Naruto Hatake

Naruto Hatake. capítulo 2

Naruto Hatake

Capítulo 2: ¿En qué me he metido?

El llanto fue lo primero que despertó al cansado ninja ANBU, Kakashi gimió mientras se levantaba de su cama. Todavía tenía la mayor parte de su uniforme, había estado tan cansado que acababa de estrellarse en su cama, incluso su máscara todavía estaba puesta, pero generalmente dormía con ella de todos modos. Estuvo puesto tanto tiempo que a veces se olvidaba de quitárselo cuando se duchaba. Pero ahora el llanto de Naruto despertó al joven ninja.

Suspiró mientras se frotaba el ojo cansado y salía de su habitación. Todavía vivía en su apartamento, no era un lugar tan grande pero, de nuevo, no había necesitado un lugar grande, seguro que todavía tenía la antigua casa de sus padres, pero después de lo que sucedió con su padre suicidándose, simplemente no podía ' Vivo allí. Aunque sabía que cuando Naruto creciera este lugar no sería suficiente y podría tener que mudarse, Kakashi sabía que siempre podría venderlo, pero había estado en su familia durante dos generaciones.

Se dirigió a la habitación de Naruto, solo era una habitación pequeña que usaba para guardar cosas, pero sacó todas esas cosas para hacer espacio para la cuna de Naruto y otras cosas. Encendió la luz cegado por un momento cuando la picadura de la luz repentina golpeó su ojo. Parpadeó y vio la escena, la habitación era blanca pero planeaba arreglarla un poco con más color en algún momento. Estaba la cuna, una mesa para cambiar pañales y algunas otras cosas.

Se acercó a la cuna de Naruto y miró al joven. "¿Cómo puede alguien tan pequeño tener pulmones tan poderosos?" se preguntó a sí mismo mientras levantaba al bebé que lloraba.

Meció a Naruto suavemente tratando de calmarlo. Habían pasado tres meses desde la noche que acogió a Naruto, y no había tenido una noche de sueño decente desde entonces. Seguro que había pasado días sin dormir en misiones, pero esto llevó las cosas a un nivel completamente nuevo. Juró que deberían dejar que los ninjas se ocuparan de los bebés para esos entrenamientos de privación del sueño.

"Ahí ahí, ¿qué pasa, pequeño? ¿Tienes hambre otra vez?" Kakashi no podía creer cuánto comía el pequeño. Era un poco increíble que alguien tan pequeño tuviera tal estómago. No podía oler nada, gracias a Dios, así que no era para cambiar. Llevó a Naruto a la cocina mientras iba a buscar una botella. El pequeño rubio estaba vestido de naranja, por alguna razón parecía gustarle el color. Kakashi siempre tuvo problemas para vestirlo con otros colores; lanzaba ataques por alguna razón a menos que fuera naranja.

Sacó una botella de la nevera y usó un pequeño jutsu para calentarla. Era solo una simple calefacción que se usaba cuando estabas atrapado en el frío. Principalmente usaste tu chakra, la energía vital que todos los ninjas entrenados para usar, principalmente para hacer una manta de calidez a tu alrededor. Simplemente lo usó en su mano hasta que la botella estuvo agradable y tibia. Ajustó a Naruto y el bebé se alimentó con entusiasmo del biberón.

"Ahí tienes", dijo cerrando suavemente el refrigerador con el pie y caminándolo por el apartamento. Descubrió que esto parecía calmarlo. "Hombre, sé que dije que cuidaría de ti, pero quién sabía que esto era tan difícil. Me alegra por todas esas misiones de niñera de rango D que tuve cuando era niño".

Se estremeció ante los recuerdos de esas misiones, no fueron experiencias agradables, pero al menos obtuvo algo útil y estaba poniendo todo eso a trabajar. Naruto finalmente terminó y Kakashi comenzó a darle palmaditas en la espalda para hacerlo eructar. Escuchó el sonido y sonrió, pero luego se congeló sintiendo que algo cálido se deslizaba sobre su hombro.

"Me olvidé de ponerme una torre de nuevo, ¿no?" le preguntó al pequeño Naruto que se rió. Kakashi sabía que ahora tenía algo de regurgitación en el hombro. Estaba cansado y se olvidó de ponerse ese maldito trapo de vez en cuando. Encontró algo más, limpiar esas cosas de un uniforme ninja no fue fácil. Suspiró y procedió a caminar con Naruto meciéndolo un poco. El niño tardó casi una hora en dormir, tenía mucha energía y siempre estaba mirando alrededor del lugar.