Transmigrando al amigo de la infancia carne de cañón del rompecorazones

Capítulo 12

Después de su renacimiento no había nada con lo que estar obsesionado. Ni una sola venganza que debiera ser vengada de su vida anterior, todos los que debían morir habían muerto.

En su adolescencia, su único arrepentimiento fue probablemente la muerte de la abuela Chen durante su tercer año de secundaria, aparte de eso, nada podía afectar sus emociones.

Incluso ir a Linshui para recolectar evidencia del uso de drogas de Wang Beidan, solo lo hizo porque la familia Wang se había metido con él primero. Lo mismo ocurrió con la pareja de madre e hijo.

Después del renacimiento, el joven maestro Xie, que había causado tormentas sangrientas en la ciudad A en su vida anterior, ahora era mucho más indiferente y tranquilo que antes.

*

Después de que la tienda de té con leche cerrara, Song Yu llevó a Xie Sui a comprar una tarjeta telefónica.

"Después de tener un teléfono celular, podemos mantenernos en contacto en línea. Ahora que corro por aquí todos los días, mi abuela comienza a tener curiosidad."

Caminando por la calle, Xie Sui sonrió, "¿Qué le dijiste?"

Song Yu: "¿Qué más puedo decir? ¿No obtuviste el primer lugar en los exámenes de ingreso a la escuela secundaria? Le dije que conocía a un dios del estudio  y vine a pedir consejos sobre el estudio."

Xie Sui sonrió, recordando el trabajo de matemáticas de Song Yu que no pudo soportar ver ayer, "Qué honor."

Pero no había necesidad de pedir consejo, era inútil.

Llegaron a una intersección. Todavía quedaban diez segundos en la luz verde, cuando Song Yu lo vio, tomó la mano de Xie Sui y comenzó a correr.

"Vamos."

Xie Sui se sorprendió cuando el adolescente le agarró la muñeca y se precipitó hacia delante.

La puesta de sol iluminaba la tierra con un tono anaranjado y el viento olía a alcanfor. A lo lejos se oye el sonido del claxon de los coches, el zumbido de la radio y las voces de los transeúntes charlando.

Observó la espalda de Song Yu, con ojos cada vez más oscuros y profundos.

Perdieron mucho tiempo en la tienda haciendo cola para conseguir una tarjeta telefónica.

Cuando les llegó el turno, ya eran las siete de la tarde.

"Guarda mi número de teléfono primero, luego agrégueme en QQ."

Xie Sui introdujo el número, buscó entre los contactos y vio "Tu esposo hermano Yu", y se burlo suavemente en su corazón, era realmente un niño.

"¿Por qué elegiste este nombre?"

Song Yu respondió sin rodeos: "Es genial."

Aprobó la solicitud de amistad.

Song Yu descubrió que el nombre de usuario de Xie Sui era un punto, su firma personal era también un punto, y su imagen de perfil era negro puro, pareciendo incluso más de mediana edad que él.

"¿Punto-kun? Hola."

Xie Sui: "......"

Cuando salieron, Song Yu sintió sed y fue a comprar una botella de agua en una pequeña tienda que estaba cerca. Al pagar, recogió una bolsa de mentas.

Le gustaba la menta, el limón y otros sabores frescos, se sentían refrescantes en su boca e incluso le hacían sentir que gran parte del calor y la sequedad del verano habían desaparecido.

Mientras caminaban hacia la calle Lianyun, el tráfico disminuyó lentamente e incluso las luces se atenuaron.

"¿Quieres un poco?" Song Yu le ofreció las mentas a Xie Sui.

A Xie Sui no le gustaban los dulces, sacudió la cabeza.

"Oh." Song Yu guardó los dulces.

En ese momento, una voz sombría y fría sonó de repente frente a ellos.

"Quiero comerlo, amiguito, ¿puedes darme un poco?"

Sus palabras fueron seguidas por una risa malvada de un grupo de personas.

Song Yu y Xie Sui miraron hacia adelante.

Un grupo de gánsteres salió de un callejón lateral, era el grupo de anoche, pero tenían el doble de gente que ayer.

Pelirrojo sostenía un par de nunchucks* en sus manos, y había una sonrisa escalofriante en su rostro lleno de cicatrices. Ayer, solo había estado apuntando a Xie Sui, pero hoy su odio se había extendido también a Song Yu.

(Nunchucks: es un arma de artes marciales tradicional de Okinawa que consta de dos palos conectados en un extremo por una cadena corta o cuerda.)

Detrás de él, el de cabello amarillo, cabello verde y cabello morado también tenían miradas de disgusto y resentimiento.

"¡Mocoso! ¡Realmente me engañaste ayer! Esta vez, Laozi te atrapó en el camino de regreso para que no puedas llamar por teléfono."

Con los viejos rencores y los nuevos rencores sumados, Pelirrojo, como matón de la calle Lianyun, fue insultado por dos niños pequeños y estaba tan enojado que podía sentir que le picaban los dientes.

"¡Hoy no hay que decir tonterías! ¡Primero vamos a darles una paliza!"

Los pequeños hermanos que venían detrás todavía estaban enojados por haber sido engañados el día anterior. Sostuvieron cuchillos y palos en sus manos y se dirigieron hacia Song Yu para atacar.

"¡No te dejaremos ir hasta que haya sangre en las calles hoy!"

Song Yu: "......"

Mierda.

Xie Sui entrecerró los ojos y sintió que este grupo de gánsteres realmente necesitaba ser tratado. Tiró de la mano de Song Yu, diciéndole que corriera primero. ¿Quién podría haber sabido que Song Yu haría lo mismo que ayer y se pusiese frente a él?

Pelirrojo sonrío de forma siniestra, "¿Asustado? Es demasiado tarde para tener miedo ahora."

Song Yu: "¡Tenerte miedo! ¿Quieres ver sangre? Esta bien."

Se arremangó las mangas.

Grito molesto, "Me podrá faltar muchas cosas, pero no me faltan seguros. Si pierdo una sola gota de sangre, toda tu familia se arruinará tratando de devolverla."

Xie Sui: "......"

"!!"

El grupo del pelirrojo se sintieron engañados por él al principio, luego recordaron que así fue como les tendieron una trampa ayer.

Se enfurecieron inmediatamente.

"Sigues siendo tan arrogante cuando estás a punto de morir."

"¡Estás acabado!"

Xie Sui: "Yo ..." Me ocuparé de esto.

Era solo que las siguientes palabras nunca salieron de su boca.

Porque Song Yu ya había tomado su mano y corrió hacia el otro lado de la calle, moviéndose tan rápido como el viento.

"¡Corre!"

Hace un segundo, todavía estaba soltando palabras duras, al segundo siguiente, se dio la vuelta y salió corriendo.

Los gánsteres quedaron atónitos. Cuando volvieron a sus sentidos, prácticamente estaban saltando de la ira.

"¡Si puedes huir hoy, te llamaré papá!"