Capitulo - 2 -

30.4K 1.1K 171
                                    

Buenas madrugadas desde España... ¡¡¡¡Ya estoy aquí!!! . Se que me he echo algo de rogar con  la vuelta,  pero este tiempo sin escribir me ha ayudado bastante, en un año he escrito tres libros y eso quieras o no agota un poco jiijijij aun así vuelvo con las pilas cargadas, deseando que esta nueva y diferente historia os cautive.

Gracias por estar ahí, y quererme como lo hacéis. 

......................................................

Cuando llegué a casa aun seguía flasheada,  Cristina ya se había ido, “mierda” , me quedé con muchas ganas de contarle a alguien mi experiencia con el tarado más guapo con el que había tenido el placer de coincidir. Después de echarme en el sofá otro rato para mirar a las musarañas que bailaban  danzas mágicas en el techo, me decidí a leer un poco, tenía que pensar en dormir si quería estar con energía para el día siguiente, pero como siempre pasa cuando un libro es bueno… se me hicieron las tantas.

***

-      ¡¡¡ Y como coño le has aceptado la solicitud?¡¡¡ - grité exasperada mientras Elena me miraba con cara de cansancio – encima no me mires como si estuviera loca…

-      ¿y cómo quieres que te mire? – se dejó caer en una de las sillas de nuestra pequeña sala y pegó trago de su café – aun no son las nueve de la mañana y ya estás en este plan…

-      La culpa es tuya, te pedí el turno de tarde…

-      El turno de tarde le toca a Dolo y lo sabes… no pasa nada porque madrugues un poco, - resoplé indignada- ¿piensas estar con esta actitud?

-      ¿Y cómo quieres que esté? – me senté frente a ella – Manu es un cerdo, te conté lo que me hizo ¿y aun así lo pones a currar aquí de voluntario? Somos amigas… eso no se hace.

Se rascó la cabeza y me miró sonriendo

-      De primeras, yo no lo he puesto a currar, está aquí voluntariamente, así que no me ha tocado otra que aceptar, yo no mando en todo…- miré hacia otro lado – segundo, has estado con tantos ineptos que “perdone usted” si no he recordado la cara de uno de ellos, y tercero, hace como cuatro años de eso…¿en serio tienes veintisiete años?

-      Eso pone en mi D.N.I …- dejé caer los brazos a ambos lados y apoyé la cabeza resignada en la mesa, mi postura vista desde fuera era cómica – perdona Elena, es que… ¡¡¡ No lo soporto!!! Fue un autentico cerdo y ahora verlo aquí… ¿pero de que va?

-      No le des más vueltas Paula, con ignorarle tienes de sobra… - se puso en pie y se acercó a mi – quizá se sienta tan mal por haber sido un cerdo que ahora quiera redimirse.

-      Ya… ¿haciendo un voluntariado en un centro de terapia?

-      No sé, la gente tiene maneras raras de corregir errores…

-      Pues entonces su madre debería metérselo de nuevo dentro otros nueve meses, eso sería una buena solución.

Me miró con aprensión, antes de echarse a reír

-      ¡¡ Por dios!! No seas tan bruta… está visto que madrugar no te sienta bien.

Un chico ¿¡¡¡Normal!!!? (YA EN AMAZON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora