Next Day
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Norton Campbell
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- ¡¿Qué?! - Me tapé los oídos tras escuchar sus gritos, ¿por qué no me sorprende que lo tomen de esta manera?
- Como escucharon... Dejaré el club de atletismo. - Repetí, asegurando mi postura.
- ¿Como?, ¿Cuando?, ¿Por qué? - Preguntó Mike viéndome tan asombrado como angustiado.
- ¿Por qué tan repentinamente? Recién estabas dispuesto a darlo todo por el relevo... - Ver la cara de decepción de William solo hizo el asunto más difícil para mí; era justamente esta reacción la que quería evitar desde un inicio.
- Yo, no creo poder seguir engañándome a mí mismo... Lo siento, pero esto no es para mí... - Mentí y ellos parecieron creérselo, quedándose totalmente en silencio mientras se miraban entre sí con tristeza.
Luego de lo ocurrido con Naib, al principio pensé que quizás después de un par de horas, todo volvería a la normalidad, pero cuando no llegó a la habitación al caer el día, mi corazón dejó de latir. No pude dormir en toda la maldita noche por la preocupación y la culpa que me estrujaban el corazón, quería arrancarme la lengua por haber dicho todo lo que dije.
Todo apuntaba a que ya no había nada que reconsiderar, simplemente quedaba actuar; si dejar el club de atletismo, alejarme de Jack y construir una maldita muralla de piedra entre Naib y yo era lo que debía hacer para "solucionar" las cosas, eso era lo que iba a hacer pues no quiero que Naib me odie, al menos no por siempre...
Tal parecía que ninguno de ellos iba a quedarse callado por siempre, sus rostros lo expresaban todo, en especial el de William.
- Tsk, ¿Jack te convenció de dejar el club, cierto? Cuando vino a hablar conmigo el otro día, sabía que no iba a dejar de entrometerse hasta que estuvieras fuera; ese hijo de... - Rápidamente lo interrumpí antes de que perdiera el control y le cobrara los platos rotos a la persona equivocada.
- Jack no me convenció de nada. Esta es mi decisión y espero puedas respetarla...
- Pero-- - Mike puso su mano sobre el hombro de William, llamando no solo su atención, sino la mía.
La forma en la que me miraba, la forma en la que se acercaba a mí; siempre supe que había algo extraño en Mike, pero traté todo el tiempo de hacer la vista gorda. Él puede ver a través de las personas, más allá de lo superficial, Mike puede ver el alma...
- Esto... Tiene que ver con Naib, ¿No es cierto? - Me quedé con la boca entreabierta ante esa pregunta; mi piel empezaba a mojarse en sudor frío, mientras buscaba en lo más profundo de mí una respuesta ante aquella interrogante, sin embargo... - Lo sabía...
- ¿Naib?, ¿D-De qué hablas? - Preguntó William desconcertado; lógico verlo actuar de tal manera, si hablábamos de su mano derecha después de todo.
- ¡Por supuesto que no, esto no tiene que ver con...! -Las miradas de todos, curiosos, ansioso por una respuesta me ponían cada vez más nervioso y más potente fue el control de mis impulsos que el de mi conciencia debido a la presión que sentí; traté torpemente de ocultar aquellos sentimientos de los cuales, aunque no estaba muy claro de cuales era, sabía que habitaban dentro de mí gracias a Naib.
- Tiene que ver con lo que se publicó en el periódico, ¿No es así? - Mike me interrumpió con pregunta la cual me dejó desconcertado totalmente.
- ¿El periódico? - Pregunté más desorientado que nunca.
- Pensé en hablar contigo luego acerca de lo que se rumoreaba, en una sección nueva que se lanzó hace poco... - Mike sacó de su bolsillo su móvil y empezó a buscar algo en él. - No creí que sería un problema para tí, así que no le di mucha importancia, pero ahora me doy cuenta de que no es así...
