Especial de Navidad

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En mis veinte años de vida, he visto muchas películas de Navidad. Venga, ¿quién no lo ha hecho? Las películas navideñas son como una tradición, un extraño ritual, algo que aunque suene ridículo, puede hasta generar la misma expectativa que esperar diez meses para desempolvar tus ornamentos y adornar toda tu casa, comprarle obsequios a tus seres queridos, o salir a cantarles villancicos a tus vecinos.

(Que, por cierto, no a todos nos gusta ser despertados con las mismas canciones que escuchamos cada condenado año, ¿vale? Y eso no nos convierte en «un Grinch». Supérenlo ya, y déjennos en paz).

Bueno, puedo decir con certeza, por mi experiencia como estudiante de cine, que las productoras cinematográficas gastan millones de dólares cada año en estas películas cursis que usualmente tienen la misma trama, con un reparto distinto. Sin embargo, tan malas y mal estructuradas como puedan llegar a ser, me las he visto todas y cada una de ellas. Los hijos de puta saben que son lo más cercano a un círculo vicioso disfrazado de diálogos empalagosos, escenas cómicas, a veces con el típico conflicto de enemigos-a-amantes y mucha nieve, decoración y ostentosos árboles.

Me he visto desde esas donde la protagonista de la nada hereda un hotel/posada/barco/lo-que-sea, hasta esas que transmiten mensajes sobre la familia más que enfocarse en un romance en sí. Y lo que siempre atrae es lo antinatural de cómo se desenvuelve la trama, lo absurdas que puede llegar a ser ciertas escenas, que mientras te ríes, te preguntas: «¿cómo eso puede ser real?, ¿me estás tomando el pelo?», pero que te entretienen lo suficiente para seguir viéndola hasta el final. Y después, escoger otra.

Lo sé, estoy divagando un montón, pero necesito dar contexto y ambientar la atmósfera antes de llegar al punto importante. El punto importante es... precisamente ese; el factor de lo absurdo en las películas románticas de Navidad, o en realidad, en las películas de Navidad en general. Al público le gustan, porque son situaciones intencionalmente cómicas.

Pero, cuando sientes que tú misma estás a punto de vivir el comienzo de una película navideña con todos los elementos absurdos para ser un éxito... créanme, ya no es tan divertido.

—Estás sobre analizando tus opciones de nuevo, ¿no es así? —me preguntó, Val, mi compañera de cuarto, sacándome de mis pensamientos—. Te fuiste como durante un minuto entero. Unos segundos más, y te abofeteaba para traerte de vuelta.

No pude evitar reírme mientras sacudía la cabeza, considerando que toda la situación hubiese podido ser más soportable si ella hubiera accedido a ir con nosotros cuando se lo propuse. «Oh, no, no, no me vengas a usar de escudo, Max, esa es una experiencia exclusiva para Jeremy y para ti, mantenme fuera de eso». Aunque, después agregó: «Bueno, no me mantengas fuera, fuera, porque si será tan malo como haces ver, necesitaré todos los detalles del desastre luego».

A veces sentía que mi vida era como su entretenimiento personal, sin duda.

—Estaba totalmente analizando mis opciones de nuevo —admití—. No lo sé, tal vez debería decirle a Jeremy que mis padres se ocuparon de último minuto y cancelaron todo el encuentro de Navidad.

—Creo que tendrías que ser más creativa que eso si quieres abortar la misión. Jeremy llegará en cualquier momento, y, ya tienen el vuelo prácticamente encima, así que lamento ser yo la que te dé la dosis de realidad. —Ella se levantó de la silla de su escritorio y caminó hasta mí para colocar sus manos en mis hombros—. Pero J.J. conocerá a tu familia, pasará un fin de semana entero con ellos, y sobrevivirá, ¿de acuerdo?

Mis hombros cayeron al dejar salir todo el aire tenso que había estado reteniendo. Me era imposible relajarme cuando tenía miles de escenarios montados en mi cabeza, así como también miles de cosas en la lista de: «¿Qué podría salir mal?». Apreciaba las palabras de aliento de Valentina, pero ella no era la que tenía alguna especie de estrés post-traumático como consecuencia de malas experiencias en el pasado que involucraban a un novio, conociendo a mi peculiar, vergonzosa y sobre todo, sobreprotectora familia.

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⏰ Dernière mise à jour : Dec 26, 2020 ⏰

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