Capitulo 0 : Todo tiene una historia.

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Todas las historias tienen un inicio, aveces resulta que con cada paso que damos, nos encontramos en una red de eventos que no podemos pasar desapercibidos, desde el momento en que saludamos a alguien que creemos haber visto antes, o tal vez alguna situación que pensamos irrelevante, de repente se convierte en algo que marca tu vida, en un móvil para seguir adelante, o simplemente en una razón más para querer hundirte y esconderte en tus cicatrices.

10 de Abril 10 años atrás......

El calor empezaba a sentirse en los huesos, el día estaba soleado, no hacía mucho que el clima en Hoftown empezaba a cambiar, las calles estaban repletas de familias que disfrutaban el sol de ese fin de semana, en la calle River se podía observar a una familia, un niño y una niña corrían detrás de un cachorro, en los escalones de la puerta su padre los observaba feliz, tal parecía que para el no había mejor dicha que aquella cuando veía a sus pequeños jugando y disfrutando el tiempo en familia, cerca de los niños su abuela los miraba con una sonrisa incluso más grande que la de su hijo, ella se sentía dichosa de poder pasar uno de sus días libres con sus nietos y con su único hijo, cerca del coche se encontraba la madre intentando apresurar a todos, diciendo que se les haría tarde para la función del cine, ambos niños la miraban como si prefirieran pasar el tiempo con su mascota a sentados en una butaca del cine. Y sinceramente hubiera sido mejor.

Lejos de ahí en una de las zonas en las que solo podían darse el lujo de vivir las familias acomodadas, en la calle Rayban la situación era complicada, un niño pequeño de 10 años jugaba en el pasto de su amplio y verde jardín, estaba tan concentrado con sus juguetes que no se dio cuenta que su hermano mayor pasaba a su lado de la mano de su padre en dirección a la casa, a ese pequeño poco le importaba lo que tenia que hablar su tonto hermano mayor, hace apenas unas horas ambos habían discutido acerca de quien iría con su abuelo a comprar los dulces, y si lo pensamos ahora, una discusión así seria ajena a cualquier sentimiento después de lo que se avecinaba.

La niña subió al coche enojada ya que su hermano le había ganado el puesto delantero, no era como si fuera mucho más grande que ella, solo eran 5 años, la pequeña de 9 y el de 14, pero eso era suficiente en la mente de su hermano.

-Roy recuerda ponerte el cinturón, no quiero que multen a tu padre- Rose su madre seguía viendo su teléfono mientras le hablaba al pequeño Roy.

-Claro mamá, ¿la abuela vendrá?- pregunto el niño dirigiendo su atención a su padre que miraba por el retrovisor.

-Si, mira ya esta subiendo, ¿mamá estas segura de querer ir del lado de la ventana?- decía mientras su madre se sentaba justo detrás de el.

-Papá yo quiero ir en el lugar de Roy- La pequeña Stephanie seguía con su puchero mientras cruzada de brazos se sentaba en medio de su madre y su abuela.

Su padre solo la miro y le guiño un ojo, y fue ahí cuando ella se dio cuenta que de regreso sería su turno, así que se acomodo en su asiento, dejando su pequeño cuerpo descansar en los brazos de su abuela.

Por otro lado, en la casa del pequeño Jason todo seguía como antes, el jugando solo mientras que su padre y su hermano estaban hablando en le balcón que correspondía al salón del segundo piso, ese día la señora Robins había tenido el día libre así que no podía jugar con nadie que no fuera el mismo, y en su mente de niño pequeño ni si quiera paso la idea de ir con su padre y su hermano a ver de que hablaban, o a preguntarles si querían jugar con él, sabía de ante mano que la respuesta sería un no, aunque hubiera sido mejor que tan solo lo intentara.

El coche de la familia Robins arranco con una conversación sin importancia mientras que Roy escuchaba música y Stephanie dormía en los brazos de su abuela, todo parecía normal, un hermoso día, una familia feliz, pero sin duda alguna era mejor jugar con el cachorro en casa, lo siguiente que paso, fue que alguien no pensaba en ese como un día familiar, una persona con exceso de alcohol en su sangre había pasado el alto justo en la calle en la que el carro de la familia Robins circulaba, el impacto fue del lado del conductor, el padre, Peter quedo inconsciente no sin antes mirar preocupado a su hijo que desabrochaba su cinturón de seguridad, las cosas pasaron tan rápido, en el asiento de atrás la abuela soltó a su nieta solo para tener una muerte instantánea, la madre inconsciente, y el pequeño Roy que había elegido salvar a su pequeña hermana, Stephanie despertó solo para encontrarse con que estaba camino a un golpe con el limpia parabrisas, en ese momento algo la detuvo, sus ojos comenzaban a cerrarse lo ultimo que recuerda, su hermano, su sonrisa, su abrazo, y la oscuridad.

En la casa de Jason las cosas no serían mejores, una nube cubrió el sol, el pequeño Jason se llevo una mano a su rostro para mirar el cielo, pero sus ojos no verían solo el cielo, ahí en el balcón, donde su padre y su hermano se encontraban vio una figura caer, al principio no se dio cuenta, lo oculto, no quiso saber que paso, que vio, como sucedió, su corazón, su mente, todo, se rompió, su padre caía inerte en el pasto enfrente de donde jugaba, y él cayo en algo mucho más oscuro, algo de lo cual no sabría si podía salir.

10 de Marzo en la actualidad

Dos jóvenes, se levantaban sudando, llorando y con su rostro pálido, ambos tuvieron la misma pesadilla, acerca del día en el que a los dos la vida les cambio, ambos, miraron al cielo y se preguntaron, ¿Por qué a mí?

Two sides of meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora