━━「 PROLOGO 」━━

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— ¡Eh ladrón! — grito el hombre mientras corría detrás de mi.

— Maldita sea — digo al ver a estos idiotas delante mía.

— Ahora si te tenemos, Arthur Forrest quedas dete... — fue interrumpido por el ataque de un labrador retriever color crema haciéndolo caer y viene a mi lado.

— Gracias Maximo — le digo al el entregarme una bomba de humo — linda charla — le quito la llave tirándolo al suelo.

      Al explotar toda esa parte de la calle se lleno de humo, así yo logrando escapar junto con Maximo por el callejón. Me sabía todo el lugar de memoria por lo que escabullirme se me hace  muy fácil.

— Hoy al menos comeremos algo — alzo la bolsa plástica con algunas cosas que pude robar.

        Maximo me ladra y yo lo interpreto con que esta de acuerdo conmigo. De repente veo una enorme pantalla anunciando a aquellos que son prófugos, hasta que vi la imagen de un hombre de tes blanca, cabello hasta los hombros color castaño oscuro, ojos oscuros, oh espera soy yo, Arthur Forrest de 28 años llevo siendo prófugo desde que todo empezó. Mis mayores crímenes han sido robo, ser el principal líder en hacer protestas contra el gobierno, hacer hermosos dibujos en las paredes, deberían apreciar el arte callejero mierda, y por supuesto, escapar del laboratorio ya que era uno de los que estaba en lista para convertirme en un super soldado.

       Esto empezó hace 7 años, al principio mi compañero era mi hermano mayor, Henrik, pero esos malditos lo capturaron y al no aceptar ese maldito ship solo lo asesinaron en la calle como si no valiera nada. Si, para tu ser de estos super soldados a la parte de atrás de tu cuello te hacen un pequeño tajo donde colocan un pequeño ship el cual se conecta rápidamente a tu cerebro y tu cuerpo cambia por completo, aunque solo esto es para militares, para el pueblo son ships los cuales ellos pueden observar todo lo que haces. Su propósito es para mantener orden y haya menos criminalidad, sin saber que existe un lugar donde solo los que somos considerado criminales vivimos. Es como un segundo mundo pero debajo de la gran ciudad perfecta y lo llamamos mundo bajo. Son considerados criminales aquellos que no tienen el ship y viven en contra de las leyes.

         Llego a lo que era un pequeño vecindario pero esta completamente abandonado y fuera del límite de la ciudad, camino hasta el ascensor y subo al tercer piso. En el apartamento 112 saco de una jarrón con una planta ya seca la llave y entro al lugar para colocarla de nuevo entre la tierra. Cierro con seguro y me dirijo a lo que es un closet en el pasillo y tiene una puerta en el suelo. Al abrirla hay una bastante extensa escalera en la oscuridad que al final me encuentro con otra puerta que me abre a prácticamente al mismo lugar pero al otro lado.

— Llévale esto a Wendy y vas a casa amigo — le entregó una pequeña bolsa para ambos salir del vecindario entrada al bajo mundo.

Este lugar es todo un caos pero la gente es más libre.

— Hey Arthur — me saluda quien vigila la entrada y salida.

— Hola James, ¿alguien más a salido? — digo al firmar y observar el papel.

— Solo tres, entre a ver si en las escaleras había algo pero esta todo como siempre, despejado y solitario — .

— Así debe ser, me avisas cualquier cosa — el asiente.

— Ah hemos logrado robar un camión que transportaba comida, los chicos ya vienen de camino — .

— Mejor, llevan días todos sin comer y son pocos los que logramos regresar de esa ciudad — .

— Si, la gente esta contenta — me sonríe.

— Pero deberían volver a plantar así evitamos salir tanto — le ordeno y el vuelve a asentir — luego nos vemos James — me despido.

Me dirijo a mi apartamento, en el camino iba a saludando a cada persona que me cruzaba en frente. Luego de un baño solo me quedo con un pantalón largo de pijama y me pongo a cocinar de algunas cosas que trajo, solo una sopa pero es algo. Agarro un plato en el suelo y me siento en el pequeño comedor en el balcón que consiste solo en una mesa de cristal cuadrada y una silla.

Suspire mirando la pequeña ciudad y al terminar de comer prendí un cigarrillo. Escuche la puerta y enseguida mi grandote amigo se pone a comer.

— Traje para máximo dos semanas, en dos semana volver a subir — suelto el humo.

Extraño mirar la luna, aqui solo veo oscuridad, pero las luces en el bajo mundo eran como estar en Japón o Nueva York. En dos semanas me toca volver a subir, en dos semanas mi vida dará un pequeño cambio. . .

New WorldWhere stories live. Discover now