Capítulo 5

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Mi cama estaba llena de papeles y cintas, me encontraba sentado en el piso tratando de organizar todo por fecha.

La videocasetera estaba conectada a un pequeño televisor, introduje una cinta de Harry cuando tenia diez años.

Harry Edward Styles
Sesión documentada #3
12 julio 2004

-Ella me dice que la mataron, necesita que la ayude a encontrarlo.
-¿Encontrar a quién?
-Al que la mató.
-¿Te ha dicho su nombre?

El pequeño Harry se encontraba sentado en el centro de una blanca habitación, su rizado cabello cubria sus ojos, sus brazos estaban llenos de arañazos y marcas de manos.

-Su nombre es Taylor.
-¿Te ha dicho algún apeido?
-Brendecht.

Apunte en mi pequeña libreta el nombre.

-Habias escuchado ese nombre antes, Harry?
-No.
-¿En alguna película o en un libro?
-No.
-¿Estas seguro?
-Si.

Suspiré, deje mis lentes a un lado y pase mis manos por la cara, me levante y camine al baño que estaba dentro de mi habitación.

Me desnudé y me metí a la regadera.

El agua tibia relajaba mi cuerpo, me atreví a cerrar los ojos.

Me encontraba en una feria, los niños corrían alrededor de los puestos, hacia calor.

Miré mi cuerpo, estaba completamente desnudo, me cubrí con ambas manos, pero nadie se daba cuenta de mi presencia, las personas pasaban a mi lado sin prestarme la miníma atención.

¿Cómo habia llegado aqui?

Camine tratando de no pensar que no traía ropa encima, de pronto unos chicos comenzaron a correr hacia el bosque, los seguí, todos se reunieron alrededor de una mujer.

¡Ramera!
¡Bruja!
¡Roba-hombres!

Me reuní junto a todos, la mujer estaba en medio de los chicoa, sentada en una silla, tenia una capucha negra en la cabeza y sus muñecas y tobillos estaban amarrados.

Un hombre estaba frente a ella de espalda a los demás, en su mano sostenia un frasco con un liquído burbujeante.

-Taylor Brendecht, ¿cómo te declaras?-La mujer gruñó un par de palabras bajo la capucha.

-¡Matala William!

Me sorprendí al escuchar mi segundo nombre.

La mujer sacudió su cabeza librandose de la capucha.

-¡Ese hombre me violó, irrumpió en mi casa y se llevó mi inocencia, él es el culpable, no yo!

Los chicos comenzaron a reir y a gritar, el piso retumbo por las pisadas de los demás.

-La única culpable aqui, eres tú, Taylor Brendecht.

La mujer comenzó a llorar, corrí hasta el centro, el hombre que estaba mirando a la mujer levantó la vista.

Era igual a mi.

Todo se volvió negro.

Real {Larry Stylinson}Where stories live. Discover now