• c u p i d o ; wos •

• - D I E C I S É I S - •

Terminé por sentarme en la parte final de la cama, haciendo que el chico con los ojitos cerrados, sonriera. Me puse a observar la habitación con paciencia, esperando a que este se durmiera, y pensando en todo lo que había pasado aquellos días. Tenía muchas ganas de hablar con Juliana, dejar las cosas en claro, y abrazarla muy fuerte para que no volvamos a pelearnos de esa manera. La extrañaba mucho, y necesitaba decirle todo lo que me pasaba de una vez por todas, sin ocultarle más nada nunca.

Después de largos minutos y en el profundo silencio del cuarto, creyendo que Valentín ya estaba en el quinto sueño, volví a escuchar su voz. — Yo también te extrañé, testaruda.

El tono de su hablar me demostraba que estaba más dormido que despierto, así que no quise responderle y me limité a sonreír dulcemente con sus palabras. Pero cuando supuse que ya se había dormido, me equivoqué.

— Y estoy completamente enamorado de vos. — Terminó por decir, y me quedé helada por un instante.

¿Había escuchado bien?

— ¿Q-Que? — Solté con un hilo de voz, pero cuando lo miré, Valentín ya se había dormido.

Mis ojos se cristalizaron, y una desesperación apareció en mí al no saber qué hacer, o qué sentir al respecto. Valentin se me había declarado ahí, como si nada, de una forma totalmente inesperada, y ni siquiera estaba segura de si él lo sabía. El alcohol le pegó bastante fuerte, quizá solo estaba pensando y lo soltó, sin darse cuenta que yo podría estar escuchándolo.

Al cabo de algunos segundos, una sensación de euforia recorrió todo mi cuerpo. El chico que me gustaba sentía lo mismo que yo, y me lo había confirmado todo en ese momento. Pero luego, caí en el mundo real, bajé de mi nube de fantasía, y quise llorar cuando recordé que no podía corresponderle. Aún tenía que hablar con mi mejor amiga, aclarar las cosas, saber lo que le pasaba a ella y si sufriría por esto... No podía darle una respuesta a Valentín, pero tampoco podía decirle que sentía lo mismo.

Todo era tan confuso, tan complicado. Ya no quería ni pensarlo.

Lágrimas comenzaron a salir de mis ojos, y con ellas, salí de aquella habitación.

[...]

No pude pegar un ojo en lo que quedó de la noche. Solo permanecí sentada en el sillón, mirando a un punto fijo en la pared, pensando.

Tenía miedo de lo que iba a suceder. ¿Y si él no lo dijo en serio, y fue porque estaba demasiado borracho?, ¿y si simplemente no lo recuerda?

¿Qué es lo que debía hacer yo? Aunque... por mucho que pensara y quisiera, no tenía muchas opciones.

De pronto, escuché pisadas descalzas bajando por la escalera, y pegué un salto de mi lugar creyendo que era mamá, pero era Valentín. Sin embargo, eso no me dejó tranquila.

Una sonrisa salió de sus labios al verme, pero no pude responder de la misma manera. Sentía un frío espantoso recorriendome la espalda, y mí estómago revuelto por el nerviosismo o miedo de lo que podía pasar.

— ¿Estás bien? — Me dijo con una voz ronca, sentándose a mi lado. Sus pequeños ojos estaban hinchados por el sueño, haciendo notorias las ojeras debajo de ellos.

Cuando volví a escucharlo, mi vista empezó a tornarse borrosa otra vez.

— ¿Es verdad lo que dijiste arriba? — Solté en un impulso, con miedo pero al mismo tiempo un gran coraje para enfrentar todo lo que hace mucho tiempo debió ser hablado.

— ¿Qué dije? — Respondió, y quedé como un payaso.

Valentín en verdad no lo recordaba, y lo que pensé no estaba tan errado. Quizá no había sido tan importante para él como para acordarse, o fue solamente una idiotez de alguien alcoholizado.

— Nada... — Terminé por decir, cortando nuestro contacto visual para volver al punto fijo de la pared.

Pasaron algunos segundos en los que permanecimos en un silencio algo incómodo, pero yo lo prefería. Ya no quería hablar de nada.

— Si, es verdad. — Oí a mi lado.

Giré para mirarlo, con el corazón palpitando a mil por hora luego de su confesión, y ya no pude retener las lágrimas.

Su sonrisa tímida rompió mi corazón en muchos pedazitos. Deseaba decirle lo mismo, en serio quería hacerlo, pero todo era demasiado complicado...

El chico agarró mi rostro entre sus manos, y con su pulgar, acariciaba una de mis mejillas mojadas, corriendo las gotas que caían. Estaba esperando una respuesta, observándome con la mayor esperanza en sus faroles azules que debilitaban completamente mi cuerpo.

— Y-Yo no... — Un sollozo interrumpió mis palabras, y su expresión se transformó en una preocupada. — No puedo corresponderte, Valentín.

Y en ese instante, sentí como todo su amor y confianza, se derrumbó en tan solo un segundo.

— ¿Q-Qué? — Dijo con una gran desilusión en su voz, esperándose otra respuesta.

— Lo que escuchaste. — Una presión dolorosa se hizo presente en mi pecho, y no podía dejar de llorar. — N-No estoy enamorada de vos.

Valentín apartó sus manos de mi cara, suavemente, y revolvió su pelo con algo de humillación y tristeza. Me hacía tan mal verlo de esa manera, que no me salía decirle absolutamente nada.

— No te entiendo. — Su voz comenzaba a volverse débil, lo que me angustiaba aún más. — ¿Por qué estás llorando, entonces?

Me quedé totalmente perpleja ante su pregunta, y mi llanto se paralizó por un segundo. Pero, antes de que pudiera "cagarla" de alguna forma, las voces de los ds3 comenzaron a oírse desde afuera. Y, a decir verdad, me habían salvado.

Sequé mis lágrimas rápidamente, y aclaré mi garganta para cortar la tensión de aquella situación.

— Ya tenés que irte... — Dije, con un hilo de voz, disimulando que esquivé por completo su duda.

Valentín asintió lentamente, desanimado, y se paró del sillón con desgana. Yo seguía sus movimientos, deprimida sin tener idea de qué decirle en ese momento.

— Gracias por todo, Eve. — Me dijo con un tono bajo, y tristemente se agachó para estar a mí altura y darme un beso en la mejilla, que terminó por romperme completamente.

«Gracias a vos, Valentín Oliva» Pensé, como forma de despedida. La única diferencia, es que él no lo había escuchado...

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Boenaaas

"cómo cagar todo en un capítulo by cande"

Perdón por tardar en actualizar, ando de viaje y no pude escribir mucho pero bueno acá está.

Este capítulo va dedicado a agos que hoy cumple años, te amo❤️

Gracias por seguir leyendo a todxs, lxs quiero mucho

✨Hasta la próxima actualización✨