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El viento podía sacudir violentamente los cabellos azabaches de Tobio, pero ni aún así podría despejar lo que pasaba por su cabeza. Porque para Kageyama, ella era una distracción, nunca lo vio como amor.
Desde pequeño sus pensamientos se desvelan por el voleibol, y mientras practicaba en su cuarto con su balón dando pequeños botesitos sobre sus largos dedos fríos, aparecía el rostro de Narumi en sus pensamientos, interrumpiendo su vieja rutina y dejando caer el balón sobre su rostro.
Kageyama poco sabía de asuntos de parejas y del amor en general, su pubertad se enamoró de los balones antes de encontrar a una chica linda. Y Narumi, pasó por al frente de él en el momento equivocado, lo pilló desprevenido, y sus pupilas chocaron por un momento fugaz, ni siquiera dándose cuenta que aquella chica vestía el uniforme de su rival.
Ese encuentro hubiese terminado como cualquier otro, si no fuera porque aquella chica, de hipnotizantes ojos claros, caminaba todas las mañanas por su mismo camino.
Sin embargo, todo sus pensamientos se volcaron cuando vio a Narumi como la mánager del club de voleibol de Shiratorizawa, y a su acompañante de siempre matándolo con la mirada.
Tobio no entendía porqué no podía olvidar esos ojos marrones grisáceos, tal vez porque los encontraba mirándolos todas las mañanas. Casi por un milagro, con el tiempo se conocieron formalmente, y eso calmó los pensamientos del azabache por un tiempo, pero esa calma duró poco, cuando imaginó tocando el largo cabello de Narumi entre sus dedos en plena práctica, supo que necesitaba ayuda. El balón que se suponía iba para Hinata, terminó golpeando su rostro nuevamente. Cayó al piso agitado, sentía demasiadas emociones contradictorias dentro de él, pero tampoco tenía las palabras para describir lo que sentía.
El gimnasio quedó en silencio, y Kageyama dejó pasar peligrosamente el tiempo. Su ignorancia hacia el amor hizo sufrir a Narumi de forma innecesaria. Tobio por primera vez no sabía lo que quería, y no se esforzó lo suficiente para averigualo.
Mas rápido que lento, los ojos de Narumi se fueron desvaneciendo. Ahora, por su camino habitual, no aparecían sus ojos, por mas que buscara. Su cabello largo que se ondeaba con el viento tampoco estaba presente para imaginárselo nuevamente entre sus dedos. Narumi iba desapareciendo lentamente de sus recuerdos. Tobio con un nudo en el pecho, olvidó su voz.
Por algún motivo comenzó a correr, tal vez así alcanzaba a la chica. Tal vez aún no era muy tarde. Su corazón latía tan rápido que sentía dolor, y el aire que iba a sus pulmones le comenzaba a faltar. Se detuvo en medio de la Academia Shiratorizawa con un rostro lamentable. Al parecer, sí había llegado muy tarde, y sus ojos brillaron, pero no de luz, estaban cristalizados por sus lagrimas. No había sido el mejor para ella, ni siquiera para sí mismo. Cómo podía imaginar que ella estaría para él.
"No pretendas que ella te enseñará a amar, si ni siquiera te esforzaste por dar lo mejor de ti."
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P R O X I M A M E N T E...
•Separador y portada por ackxsun gracias linda, y perdón por la espera 💙
