Los años que te ame... ©[✓]

Capitulo 6 - Llevados por el deseó

- Y lo es pero, ahora no se cómo arreglarlo - Ricky se quedó en silencio por un momento hasta que una idea cruzo por su mente.

- Llévala a desayunar mañana, te puedo cubrir por un momento así que dale una sorpresa y demuestrale que ella es más importante que todo - su idea le pareció razonable así que acepto la ayuda - y no duerman sin que le expliques, por lo que veo no le has dicho nada.

- No, quería sorprenderla cuando fuera la demostración y cena del proyecto pero quizás deba decirle.

- Tienes que, hasta Daniel lo sabe...

- ¡Obvio yo sé todo de ti papasito! - ambos se carcajearon por el comentario tan peculiar del esposo de Ricky.

- Y por cierto... Ten cuidado con Mitzy, no creo que tenga buenas intenciones - soltó el comentario cosa que sorprendió a Samuel.

- Quizás viste mal, ella no sería capaz de hacerme nada además desde hace tiempo le dejé en claro que amo a Summer y por lo que se tiene pareja Ricky - refuto Samuel defendiendo a su amiga pues sabía que era una buena persona.

- Bueno, yo te advertí luego no vengas llorando que algo hizo. Me voy que ni amor me espera para comerlo y te sugiero que hagas lo mismo.

- ¡Ay ya basta! Tus insinuaciones sexuales no están chidas - Ricky carcajeo un momento y se despidió.

- Vale ya nos vemos voy a colgar.

- Vale hasta mañana y gracias por tu ayuda.

- De nada, chao.

Ambos colgaron y Samuel subió emocionado a buscar a su mujer, si bien recordó que hace tiempo no la tocaba por lo cansado que llegaba de trabajar así que, algo excitado la busco pues todo su ser comenzó a imaginar que eso les ayudaría a los dos.

Entro al dormitorio y la busco, le llamo pero ella no respondió así que preocupado fue al baño y escucho los sollozos provenientes de adentro. Dudo un momento en abrir pero su mente me dijo que buscará a su esposa, debía consolarla.

Abrió la puerta sigilosamente y cuando entro se quedó anonadado por la imagen que estaba frente a el.

Summer no se había dado cuenta que su esposo estaba tras de ella admirando la increíble lencería que se había puesto para el. Ni siquiera se acordaba de ella pues estaba tan triste que solo se quitó el vestido, quedando en zapatillas y un sexy conjunto que asentuaban sus bellas curvas, el sueño de cualquier hombre y en este caso, el de su esposo.

Samuel se acercó a ella por detrás y con sus dedos rozó los hombros desnudos de Summer, ella sintió como una mano la acaricio que levanto la mirada y vio la silueta de su esposo detrás de ella.

Se quedó quieta mirando como los ojos de su esposo se llenaban de deseo al recorrer la piel de su mujer, aquella tan hermosa y sensual morena que la estaba volviendo loco en ese instante. Tomo las caderas de su esposa y pego su trasero contra el mientras enterraba su cuello para oler la dulce fragancia que emanaba de ella.

La respiración de Summer se volvió cada vez más acelerada pues el que Samuel recorriera su piel e hiciera esos movimientos la estaban haciendo perder la cordura. De repente sus miradas se cruzaron en el reflejo del espejo.

Samuel desesperado por probar los labios de su mujer la volteo y estampó su boca contra la de ella, abrazando su espalda para sentir el calor se su cuerpo, saboreo los dulces labios de Summer adentrando su lengua pues no quería dejar ninguna parte de ella sin probar.

Summer olvidó todo y se dejó llevar por la pasión de sus besos y la intensidad de sus caricias que abrazo su cuello y se colgó de el haciendo que Sam la levantará acariciando su trasero y ella rodeando la cintura con sus piernas.

Deseosos el uno del otro se despojaron de sus ropas queriendo sentir piel con piel, como si sus vidas dependiera de ello. Samuel no dudo ni un segundo en besar y lamer sus delicados pechos, quitando cada pieza de la lencería que llevaba puesta.

Summer suspiraba y jadeaba ante los besos que recorrieran su cuerpo sintiendo que con solo eso podría llegar al clímax tan anhelado por estás dos almas que se extrañaban. Desesperado el hombre se quitó las prendas lo más rápido que pudo y ya completamente desnudo volvió a besar el vientre de Summer. Bajo poco a poco hasta besar su dulce feminidad y devorarla como el manjar más exquisito que había probado alguna vez.

La mujer no pudo evitar gemir cuando la boca de su esposo la saboreaba con fervor haciéndola llegar al clímax en cuestión de minutos. Sin dejar ir la intensidad del momento beso los labios de su esposa y con su miembro fue nuevamente acariciando su entrada preparándola para embestirla.

Poco a poco se fue adentrando en ella sin dejar de besar y acariciar su cuerpo, Sumer abrazo a su esposo y ambos movieron sus caderas guiados por esa sinfonía llena de placer. Los gemidos dominaron cualquier sonido que hubiera en la habitación y el chapoteo de sus cuerpos se volvió la melodía que estos dos enamorados interpretaron al unísono.

Samuel embistio y embistio con fuerza anhelando correrse dentro de su mujer y al ver el deseo en los ojos de Summer aumento la intensidad y la fuerza logrando su cometido cuando el interior de su esposa se contrajo llenando su miembro de sus dulces jugos lo que lo hizo derramar su néctar dentro de ella.

Jadeando los dos se quedaron abrazados por un momento, dejando que todas estar caricias suplantaran todas aquellas palabras no dichas por el corazón.