29.- ESTOY DURMIENDO

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Cuando crecemos comprendemos o visualizamos el mundo de manera distinta, aceptamos que realmente ese juguete no era necesario, mamá tenía razón cuando dijo que el fuego es peligroso o que nos caeríamos si nos subíamos a la mesa.

Tengo 17 años, sin duda soy una persona distinta a la de hace tres años, en unos cuantos meses seré mayor de edad. Abril le falta un poco más para eso me será ilegal. Compré mis boletos lo tengo todo planeado para visitarla.
Me levantaré temprano ya que son como 12 horas aproximadamente en autobús así que llegaré allá como a las 6 de la tarde, después encontraré su casa donde me podré quedar sin problemas es lo que ella me dijo y lo demás será historia; que hermoso quiero llorar.

Es por lo que me he levantado de tantas caídas, lo que me motiva a moverme de la cama en los días de pereza para seguir adelante, lo que me da la motivación necesaria para continuar con esto, al fin está sucediendo es tan real como ella y yo.

Es hora de dormir, necesito descansar para tener energías mañana, claro que con los nervios es imposible dormir, confieso que también tengo miedo.
Comencé a escuchar música para sentirme mejor fue cuando quedé dormido. A la mañana siguiente el teléfono estaba totalmente sin batería incluso  para la alarma, para cuando me desperté era demasiado tarde. Esto no me puede estar pasando ¡No hoy, no justo ahora!

Pegué un brinco de la cama, no me importó el desayuno o ir al baño, solo me lavé la cara y los dientes , jalé el teléfono descargado para salir de casa hasta que de pronto mi mamá me interceptó en la puerta.

-¿Enserio crees que irás?- Segura de si misma

—Mamá, no hagas esto bien sabías que compré los boletos, desde hace mucho tiempo te dije que iría

-No vas a ir ¡Punto!-

—¡¡¡Mamaaaaaaa!!! Se hace tarde por favor déjame salir tengo que ir, necesito ir tengo que estar allá—

-No-

—Llevo ¡Años! esperando este momento ¿tienes idea de lo que tuve que pasar para que esté día llegara? Claro que no porque nunca te ha importado lo que realmente siento, porque simplemente me dejas ser feliz por una sola vez—

-No sabes ni a dónde vas, seguramente ella ni siquiera te toma enserio-

—Mamá ¡Ya! Por favor es lo único que tengo al menos ella si me comprende sin que me juzgue por mis acciones—

-Y tú eres lo único que tengo-

—Bien, si no vas a dejarme pasar por esa puerta entonces saldré por la venta—

-Si te sales de está casa no quiero volver a verte por aquí nunca en mi vida, aquí viven solamente las personas que obedecen las reglas que impongo-

—Sabes que te amo, eres mi madre, me has dado tanto estos años de mi vida me has dado el cariño que necesitan muchas otras personas, espero que algún día lo entiendas... O que yo lo haga, lo siento. —

No sabía lo que pasaría lo único seguro es que soy su hijo siempre me recibirá en casa, se que está muy molesta fue en lo único que pensé todo el camino, la sensación de salir de casa de esa manera es un sentimiento vacío, camino por la calle preguntándome si es lo correcto llegando a la conclusión: talvez no es la mejor opción sin embargo es lo que siempre esperé a veces no hay una próxima vez y si es lo que quería ¿Por qué tener remordimientos?.

Llegué a la terminal para solicitar un cambio de horario pero debido a las fechas navideñas no hay más lugares disponibles. A menos que lo alcance en su próxima parada a dos horas de aquí en una ciudad diferente, solamente un buen golpe de suerte lograría llegar ya que en otro autobús es casi imposible con demasiadas paradas que realiza.

Amor a distancia ♥Where stories live. Discover now