— ¡Vamos al cine! Hace años que no veo una película ¿Qué estará de moda ahora?

Tomando su mano, observando en todas direcciones.

— Bien, al cine entonces ¿Por dónde?

— Está cerca, podemos ir caminando.

— ¿Con esta lluvia?

Observé a mi alrededor.

— Tienes razón, mejor vamos en auto.

Asintió, guiándome hacia este, protegiendo mi cabeza mientras subía, y tras de mí, subió él.

— Estoy emocionada.

Sentándome en sus piernas.

— ¿Te duele algo? ¿Estás bien? Te veo demasiado animada.

— Si me duele, pero es totalmente tolerable, y pronto podré quitarme este molesto yeso, podré trabajar y hacer de las mías ¿Sabes cuánto tiempo he esperado para vengarme?

— Ten cuidado por favor, y si alguien te pone una mano encima, yo...

— Yo misma le cortaré la mano, tranquilo — acariciando su rostro— Dime tú ¿A quien elegí para ser mi marido?

— A mí...

— Así es, y pienso casarme contigo pase lo que pase.

— ¿Cuándo? Yo... yo solo quiero que seas mía.

Escondiendo su rostro en el hueco entre mi cuello y hombro.

Estaba claramente avergonzado.

— Hagamos esto, yo buscaré vestidos, decoración de salón, el pastel, los partes y todos los detalles desde aquí, Luka se encargará de hacerlo realidad desde casa, y cuando termine el trabajo, nos casamos.

— ¿Lo dices en serio? ¿Nos casaremos de inmediato? — levantando la cabeza, emocionado— ¿Apenas regreses?

— Así es galán, así que estaré enviándote un montón de fotografías para que nuestra boda sea preciosa ¿Dónde la haremos? ¿En casa?

Balanceando mis pies.

No alcanzaba a tocar el piso estando sobre Alexei.

— Estaré esperando esas fotografías entonces, los chicos se encarguen de todo, arrendaré un gran lugar que nos proteja de la nieve y el frío, así, podremos festejar hasta que se te caigan los pies.

— ¡Sí! En ese caso, buscaré decoraciones para salones de eventos, será una gran fiesta ¿podemos invitar al viejo y a Abby? Estoy segura de que estarán muy felices de estar en nuestra boda, también a Cass, Jeff, sus hijos y los demás, a mi madre, su novio, a todos los chicos que trabajan para ti, les debo una noche de alcohol desenfrenada ¿A quien invitarás tú? ¿Qué hay de tu familia? Siempre... te he visto... solo...

Se tensó bajo mi cuerpo, al parecer, acabo de presionar un botón sensible.

Quizá no debí preguntar eso.

— Llegamos al cine.

Dijo de pronto.

— Alexei... lo siento, no quise tocar un tema difícil.

El chofer abrió la puerta para nosotros, cubriéndonos bajo un paraguas, salí yo primero, esperando a Alexei.

— Sí... yo... es una historia difícil, te contaré todo.

Suspirando.

— Si no quieres ir al cine está bien, podemos ir a otro lugar.

Estaba observando asqueado el lugar, al parecer, había muchas personas.

Despiadado.Where stories live. Discover now