¿Jugamos con fuego? (+18)

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒗𝒆𝒊𝒏𝒕𝒊𝒕𝒓𝒆𝒔

𝑳𝒂 𝒖́𝒍𝒕𝒊𝒎𝒂 𝒑𝒓𝒖𝒆𝒃𝒂

𝑪𝑬𝑫𝑹𝑰𝑪 𝑷.𝑶.𝑽

Al otro día me desperté. T/N no estaba.
¿Significa que ella está bien? O tal vez alguien le hizo algo. Mierda.

No puedo decirle a nadie, tengo que encontrarla yo solo.

Voy rápidamente a la biblioteca. Es uno de sus lugares favoritos. Pero no estaba.

Ni siquiera en el gran comedor, comiendo torta de chocolate. Su favorita.

Como mierda no lo pense antes, su habitación.

-Sangre limpia.- Susurro al estar en la puerta secreta que da entrada a la sala común de Slytherin.

Al lograr entrar voy rápido a su habitación. Y nada. No estaba.

-A ver a ver a ver. Su mejor amigo de toda la vida dijo que haría lo que fuera para salvarla. Dios me cae tan mal.- Digo en voz baja.

Voy rápido a la habitación de Draco y toco la puerta rápido.

-¿Quién es y que mierda quiere?- Dice malhumorado, como siempre.

-Cedric Diggory.

-¿Qué quieres?

-¿Puedo pasar?

-No.

-Necesito pasar.

-Y yo te dije que no.

Maldición Draco, deja de ser tan egoísta como lo eres siempre. Agarro la puerta y la paso.

Al entrar a su habitación, allí estaba, con T/N en su cama.

-¿Qué mierda haces con T/N?

-La salvo, lo que tú no pudiste hacer desde un principio.

-Me las pagarás. Lo importante es que ella esté bien, ¿Ella cómo está?

-Mejor, Lucifer vino y le dio poder. Si te pones a pensar, es mitad diosa. No iba a morir.

-Es verdad. Voy a llevarla a mi habitación.

-No te lo voy a permitir.

-Es mi novia. Y mi futura prometida.

-¿Van a casarse?

-Si. Ahora damela.

-Ya te dije que  no.

Pero en ese momento se despertó T/N.

-¿Qué hago aquí?

-T/N, ¿recuerdas algo?- Le pregunté lentamente.

-Si.

-¿Quieres que vayamos a mi habitación...?

-De acuerdo. Draco, muchas gracias por todo. Pero debo irme.

-Esta bien. Mejorate y cualquier cosa que necesites me dices.

-Esta bien...

Agarre a T/N y la cargue en mis brazos. Estaba débil, pero mañana tendrá la fuerza que necesita.

Al llegar a mi habitación pongo a T/N en la cama y me pregunta.

-¿Qué día de la semana es?

-Miercoles.

-Faltan dos días para el torneo.

-No te preocupes por eso.

-Vamos a ganar. Hoy y mañana descansaré. Y pasado mañana competiremos.