Monica: conociendo los placeres

Fruta Prohibida

En este capitulo les contare como es que conocí mas a fondo a Kate, la amiga de Tania

Mi vida con Rodolfo fue lo mas lindo, siempre atento me consentía y hacia lo posible de que estuviera cómoda viviendo con el, para la gente yo era una sobrina que había llegado, con la gente que lo conocía me comportaba como tal, incluso en ocasiones le decía tio pero estando en lugares que nadie nos conocía éramos pareja, al momento ya llevábamos un año de relacion, ya contaba con 43 años casi llegando a los 44, de mi parte llevaba año y medio de universidad estaba a dos semanas de cumplir los 19, era muy responsable en cumplir mis deberes de la escuela y asi poder tener tiempo de andar de traviesa. Con Javier teníamos buena relacion de amistad, nos llevábamos muy bien los tres, en ocasiones lo invitábamos a comer un fin de semana, ver alguna película o jugar algún juego de mesa, en ocasiones salía con el ya sea después de clase o igual un fin de semana, me contaba que había cambiado de trabajo y que en ocasiones tendría que viajar a otros estados del país, me alegre por su nuevo trabajo pero a la vez no mucho por que cuando Rodolfo estaba ocupado Javier estaba disponible, pero en fin la cosas tenían que continuar.

Tres días después me comento que saldría y que estará un mes fuera, por lo que me pidió estar con el antes de que se fuera, le platique a Rodolfo de que si podría quedarse una noche antes de que se fuera, acepto sin compromisos. Fue un miércoles, donde el tendría que irse el jueves temprano, acordó de llegar como eso de las 6 de la tarde, de mi parte llegue a las dos, hice algo de los deberes de la casa y que se viera limpia, se me fue rápido el tiempo y justo cuando llego yo apenas me iba a duchar.

Toco el timbre, vi la hora y efectivamente eran las 6, 15 minutos después de las 6, sali a recibirlo, lo salude y le dije que me esperara mientras me duchaba, el se quedo en el sofá, prendió la tele para verla un rato en lo que yo regresaba, llegue al cuarto y saque un vestido blanco, de tirantes, el vestido era fresco y debajo nadamas una tanga del mismo color y lo deje en la cama entre a la regadera y comencé a ducharme, el agua estaba rica, tibia, comencé en lavarme mi pelo, enseguida mis brazos y hombros, después mis pechos, abdomen para seguir con mis pies, terminando con mi zona vagina, quería que estuviera limpia y con la piel suave, para tener un rato agradable, mientras seguía bañándome, cerré los ojos y los abrí inmediatamente, oh sorpresa, tenia a Javier dentro del baño totalmente desnudo, con la verga erecta, masajeándosela, viéndome como me bañaba, se metió y sin decir palabras por parte de los dos, me empezó a besar, se fue mojando junto conmigo, los dos besándonos bajo la regadera, me tomo de mis senos y los empezó a chuparlos, cerré los ojo mientras lo hacia, regreso a mi boca y como mi primer acto, baje a su entrepierna, su verga toda dura y goteando por el agua de la regadera, la metí en mi boca y la chupe, la escupia y lo masturbaba, poco a poco me iba calentando, me jalo para levantarme y me volteo, mirando a la pared, tomo su verga y la fue metiendo, poco a poco la metió hasta tenerla dentro, di un gemido de placer y la saco completa, enseguida la volvió a meter y la dejo un rato, asi en varias ocasiones, seguía con sus envestidas, me tomaba de mis senos para darse apoyo y metérmela dentro, sentía super rico cuando me la metía, el agua hacia mas fácil y con mis fluidos hacia que sus verga entrara por si sola, se escuchaba el ruido de fricción entre mis labios y verga. Se detuvo y salió de la regadera, al igual yo, salimos y nos secamos, me dijo que tenia algo de hambre, le dije que tenia comida ya lista, se puso la ropa que traía mientras yo me puse el vestido y la tanga, medio arregle mi cabello y después fui a la cocina a comer, platicábamos de lo que seria el viaje y el tiempo que iba a estar fuera, me decía que lamentaba no poder estar en mi cumpleaños, pero que me hablaría para felicitarme durante el día, cuando estábamos comiendo solo el teléfono de casa, era Rodolfo, me comentaba que se quedaría en un hotel y no poder interrumpirnos, yo me quede algo confundida pero lo entendía, me deseo que nos la pasáramos bien y que al siguiente día nos viéramos, colgué el teléfono y regrese a la mesa, le comente a Javier y vi su cara de felicidad que era obvia, no tendría de que preocuparse y solamente estaríamos los dos solos