4. La primera noche (6)

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Capítulo 4. La primera noche.


Al principio, pensó que era una persona a la que le habían comido el alma. Sin embargo, a diferencia de los soldados con forma humana que emitían un aura maligna negra, este solo tenía la forma de un humano totalmente ennegrecido.

Richard, al sentir la energía inusual, detuvo a los caballeros que intentaban acercarse a él.

— Yo iré, ustedes esperen aquí.

— Lo comprobaré primero, puede ser peligroso si se acercan.

Los caballeros estaban inquietos por las acciones de Richard, pero no pudieron refutar.

Como dijo, Rihcard, que tenía el poder de su familia, sería abrumadoramente más rápido para él el esquivar y atacar que los caballeros.

Richard se acercó al monstruo en forma humana, dejando atrás a los caballeros que le miraban ansiosamente.

Al sentir la presencia, la cosa ennegrecida miró hacia atrás.

Richard dejó de caminar después de mirarlo a los ojos.

No tenía ojos, pero se sentía como si estuvieran uno frente al otro.

— ¿Eres una persona?

El cuerpo del monstruo no dio respuesta. En cambio, se acercó lentamente a Richard.

Richard, que estaba viendo la escena, dijo, creando viento a su alrededor.

— Si eres una persona razonable, detente.

— ...

— Si no te detienes, juzgaré que has perdido la conciencia y entonces te daré descanso.

Sin embargo, el cuerpo del monstruo siguió caminando, ignorando las palabras de Richard.

Richard creó una tormenta, le hizo flotar en el aire y luego le estrelló implacablemente contra el suelo.

El cuerpo del monstruo, que recibió un fuerte impacto, se retorció. Sin embargo, no gritó ni una vez.

Richard pensó que era un monstruo que no podía hablar y lo apuñaló con la espada.

Entonces, hubo una voz que parecía estar saliendo del cuerpo cortado del monstruo.

— Durante mucho tiempo... mucho tiempo... mi deseo...

En el momento en que Richard cuestionó las palabras, el cuerpo del monstruo se dispersó y desapareció sin dejar rastro.

Thompson y los caballeros, que estaban observando la escena, se acercaron apresuradamente.

— Su excelencia, ¿se encuentra bien?

— Sí, nada especial, así que voy a volver.

Richard regresó con los caballeros.

Sin embargo, cuando se dio la vuelta, las últimas palabras dejadas por el monstruo hace un momento continuaron apareciendo en su mente.

'Mi deseo...'

Extrañamente, sintió como si las palabras fueran dirigidas para él.

***


Elisa, que sufría de un resfriado, apenas se levantó después de cuatro días de enfermedad.

Elisa, que volvió en sí, le preguntó a Anne durante el desayuno.

— Anne, ¿Qué ha pasado mientras dormía? Creo que el ambiente es un poco caótico.

Me quiero divorciar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora