Rebelde *Matsquare*

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Narra Matias:

Llego al aula y para mí sorpresa Rodrigo ya estaba en el aula. Estamos los dos solos

R: buen día Candia

M: hola - voy a mí banco y me acuesto

R: dormiste? ¿Cuántas horas?

M: si, tres horas

R: Matias, por favor dormí bien

M: si - me cae bien, pero no me gusta que me diga que hacer, no soy un nenito - ¿No te tenemos a la última tu clase?

R: sí, pero yo tengo cuatro materias. Matemática, contabilidad, tutoría y catequesis

M: catequesis? Pff - me río

R: de qué te reís?

M: no me esperaba que des catequesis

R: no soy creyente, es más, soy ateo

M: entonces?

R: me interesa ver cómo piensan ustedes sobre la religión

M: que días te tenemos?

R: todos menos los lunes. No me vas a extrañar - empieza a llegar el resto, todas las chicas tratan de chamuyárselo, él solo se ríe y las ignora - bueno, sientense que ya empezó la hora y no quiero perder tiempo - comienza a dar contabilidad, todo lo relacionado a números no lo entiendo. Ademas hablar de plata me pone de mal humor. Me acuesto, se me están cerrando los ojos, no tengo pensado darle atención a esta clase así que me duermo

R: Candia - golpea mí banco - o empezas a prestar atención a mis clases o te pasas al frente, no podes dormir siempre

M: bueno dale - se vuelve al pizarrón y yo me acuesto nuevamente

R: Candia, no salís al recreo

M: mejor

R: entonces te quedas conmigo resolviendo cuentas - lo miro con cierta bronca y él me sonríe

Suena el timbre y se van todos. Rodrigo se acerca y se sienta al lado

M: voy a tener que hacer eso? ¿En serio? - digo al ver los ejercicios

R: por qué no lo tendrías que hacer? Si dejaras de faltarme el respeto no tendrías que hacerlo en un principio

M: profe no entiendo nada - me mira sonriendo, ¿por qué sonríe de esa forma tan atractiva?

R: por más de que me trates con cariño diciéndome profe ahora no me va a cambiar la opinión de que hagas ese trabajo

M: pero no lo entiendo, ¿Cómo querés que lo haga?

R: prestá atención y avisame en que parte te perdés ¿Si? - asiento, se acerca y en la primera que me distraigo en mirarle la cara ya no le encuentro sentido a la cuenta

M: me perdí - trata de contener la risa

R: solo sumé y bajé un renglón Matias - me explica de nuevo - ¿Entendés? - pregunta con una sonrisa - ¿Tenés calor Mati? Estás rojo

M: no, solo me pareció linda su sonrisa

R: ay, ejem... Candia - se sonroja - sigamos con esto

M: no era para chamuyarte, solo para que no te preocupes. Tranquilo

R: está bien - continua haciendo la cuenta - ¿prestaste atención en como llegué a eso?

M: sí, pero no lo entendí

R: tratá de llegar a lo mismo Mati - lo trato de hacer, siento la presión en su mirada - no así no, dame la lapicera - me la saca, me muestra y me pasa la lapicera nuevamente - dejá de chupar la lapicera Candia, es mía, la llenás de baba