaba hablando con Beatriz. Ella le había dicho que él lo llamaba todas las noches... Pensó en llamarlo más tarde pero decidió que ese no era un tema para hablarlo por teléfono. Quería tenerlo frente a frente para ver qué explicación le iba a dar. Cada vez estaba más seguro de que la
relación que tenía su amigo con Beatriz no era más que la consecuencia de ese plan siniestro de seducción que había detallado en el archivo de su
computadora... Y ella había caído rendida a sus pies... ”Pobrecita... No me extraña... él es como un ave de rapiña y ella una tierna paloma que resultó
una presa sumamente fácil..”

Pensó en hablar con Betty y contarle todo, pero prefirió esperar. Quería confirmar por boca de su amigo que eso que tenía delante no era producto de su imaginación. Pero estaba casi seguro de que sus deducciones eran certeras.
¡Todo encajaba a la perfección! Lo que le extrañó fue no encontrar más notas del famoso “jefe de la OA”
vanagloriándose de sus éxitos... ”Y si lo confirma, ¿que va a hacer, Mendoza? Porque si Betty se entera de todo esto es que se hunde... se deprime... ¡Y no es para menos! Este desgraciado ha jugado con ella, la ha engañado, la ha utilizado... Y todo para que no se robe la empresa... ¡Ella jamás haría una cosa así, Calderón! Pero claro, cree el ladrón que todos son de su condición... Porque usted si hubiese sido capaz de una acción de ese tipo... En el supuesto que encontrara a alguien capaz de confiarle una empresa como yo se la confié a mi Betty...”

”Calderón... usted va a pagar en el infierno esto que le ha hecho a Betty... Si esto que sospecho es verdad... lo voy a matar... tenga por seguro que lo mato...”

Al día siguiente a la hora del almuerzo cuando Betty se fue con las muchachas a “El Corrientazo”, él aprovechó para llamar a Modestico.

Mo.: ¡Armando Mendoza quiere hablar conmigo! ¡Qué lujo! Dime
Armandito, ¿para qué soy bueno?

A.: ¿Cómo te va, Modestico? Te llamaba porque quería enviarte una muchacha para que la asesoraras con su arreglo... pero ella no debe saber que yo pago la factura... Mario me comentó que habías hecho algo parecido para una amiga de él que trabaja en la empresa... ¿Qué fue exactamente lo que hicieron?

Mo.: ¿Y te contó cómo dejé de la muchacha? Porque la cosa tuvo mérito. Y además ahora la tengo como clienta...

A.: Pues igual con esta otra muchacha pasa lo mismo... ¿Me cuentas cómo la convencieron?

Mo.: Muy fácil... yo le di una papeleta a Marito para que se la entregara y le hicimos creer que le había tocado el premio de una sesión de belleza gratis... Claro que luego Mario me pagó la factura...

Armando pensó para sí que ¡menuda factura! ¡250.000 pesos por una sesión de belleza! ¡Eso era casi un atraco a mano armada!

Mo.: Y ya está, todo lo demás lo dejas en mis manos...

A.: Gracias por todo, Modestico. Te estoy avisando cuando decida lo que voy a hacer con esa muchacha...

Mo.: Ciao, Armando. ¡Es un placer poder ayudarte!

Cuando colgó el teléfono Armando ya estaba convencido del todo de que su
amigo había seducido a Betty para asegurar que no se robara la empresa.

”Esto lo va a pagar bien caro, Calderón. Va a pagar cada lágrima que derrame Betty por usted. Dejo de llamarme Armando Mendoza si no le hago pagar una a una las lágrimas de mi asistente...”

La novia de Mario CalderónKde žijí příběhy. Začni objevovat