Zhong Ji Lan Yin | El Último Sello Azul [Completa]

Capítulo 77

Su Qing atrapó el anzuelo que había lanzado Lu QingBai y aprovechó para evitar la mirada de Hu BuGui.

Después de un largo momento, Hu BuGui finalmente dio un aburrido "Bien". Mientras Su Qing tiraba del gancho después de colocarlo en su posición, no pudo resistirse a mirarlo.

Hu BuGui no lo miraba. Sólo tenía la cabeza agachada y los ojos bajos. El globo de la crisálida de la vida emitía una suave luz que atravesaba el escudo protector de su cara y caía sobre sus ojos. Tenían un aspecto inexpresivamente tenue.

Parecía que una vez más había algo que los separaba. Ninguno de los dos habló. Ambas partes permanecieron en silencio durante mucho tiempo antes de que Su Qing pulsara el botón y dijera en voz baja: "Este es el último. Deberíamos prepararnos para subir".

Hu BuGui asintió. Su Qing sintió que podía ver la decepción de Hu BuGui en la mitad expuesta de su cara. Incluso sintió que le daba pena. Su corazón se ablandó de repente.

Hu BuGui se volvió. "Sube primero".

Había una guerra colosal en el corazón de Su Qing. No se negó cortésmente. Pisó con cuidado las grietas de la pared irregular. Cuando pasó junto a Hu BuGui, éste extendió automáticamente una mano para sostener su cintura en un gesto de protección. Antes de que el pie levantado de Su Qing pudiera caer, se detuvo en el aire. A una distancia muy cercana, levantó la cabeza para mirar a Hu BuGui durante un rato.

El escrutinio en su mirada era demasiado pesado. Hu BuGui no pudo resistirse a preguntar: "¿Qué pasa?"

Su Qing frunció los labios y finalmente dijo en voz baja: "Cuando fui a ver al profesor Cheng ese día, había visto un dibujo de Cheng Ge que me trajo TuTu".

Los ojos de Hu BuGui se abrieron de repente. Lo miró como si no se atreviera a creerlo y también como si estuviera loco de alegría. Su Qing evitó su mirada. Los dos estaban en un lugar especialmente peligroso. Sus pechos estaban apretados. Una de las manos de Hu BuGui sostenía la cintura de Su Qing, y la otra sostenía el cable de su ropa protectora. Entre ellos se encontraba la voluminosa ropa protectora. Incluso sus cabezas estaban rodeadas de ridículos escudos, como las imágenes de los astronautas americanos del siglo pasado. Pero Hu BuGui sintió que nunca antes había estado tan cerca de Su Qing.

Su Qing bajó la voz y rápidamente explicó todo con claridad. "Al final, Xu RuChong me dijo que el dibujo de Cheng Ge no estaba relacionado con él".

Ambos sabían lo que esto significaba. El pequeño corazón de Hu BuGui, impulsado por la brisa primaveral, aterrizó finalmente en el suelo. Se le cortó la respiración. "¿Eso es lo que te dijo Xu RuChong?"

Su Qing asintió.

Justo entonces, la voz de Lu QingBai llegó desde arriba. "¡Hey, ustedes dos, dejen de cobrar y arrimarse allá abajo, apúrense!"

Hu BuGui le dirigió una mirada profunda, y Su Qing finalmente puso el pie en el suelo y se agarró al cable protector, planeando subir. Pero Hu BuGui le agarró la muñeca. "Diciéndome esto, ¿no tienes miedo de que yo sea la persona a la que se refería? Si lo soy... ¿entonces qué?"

Su Qing lo miró fijamente, sacó su mano de la palma de Hu BuGui y le pasó el guante por el cuello. Una sonrisa se dibujó lentamente en su rostro. Dijo: "Entonces te mataré".

Obviamente, estas palabras no eran ningún tipo de declaración de amor, pero cuando los dos habían subido, Lu QingBai seguía percibiendo, de alguna manera, un pequeño toque de color rosa en Hu BuGui. Miró con desconfianza el rostro siempre inexpresivo de Hu BuGui y sacudió la cabeza con un escalofrío.

Desde el sótano, habían sacado en total a unas diez personas en mantas transparentes. Todavía había cables atados a ellos. Lu QingBai los colocó, evitando cuidadosamente los cerebros y los cables en el suelo. Hu BuGui preguntó: "¿Cómo los manejamos?"