— No funciona. -Dijo Louis-.
— ¿Cómo que no funciona? -Pregunté-.
— No funciona. -Repitió-.
— ¿Nos quedaremos aquí por el resto de la noche?
— No lo sé. Iré a revisar adelante. -Louis abrió el capó, y comenzó a revisar, yo no entendía nada de mecánica así que no podía juzgarlo. Hasta que se acercó denuevo al auto-. Sale humo.
— ¿Humo? ¿Entonces efectivamente nos quedaremos aquí?
— Creo.
— No hay señal. No podemos pedir ayuda.
— ¿Y cuándo saldremos de acá?
— Mañana.
— ¿Lo prometes?
— Lo prometo. -Sonrió-. Ahora, tengo una carpa en el maletero.
— ¿Acaso planeaste esto? -Pregunté-.
— No, pero siempre hay que llevar una porseacaso pasa algo, como ahora. -Comenzó a sacar cosas de la maleta-.
— Ah. Bueno. ¿Tienes.. cuántas carpas tienes?
— Una.
— ¿Una? ¿Y quién cabe en una?
— Yo.
— Ah, sí, pues. ¿Y yo?
— Dormiremos en la misma, no hay problema. -Dijo Louis-.
— ¿Y si me pican los mosquitos?
— Ahora es cuando menos necesito que te hagas la delicada.
— ¿Delicada?
— Sí. Tu confiaste en mí, confía otra vez.
— Confié en tí y ahora estamos en un parque, solos, oscuro, sin nadie, no hay señal, no hay nada.
— Última oportunidad, te juro que mañana no estaremos aquí. -Dijo-.
— Está bien. Vamos a la carpa.
— Hay que armarla. -Respondió Louis-.
— Argh, es cierto.
Con Louis nos dirigimos a un lugar del parque, uno cómodo, donde la tierra fuera suave o algo así. Las carpas no traen suelo. Obviamente. Nos costó armarla pero lo logramos. Yo tenía mucho sueño. No sé por qué, pero lo tenía. Sacamos unas cuantas mantas para poder taparnos. En la noche allá hacía un poco de frío.
— Ok. -Me recosté en la carpa-.
— Dormiremos apretados. Lo siento. -Dijo Louis-.
— Ya, ya no importa. -Sonreí-. Ahora solo necesito dormir.
— Igual. Entonces, dejemos estas linternas por acá por seacaso. -Las dejó a un lado-. Y con esta manta te cubriré. -Comenzó a taparme con una manta color naranja-.
— Gracias. -Sonreí-.
— No hay que agradecer nada. -Sonrió y cerró la carpa-.
— ¿No pasará nada, verdad?
— No. Ahora duerme.
— ¿Dónde descansará mi cabeza? -La ladeé un poco-.
— Aquí. -Apuntó su pecho con la mano-. No hay almohadas. Ya encontrabas raro que trajera carpa, de donde sacaría almohadas.
— Ok, no hay problema. -Me acomodé-. ¿Te puedo abrazar? -Pregunté-.
— Todo lo que quieras. -Extendió sus brazos-.
— Bien. -Lo abracé-. Ahora estoy cómoda.
— Déjame abrazarte, por que yo no estoy cómodo. -Respondió-.
— Ok. Una carpa no es la mejor cama pero sirve.
— Exacto, lo siento por esto.
— No importa.
— En serio perdóname.
— Pero si.. está bien.
— Discúlpame.
— Ya lo hice.
— No lo he escuchado. No me siento bien, tengo sentimiento de culpa.
— No tienes la culpa, creo.
— Ah. Igual, tengo el sentimiento de culpa. No merezco estar aquí. Debería dormir afuera.
— ¡No! -Grité-. Debes dormir aquí. ¿Cómo se te ocurre dormir afuera? -Pregunté-. ¿Eres tonto? Debes dormir aquí.
— ¿Por qué? Yo causé todo esto, tu eres la que debe dormir cómoda.
— No tienes la culpa de nada Lou, ahora duerme bien. ¿sí? Además esto es cómodo. -Sonreí-.
— ¿Entonces puedo abrazarte? -Preguntó-.
— Somos novios Lou, obviamente puedes. -Sonreí-. Ahora buenas noches. -Lo besé-.
— Duerme bien. -Se despidió al fin-.
Louis comenzó a acomodarse, no era cómodo que se acomodase, era más cómodo el resultado. Pero da igual. Estando con él nada importaba. Me quedé profundamente dormida, y a la mañana siguiente desperté.
— Despierta. -Dijo Lou-.
