La Promesa✅

Capítulo 14

Ariel

Dos semanas antes de la llegada de Julieta a Colombia

El día es lluviosa, mi mirada esta perdida a través de la ventana del restaurante observando la lluvia caer sobre el pavimento, mis pensamientos van mil al minutos y con cada día siento que no los puedo controlar. Pienso en todo lo que ha ocurrido en esto año, mi libro llego a ser best seller en Colombia, le pedí matrimonio a Candy, la editorial me ofreció publicar mi nuevo libro, una editorial de estados unidos esta traduciendo mi libro de español e ingles, que estará saliendo el año que viene y Julieta regresando a mi vida. Desde el día que recibí esa llamada de la señora Brooks, mi vida se ha vuelto un desastre, ya no me puedo concentrar en nada, estoy atrasado en mi nuevo libro, tengo un montón de compromisos que tuve que reagendar y mi relación con Candy va de mal a peor. Cada día estoy más distante con ella, y que cada vez que la veo siento que la estoy engañando, ¿no sé qué paso? antes de que recibiera la llamada ella era la mujer con quien me quería casar, pero ahora ya no estoy seguro si quiero eso. Mi mente me dice que me case con ella, porque sin ella no hubiera sobrevivido lo de Julieta, y no tuviera nada de lo que tengo ahora, pero mi corazón me grita que es una horrible decisión, que me estaría casando por compromiso, y no por amor. Yo sé que Candy me ama, y ella siempre ha estado allí para mi, pero con los años he confundido ese agradecimiento y cariño que le tengo por amor, y con el regreso de Julieta me he dado cuenta de mi error cuando estamos a un mes de nuestra boda. He vuelto a mis citas con mi psicóloga y ella igual me a aconsejado a ser sincero con Candy, pero no he podido, y he dejado que las cosas se alargaran más. Ya días he querido llamar a la señora Brooks, ver si puedo hablar con Julieta y decirle la verdad, así tal vez me dejo de sentir tan culpable por lo que hice, pero siempre me detengo, la señora Brooks me dijo que me iba avisar cuando el tiempo era correcto y aun no ha llamado, además, yo no soy la persona favorita de la señora Brooks y no quiero estorbarlas. Ahora puedo entender cuando todos han dicho que el karma es una perra.

—¿Ariel? — La suave voz de Candy me saca de mi pensamientos y regreso a planeta tierra, estamos en un restaurante súper lujoso escogiendo juntos la comida que será servida en la recepción de nuestra boda—te estaba preguntando ¿Qué te pareció la comida? ¿Y si había algún platillo en especial que te gustó? — para ser sincero solo probé la comida y no tome nota de cual me gustó más, estado pensando tanto en mis desgracias que no puse atención en lo que me estaban sirviendo.

—Todos los platillos estaban ricos, cualquiera estarían bien para nuestra boda, al final del día siempre tendré que pagarlo, porque por lo que veo este lugar nada será barato —digo con mucha indiferencia y Candy me queda observando con enojo y frustración.

—Podrías darme más entusiasmos Ariel, por lo que veo he estado planeando esta boda sola, es como si me voy a casar sola —me afirma frustrada, ya siento una pelea aproximarse.

—Ya te di mis opiniones en muchas de las cosas de la boda, y déjame recordarte que eras tú quien se quería casar de inmediato, yo te dije que esperemos tan siquiera un año después de que todo lo de mis libros se calmaran un poco, pero no, te metiste en tus caprichos que querías una boda en unos meses, así que no me culpes que no tengo tanto tiempo —exclamo.

—¡Pero tú me dijiste que estaba bien! —me grita, lo bueno que el restaurante esta vacío sino estaríamos haciendo un escandalo —¡me dijiste que estarías ocupado, pero que harías tiempo para nuestra boda! ¡pero ahora solo estas distante, y solo te importa es tus estúpidos libros y a la mierda nuestra boda!— siento que mi sangre comienza a hervir.