Nuevo equipo [2]

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Era un tranquilo lunes cuando se dieron cuenta que Hinata no había venido cosa que era raro viniendo de él ya que aunque estuviera enfermo, se rompiera el pie o le quedaran dos días de vida, siempre venía al entrenamiento.

Ukai al darse cuenta que ya notaron su ausencia los llamó para darles la noticia.

-Como ya os podéis dar cuenta, Hinata no ha venido ya qu...

-¡¿Le ha pasado algo a Hinata?!- Le interrumpió la mamá cuervo preocupado por el bebé cuervo del Karasuno.

-Ejem,- continuó hablando el entrenador- . Como iba diciéndoles, Hinata no ha podido venir hoy ya que se ha tenido que mudar y, por lo tanto, cambiar de preparatoria.

-¡¿Qué?!-Dijeron todos, algunos más fuerte, otros más bajito.

-Ahorren las preguntas, no tengo más información sobre esto aparte de lo que ya os he dicho- Dijo Ukai para no tener que aguantar una posible sesión de enterrogatorio.- Ahora vayan a seguir entrenando.

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Ese mismo día, Hinata ya estaba en la nueva casa, el día anterior habían llevado con un camión de mudanzas todos los muebles necesarios para vivir ahí. Todavía faltaban colocar gran parte de ellos pero eso podía esperar a próximos días. Estaba yendo esperando que le dieran el examen para entrar a la preparatoria de vuelta con la nota para saber si entraría o no.
De golpe siente la voz del profesor entregándole la nota y, a saber cómo, gracias a un milagro aprobó el examen.

Y el profesor antes mencionado le llevó hasta la clase dónde estaría para que se presentara y luego le dijo a un tal Okisa Ishigami que le enseñara el instituto al pelinaranja. Su nuevo compañero tenía el pelo rubio, ojos negros y piel clara. Era alto si lo comparamos con el enano de Hinata pero aún así no daba nada de miedo, todo lo contrario, parecía una buena persona.
Así fue como estuvieron hablando un buen rato mientras su nuevo amigo le presentaba la preparatoria. Cuando sonó el timbre, Ishigami le pasó su número a la mandarina y cuando estaban por separarse, sienten una voz:

-Chibi-Chan, ¿qué haces aquí?- Era la voz del Gran Rey.

-Eh, pu...- Iba a contestar cuando Ishigami me interrumpió.

-Se ha tenido que mudar y cambiar de preparatoria, ¿y quién eres tú?

-¿Seguro que es  porque te mudaste?- Dijo Oikawa en un tono burlón ignorando la pregunta del rubio.

-Tch- Dijo el más bajo.- Vámonos, Ishigami.

-¡Hey!, ¿no vas a unirte al club de voleibol o qué?- Dijo rápidamente pelicastaño.

Hinata lo miró fijamente por unos pocos segundos y suspiró para después decir:

-Sí...

-¡Pues ven a decirle al entrenador!- Le dijo el más alto al enano mientras lo cogía del brazo para llevarlo a la fuerza.

-¡Ya voy! ¡Ya voy-Decía intentando salir del agarre.

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En cuando llegaron a la puerta del gimnasio, Oikawa se fue a entrenar y cuando Hinata observó que nadie le vería, intentó pasar sin que se dieran caso, pero fue en vano ya que hizo más ruido de lo que se pensaba y todos se dieron cuenta de su presencia. El entrenador, al verlo llevó hasta fuera del gimnasio y le dijo:

-¿Qué haces aquí?

A lo cual el pelinaranja respondió explicándole con un tono triste sobre que se había mudado y que ahora iba en esta preparatoria.

-Y quieres entrar en el club de voleibol- adivinó el entrenador.

-Sí, bueno..., si es que es posible...

El más alto dio un suspiro y dijo:

-Para eso tienes que avisar con un poco de antelación. Por ahora, ves a entrenar con Oikawa.

Acto seguido, llamó al pelimarrón que estaba practicando saques y le dice que practiquen juntos algunos remates.

-Vamos- dijo el Gran Rey arrastrando al más pequeño.

-¡Hey! ¡Qué me haces daño!- Decía el pelinaranja intentando liberarse.

-¡No opongas resistencia, Chibi-chan! ¡Vamos a practicar los remates como dijo el entrenador!

Con todo el ruido que hacían eran el centro dr atención, y eso hacía que Hinata se pusiera de un tono carmesí casi imposible de ver a menos que te fijaras.

Rápidamente hicieron un remate en tiempo menor, Hinata se sentía mal de hacer eso con alguien que no era el Karasuno pero lo tenía que aceptar, ahora estaba en otro equipo.
Al verlos, algunos pocos se sorprendieron de que lo lograron a la primera pero otros ya se lo esperaban. Aunque no quisieran, sabían que Hinata corría  muy rápido y saltaba mucho mientras que Oikawa saba igual con quién esté, lograba sincronizarse perfectamente con cualquier rematador.

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Antes de que se diera cuenta, ya se había terminado el entrenamiento y antes de que se vaya a su casa, el entrenador lo detiene diciéndole que vaya a por su ropa del equipo.

Hinata al salir del gimnasio se encuentra a Ishigami saliendo del edificio y juntos van a por la ropa del equipo de Hinata.

-¿Cómo es que aún estabas aquí cuando acabé el entrenamiento? Antes no vi que fueras a ningún club ni nada- Pregunta Hinata después de salir de la preparatoria

-Lo que pasa es que estoy en el club de manualidades y bueno, la mayoría de los que están allí tienen que hacer algo antes de ir como comprar materiales y/u otras cosas por lo tanto, empieza unos 20 minutos después de un club normal.- Dice tranquilamente.

Justo cuando Hinata iba a decir algo, se pudo oír una notificación.
Era el móvil del de pelo naranja así que este último sacó el teléfono y Ishigami se atrevió a preguntar.

-¿Quién es? Perdón por preguntar, soy muy curioso.

-Ah, tranquilo, es Kageyama...- y contestó el mensaje.

-¿Es de tu antigua escuela?- Pregunta el más alto.

-Sí... Es de mi equipo. Bueno, era...

-Lo siento...

-Ah, no, tranquilo, no pasa nada.- Dice rápidamente el pelinaranja al ver que su amigo se siente culpable por preguntar.- Solo está preguntando por qué no le había dicho que me iba antes...

-¿No le habías dicho a nadie?- Dijo el pelirubio al oír lo último.

-No, bueno, solo a los profesores pero a nadie más, no quería preocuparlos.

-Te entiendo, a veces te pasa algo pero no dices nada para no preocupar a nadie...

-¿Estás bien?- Pregunta el enano al ver que el contrario tiene una mirada triste apuntando al suelo.

Antes de que pueda decir nada más, ya habían llegado a la casa del ojinegro así que se despidieron y Hinata siguió recto hasta su casa.

Yeh, 1068 palabras jeje, perdón por interrumpir la lectura pero es un logro para mi, más de 1k de palabras en un capítulo uwu

Una historia OiHinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora