Destinos Entrecruzados.

El fin... ¿Un nuevo comienzo?

Narrador POV.

Muchas veces, la vida no te da las satisfacciones que buscas, ni siquiera te permite disfrutar de los pequeños momentos. A algunas personas les sucede con el dinero, a otras con la pequeña cuota de poder que sus trabajos les permiten alcanzar y muchísimas otras, sufren con el amor.

Este es el caso de nuestro protagonista, Jake Jacobs, un exitoso luchador profesional de 27 años de edad. A pesar de haber conseguido varios títulos mundiales alrededor del mundo y en el país donde se hizo famoso, Japón, nunca se sintió completo.

Quizás fue el hecho de que su padre no quiso hacerse cargo de él, luego de la muerte repentina de su madre cuando él tenía 12 años. O quizás, el hecho de que a pesar de su buen porte físico y su evidente lindura gracias a unos ojos color verde esmeralda entre otras cosas, siempre haya fracasado en el amor.

Y es que, a pesar de haberlo intentado más de una vez, sus relaciones nunca acababan como él quería. Quizás es porque desde muy joven siempre quiso lo que él nunca tuvo, una familia unida que lo esperase en casa y en la que todos confiarán en todos. Pero podría entenderlo a una edad joven, en la que todavía muchos y muchas no tienen decidido que hacer de sus vidas. Pero a su edad, pensaba que podría encontrar a alguien que tuviese sus objetivos claros. Aún resonaba en su mente la última conversación que había tenido con su ex hace un año atrás.

"– Hiromu... ¿Puedo preguntarte algo?- Dijo, mientras miraba a la chica, sumamente nervioso por la pregunta que se avecinaba.

- Pero por supuesto que sí, cariño, ¿Qué es lo que sucede?- Esa repuesta le dio esperanza en que la respuesta que fuese a recibir, fuese la que él estaba esperando... Gran error.

- ¿Quieres casarte conmigo?- Preguntó, para apoyar una de sus rodillas en el suelo, abriendo una pequeña cajita que contenía el anillo de plata con un pequeño diamante por encima.

- Jake... Por supuesto que no.- Esa respuesta lo destruyó, en todos los sentidos posibles.- Sabes bien que no quiero casarme, lo había dejado claro. Tampoco niños, arruinarían mi figura, y no poseo la paciencia requerida para criarlos.-

- Discúlpame...- Dijo, para retirarse del recinto, sin mediar palabra alguna."

Jake POV.

Me desperté agitado y con los ojos apenas aguados, como si ese día hubiese vuelto a mi memoria por enésima vez desde que ocurrió. Ese maldito día, en que volví a fallar, en todo sentido. Ese día donde el amor volvió a ilusionarme, para escupirme en la cara y luego reírse frente a mí.

Desde aquel día no he tenido nada más que relaciones de solo una noche, quizás dos, y luego cada uno vuelve por el mismo lugar por donde vino. Ya no creo en el amor, no creo en las promesas de amor eterno, no creo en absolutamente nada. La vida me dio la espalda una y otra vez en ese sentido, ahora sería yo quién le daría la espalda.

No me importaba que la vida me pusiese a la mujer más hermosa del mundo frente a mis ojos, no sería más que una simple diversión de una o dos noches para ambos, y allí se terminaría todo. Nada de volver a darme oportunidades para enamorarme. Ya me había demostrado que no servía para esa materia.

Esa misma noche sería la cena de gala de NJPW, la empresa más conocida de Japón y una de las más aclamadas del mundo, de la cual soy el campeón máximo actualmente. Todo el mundo llevaría a sus parejas, si las tuvieran, el cual no era mi caso.

- Entonces, ¿Vas a volver a venir solo este año?- Pregunto Kazuchida, uno de mis mejores amigos dentro de la empresa, y en la vida en general.

- Sep, ¿Para qué contratar una acompañante?- Dije, refiriéndome a la idea que él había sugerido hacía solo unas semanas atrás.