— Jamás me había fijado tanto en tu cara de recién despertado.
— No seas mala. -Me besó-.
— Ya que. Ahora debemos irnos.
— Déjame descansar.
— ¡Acabas de despertar!
— Lo sé. Pero tu sabes, al despertar, debes estar aunque sea 15 minutos con los ojos abiertos, te acostumbras a la luz y después te levantas.
— ¡Lou! Debemos volver a casa. -Reclamé-.
— Está bien. Pero no por que hayamos dormido habrá bencina en ese auto. -Apuntó el automóvil-.
— ¿Y qué haremos? -Pregunté-.
— Caminar, buscar señal, llamar a los chicos y que nos vengan a buscar.
— ¿Y tu auto donde quedará?
— Aquí. Una grúa lo llevará.
— Ah, entonces está bien. -Me levanté, y salí de la carpa-.
— Voy. -Dijo Louis y salió detrás de mí, me abrazó por la espalda-.
— ¡Louis, debemos buscar señal!
— Lo sé.
— ¿Entonces? Suéltame.
— No.
— ¿Por qué? Debemos caminar y buscar señal. ¿Dónde crees que haya?
— No lo sé.
— ¡Ya! -Salí corriendo y Louis fue detrás de mí-. ¡No me atraparás!
— ¿Por qué no? Tengo .. velocidad.
— ¿Velocidad? -Pregunté sin dejar de correr-.
— No tengo un vocabulario muy amplio ____.
— Y yo tampoco saqué las mejores calificaciones en educación física. -Me quejé y dejé de correr-.
— ¿Ves? Sabía que te atraparía. Siempre lo haré. -Sonrió y me abrazó-.
Caminamos, caminamos y encontramos señal en un tipo de cima que había por allí. Yo creo que había señal desde antes pero estabamos tan entretenidos charlando y haciendo tonterías que ni nos dimos cuenta.
— ¡Acá hay señal! -Grité y comenzé a bailar-.
— ¿Eso fue un baile? -Preguntó-.
— Sí.
— Ah. -Rió-. Llamemos a los chicos.
— ¿Sabes dónde estamos?
— No.
— ¿Entonces cómo nos vendrán a buscar? -Pregunté-.
— Que sé yo. ¿Un chip?
— ¿Tienen un chip?
— Creo que se puede localizar a través de una aplicación.
— Ah. Pues llámalos. -Dije y sacó su teléfono, comenzando a marcar-.
— Mi celular no está recargado.
— ¿Hablas de la batería o del dinero?
— Dinero, no puedo llamar.
— Argh. Dame el número, el mío está recargado.
— Está bien. -Dijo y me dió el número de Liam-.
— ¿Y de quién es?
— Solo márcalo.
— Pero de quién es.
— Marca, marca.
— Louis.. ¿Qué miedo tienes?
— Perderte.
— No le coquetearía a otro, ahora tu eres mi novio. -Sonreí y lo besé-.
— Ah, pues estoy conforme. Es de Liam. -Rió-.
— ¿Liam? Liam es mi mejor amigo. No debes desconfiar de mí.
— No lo haré.
— Está bien. -Marqué el número en mi teléfono-. ¿Liam? -Pregunté cuando contestó-.
— Sí. ¿___? -Me preguntó Liam al otro lado del teléfono-.
— Sí, con la misma. -Reí-. Eh.. Necesito su ayuda, o más bien necesitamos su ayuda. -Miré a Louis-.
— Cuéntame. -Dijo-.
— Eh.. A Louis se le ocurrió traerme al parque, hicimos picnic, me cantó una canción, me pidió ser su novia, yo acepté, luego..
— Espera, espera, espera.. -Interrumpió Liam-.
— ¿Qué? -Pregunté-.
— ¿Son novios?
— Sí.
— Aw, que amor. Te felicito.
— Gracias. -Sonreí-. Bien.. entonces después nos ibamos a devolver y no había gasolina. Dormimos en una carpa juntos..
— ¿Juntos? -Preguntó-.
— Sí.
— Ah. Mmm..
— ¡Liam, no hicimos nada! -Respondí y Louis me miró, yo solo le susurré ''Nada''-. Además.. ¿Nos vendrán a buscar?
— Sí. ¿Dónde están? -Preguntó-.
— Yo que sé. Louis dijo que había una aplicación para registrar donde estábamos.
— Ah, sí, entonces vamos para allá. Adiós, y cuídate ____. -Dijo Liam-.
— Argh, sí Liam. -Rodeé los ojos y colgué-.
— ¿Qué te preguntaron? -Preguntó Louis-.
