Prohibido enamorarse

1 - Piensa con el corazón, no con el pene

1 - Piensa con el corazón, no con el pene.

Despierto muy temprano con el brazo de una desconocida sobre mi pecho en una casa que afortunadamente no es la mía. Aparto el brazo con cuidado de no despertarla y me voy lo más silenciosamente posible del piso dirigiéndome rápido a mi casa.

Al llegar me encuentro a mi madre en la cocina.

-Hey mami- le saludo cariñosamente con un beso en la mejilla.

-¿Se puede saber de dónde vienes? Mejor no me lo cuentes que ya lo sé, Derek, no puedes seguir así.

-¿Así, cómo?- le pregunto con la boca llena de cereales haciendo que ella suelte un bufido.

-¡Pues así Derek, viniendo a estas horas antes de que te vayas al instituto casi todos los días, usando a las chicas como pañuelos!

-¡Ellas también me usan a mí! - me intento defender pero con ella todo intento es nulo.

-¿Crees que eso es escusa? No me importa lo que hagan ellas, como si les da por inyectarse bottox en el cerebro, me dan igual. Me importas tú y la mala reputación que se te está quedando.

¿Bottox en el cerebro?  ¿En serio?

-¿Y qué quieres que haga?

-Tu padre y yo tan solo queremos que seas feliz y así no lo eres- contesta con tono maternal.

-Si lo soy- intento convencerla.

-No, no lo eres.

Joper que tozuda.

-¿Sabes que deberías hacer?- interviene mi padre al entrar en la cocina.

-No- respondo sincero.

-Buscarte una novia- me contesta decidido, miro a mi madre horrorizado y ella mira a mi padre como si hubiera tenido la mejor idea de la historia.

-¿¡Que, qué!?

-Lo que oyes, te ayudaría muchísimo- continua decidido.

-Pero si no me gusta nadie.

-Hijo, deberías pensar más con el corazón y no con el pene.

¿WHAT?

No me puedo creer que me haya dicho eso.

-Seguro que hay alguien por ahí que te tiene loco- insiste mi madre.

-No, para nada- sigo sin poder creerme que estemos teniendo esta conversación- me voy al instituto.

Necesito salir de esta casa de locos.

-¡Tu solo piénsalo!- añaden antes de que salga por la puerta.

# # #

Al llegar a clase localizo a John y me siento a su lado dispuesto a contarle todo lo sucedido en lo que llevo de mañana.

-¿Qué opinas?

-Que tus padres no aprueban tu estilo de vida- al contestarme eso me dan ganas de darle con una silla en la cara.

Eso es inteligencia y lo demás son tonterías.

-¿Y si me dices algo inteligente y que ya no sepa?- le doy otro intento.

-Bueno pues déjame pensar- susurra por la llegada del profesor.

Entonces esto va para largo.

-¡Lo tengo!- grita John cuando la clase está en pleno silencio.

Idiota.

-¿Qué tiene señor Moore?- le pregunta el profesor enfadado.

-Emm... el resultado del ejercicio, obvio- le contesta antes de volver a mirar la hoja.

-¿Qué se supone que tienes John?- susurro.

-Tu solución- responde orgulloso.

Suena la campana y todos salen corriendo antes de que al profesor le dé tiempo a decir los deberes.

Llego a mi mesa de la cafetería de siempre y me doy cuenta de que Rebeca me ha traído la comida.

Rebeca, una chica rubia de bote, del grupo de porristas y con bottox en todos los lugares del cuerpo posibles. Ella siempre va detrás de mí y tiene la esperanza de que lo nuestro vaya más allá de sexo pero... no gracias.

John se sienta delante de mí dispuesto a explicarme "mi solución".

-Bueno el plan es...- susurra pero le corto antes de que pueda continuar.

-¿Por qué susurras?

-Sht, baja la voz, no se puede enterar nadie- pongo los ojos en blanco pero le dejo continuar- ¿Tus padres quieren que tengas una relación no solo sexual con alguien para que limpies tu reputación, no?- asiento con la cabeza y sigue- pues eso le daremos.

Más que idiota.

-A veces pienso que sufres un retraso importante.

-¿Porqué?- pregunta haciéndose el ofendido.

-¡Porque no quiero tener novia!

-¡Déjame terminar de explicarte! Será una novia falsa.

-Eso es una tontería- respondo con la boca llena de macarrones.

-No lo es, verás, en una semana, para que te haya dado tiempo, les dices que les has hecho caso, que tienes novia y que eres muy feliz, y así te dejarán en paz y a la vez limpiarás tu reputación- sonríe orgulloso de su plan.

-Claro ¿Y la chica de donde la saco? ¿La invento? ¿La hago de macarrones?- este plan hace aguas por todas partes.

-Noo, solo tienes que pedirle a alguna chica que te haga ese pequeño favor.

-Sí, sobretodo pequeño- respondo irónico.

Las cosas como son, el plan malo no es, ¿Pero quién puede ser la chica que me haga tal favor?

-¿Quién crees que podría ser la chica perfecta para ello?- le pregunto.

-¡Já, te gusta mi plan!- aplaude y pone cara de concentración mientras inspecciona el comedor del instituto- ¿Qué tal Rebeca? Ella lo haría con mucho gusto.

-Ni de coña y además mi madre le odia.

-¿Y esa chica?- dice señalando a la rubia de la mesa de al lado.

-Emm... no, vale que tenga que ser guapa pero tampoco tiene que ser un pivón, ni una operada, y lista, pero no Einstein.

-Claro, a tres dólares el quilo- responde irónico.

Después de inspeccionar casi todas las mesas, nuestra vista se centra en una chica morena y muy mona pero no demasiado, sentada en la mesa del fondo con su grupo de amigos hablando animadamente.

-¿Quién es esa chica?- le pregunto.

-Helena Haynes, está en nuestra clase de ciencias.

-Es perfecta.

[N/A]:

Hola! Esta es mi nueva novela!! ¿Que os parece? Estoy poniendo mucha ilusión en ella.

Este capítulo está dedicado a todos los que lo leais.

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