Evil - Shiratorizawa x Lectora (Demon AU)

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Advertencia: este capítulo tiene contenido explícito y sexual

No será mucho, por lo que si se sienten incómodos leyendo este contenido pueden ir directamente hasta la parte donde diga *SEGURO* lo haré resaltarlo lo más posible.

-"Oh por supuesto que Tendou tendría esto en algún lado" sonreiste cuando encontraste lo que buscabas en uno de los cajones del cuarto donde antes habías estado con Yamagata

-"Si estamos en este cuarto puedo imaginarme un castigo muy sádico, no sabía que te gustaban esas cosas" Kawanishi comentó mientras te miraba

-"Por abrir la boca va a ser peor" mencionaste dándole la vuelta y colocando tus manos en tu cadera mientras tenías una sonrisa traviesa y maligna en tus labios

Por tu rostro se estremeció un poco el muchacho, tragando saliva y no hablando de nuevo porque no se lo habías permitido.

-"Oow buen chico~" dijiste palmeando levemente su mejilla "Necesito que te des la vuelta si?"

Se volvió a estremecer, pero te obedeció y no se cuestionó tu pedido.

Sintió como le bajaste el pantalon junto con su boxer.

-"Eres un chico obediente, no seré tan mala contigo!" escuchó el sonido de una botella de plastico destaparse con un click

Un escalofrío recorrió su espalda al sentir un líquido frío en su zona baja.

-"Aunque no tanto" mencionaste con un poco más de seriedad

-"Ah!" un jadeo agitado se escapó de sus labios mientras temblaba levemente sintiendo como habían golpeado su punto dulce en su interior

-"Jeje~ pero si sólo es un pequeño vibrador~ y nisiquiera está encendido, eres tan sensible allí?" dijiste rozando tus labios en su nuca y lo ayudaste luego a acomodar su ropa interior en su lugar junto con su pantalón

Eso era la perdición para él.

No se podía sentir más humillado.

-"Cuando acabes con esto te voy a-" se dió la vuelta con sus mejillas rojas y su ceño fruncido

-"A qué?" le preguntaste alzando una ceja y subiendo al máximo el control del pequeño juguete

Su reacción fue de golpe soltando un gemido mezclado de dolor y placer, sus piernas temblaron y cayó de rodillas al piso.

Cuando lo viste asi sonreiste y bajaste la velocidad.

-"Pobrecito..." acariciaste su mejilla, su rostro estaba rojo y sus ojos llenos de lágrimas, con una cierta mirada de reencor hacia ti

Él estaba preparado mentalmente para casi cualquier castigo desde que llegaron a ese cuarto.

Látigos.

Cortes.

Asfixia.

Incluso que le rompas algunos huesos.

Nunca se le cruzó por la cabeza algo así.

Se sentía humillado y dominado.

Nada peor para un demonio tan inseguro.

Le sonreiste con algo de dulzura.

-"No va a durar tanto, solo tienes que tener un orgasmo y te dejaré libre"

Eso iba a ser aún más humillante.

-"Me niego..."

-"Te niegas?" subiste poco a poco la velocidad