Era mucho más de lo que alguna vez habían hecho con el otro. Habían dormido juntos incontables veces, Reese había estado en bikini demasiadas veces frente a JJ y había sentido su cuerpo pegado al de él cuando se subía a su motocicleta. Pero nada se comparaba a esto, tan solo tocar un poco de piel desnuda los había hecho sentir nuevas cosas, diferentes cosas. Y ambos lo estaban disfrutando, no se querían separar ni por un segundo, pero JJ tuvo que hacerlo cuando Reese emitió un sonido que lo volvió loco. Y sabía que si continuaba besándola de la forma en la que lo estaba haciendo no podría controlarse, pero no quería que las cosas fueran así. Su primera vez estando con Reese debía ser mejor que esto.

— ¿Qué? —Frunció Reese una vez que JJ rompió el beso.

El muchacho soltó una risita al ver la expresión de su amiga, la mano que estaba en su cadera se movió hasta su cara, pasando un par de mechones de pelo por detrás de su oreja. —Tengo que ir a trabajar mañana —le susurro.

Reese se sonrojó. —Está bien.

—Eres muy linda —dijo sin querer, pero los hizo sonreír a ambos. JJ le beso la nariz, la frente y la barbilla, para después besarla de nuevo solo por unos segundos. Cuando se separaron ambos estaban sonriendo, y el rubio sintió un calor bajarle por el pecho hasta su estómago, una sensación de paz y calma que no había sentido en bastante tiempo.

Se acostó de nuevo con Reese acurrucada a su lado, le pasó un brazo por detrás de los hombros y la apretó contra su pecho, manteniéndola cerca como si la chica fuera a desaparecer en cualquier segundo.

—Buenas noches, Maybank —dijo Reese en voz baja.

—Buenas noches, Rott —le contestó a su vez el muchacho.





La alarma de su celular sonó exactamente a las 6:28 a.m., seguida por una segunda alarma a las 6:30. Como pudo, JJ estiró el brazo para alcanzar su celular y apagar dichas alarmas. Sus ojos entrecerrados lograron ver cómo Reese estaba acurrucada contra su pecho, no pudo evitar rodearla con los brazos y apretarla aún más cerca de él. Con una sonrisa en el rostro, Maybank volvió a dormir.

Quince minutos más tarde, la alarma volvió a sonar pero esta vez no fue el rubio quien la apagó, sino Reese. JJ no abrió los ojos enseguida, lo hizo hasta que comenzó a sentir los labios de Reese besando su cara. Besó su barbilla, su mejilla, su nariz y JJ sabía que estaba sonriendo como un tonto.

—Buenos días —sonrió Reese. La luz que entraba por su ventana iluminaba pobremente su cuarto, aún así, pensó que ver a Reese en su cuarto y besándolo era la escena más hermosa que había visto en su vida. Sentía que estaba como en una película.

—Muy buenos —respondió JJ pasando sus brazos por detrás de su cabeza—. No me molestaría despertar así de nuevo.

Reese rodó los ojos. — ¿Ya no crees que es un sueño?

—Estoy como 70% seguro que no es un sueño —sonrió de lado.

Reese soltó una risita y en vez de responderle, volvió a besarlo, en la nariz, las mejillas, la mandíbula, le dio un suave beso en los labios que volvió a hacerlo sonreír y JJ cerró los ojos para disfrutar el momento.

—Estoy aquí, Jay —le susurró la castaña para después besar su frente. JJ sintió un escalofrío subirle por la espalda.

Había pocas cosas que le hacían recordar a su madre, a decir verdad, casi nada le recordaba a su madre. JJ no recordaba cómo actuaba, ni a qué olía, ni como cocinaba, ni siquiera recordaba el tono de su voz. Pero había algo que nunca iba a olvidar, y eso era que cada que su padre les daba una paliza, ya sea a su madre o a el, y JJ estaba demasiado asustado como para salir debajo de sus cobijas su madre siempre se metía debajo de ellas, besaba su frente y susurraba el sobrenombre que ella le había dado 'Jay'. Reese nunca le había llamado de esa manera, ella ni siquiera sabía que su madre lo llamaba así, pero la situación le había hecho recordarla y eso nunca era bueno para él.

𝚂𝙾𝚄𝙻𝙼𝙰𝚃𝙴𝚂 ━━ jj maybank (obx).Where stories live. Discover now