Ella
Subió al avión despidiéndose de todo y todos. Con la agonía del primer vuelo en avión y de ese abrazo grupal.
Aun con la fragancia de Nath en la nariz y el rancio gusto de ver las lágrimas de Erwoud.
Indecisa, y completamente asustada.
Se abrochó el cinturón de seguridad, aunque faltara más de la tercera parte de los tripulantes y los pasajeros, aunque faltara quince minutos para despegar.
Aunque ellos la esperaran en la puerta 2A de salida del aeropuerto.
Se abrochó el cinturón de seguridad para no salir corriendo.
Y mientras los minutos pasaban lentos, Harriet deshechó la idea de huir.
Porque ya no podía volver a esa casa, porque ya no la dejarían entrar, porque aparte de esos dos chicos perfectos no tenia a nadie más, y porque acababan de cerrar las puertas del avión.