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Julia y Clare, decidieron disfrutar de las vistas que permite el jardín de la casa de los Emerson. Este había sido decorado desde un tiempo atrás con la dirección total de ella. Ambas esperaban por su respectiva pareja, se hizo muy tarde la noche anterior cuando los dos hombres se encerraron en el despacho, solo se escuchaban sus risas y el tono burlescos de los comentarios sobre lo ocurrido, ellas no esperaron y se marcharon a dormir, pues la celebración de ellos prometía durar horas.

—Tu padre entró a la habitación con toda la discreción que le fue imposible hacer, opté por dejarlo soñar con que no me había despertado, pero la verdad es que chocó con todo lo que encontró a su paso. —Comentó la mayor de las mujeres con tono burlesco.

—Creo haber escuchado que cantaban una canción extraña, ya los quiero ver hoy. Y mira que me están atrasando para ver sus caras, sé que será muy entretenido, son las diez de la mañana y ambos siguen durmiendo.

—Van a necesitar un exorcista que les saque todos los demonios, ese Whisky, es literalmente un acabose para cualquiera, y si se han sobrepasado, ¡Será su muerte!

—Espero recuperar a Theodore sin heridas de guerra, porque con la guarapeta esa, va a necesitar de su domingo de resurrección.

Tras unos minutos, fue Clare quien dejó el cómodo sillón en que ambas se encontraban sentadas para entrar a la casa. Disfrutaría de una deliciosa ducha con espumas.
Se había perdido en el agua refrescante y la música que salía de las bocinas. La piel de sus pies y manos estaban arrugadas por el tiempo que estuvo dentro del agua, tenía mucho tiempo sin que eso sucediera, su vida laboral no se lo permitía, incluso los fines de semana que utiliza para mantener en orden su apartamento. En sus planes no se encontraba salir, pero, se vistió con ropa adecuada para hacerlo, en caso de que llegase a suceder.

Al salir de su habitación, se encontró con una situación divertida. Theodore tenía puesto lentes oscuros, mientras se sostenía de la pared.

—Un café extra cargado te servirá, Grey. —Se mofó, acercándose a él. — ¿Ha hecho una buena noche, cariño?

Él negaba, sosteniéndose la cabeza con las manos. Su cuerpo desprendía el olor a alcohol, y parecía domado por la resaca.

—Creo que voy a morir, Clare —murmuró. Su aliento era la viva evidencia de que se había pasado de copas.

—Vamos a la cocina, te llevaré por un café. Va a ayudarte un poco, buscaré unas pastillas para ti. Pero, veré si esto funciona —se colocó de puntillas para darle un beso rápido.

—Me quedaré más tiempo en este mundo solo por tus besos, pero aleja a tu padre y a su whisky mortal de mí.   
Clare se echó a reír, pero pronto detuvo su exagerada risa, el hombre que caminaba a su lado, parecía estar al borde de la muerte. Verle tan quejumbroso era un tanto divertido, pero le quería tanto, que en alguna parte de su corazón se sentía mal de verle de tal forma. Decidió brindarle un poco de ayuda, consiguiéndole lo necesario para ayudarle a recuperar la vida tal y como la conoce.
La chica le colocó una taza humeante de café en el sitio en que Theodore había tomado su lugar para el desayuno. Y él le dio sorbos rápidos, estaba muy fuerte, pero era totalmente disfrutable, y más, porque había sido preparado por su novia. Julia regresó al comedor para encontrarse con ellos, llevando la noticia que se estaba tomando con diversión. El jefe de familia, no les acompañará en el desayuno. A Clare y Julia les parece de lo más divertido, sin embargo, al de apellido Grey no le hace el mínimo de gracia, pues también está sufriendo del día después. Aunque se le desliza una sonrisa en el rostro, al recordar el motivo de la celebración. Nunca había golpeado a nadie, y la razón de su primera vez, ha valido totalmente la pena. Y si el tipo regresa, no dudaría ni medio segundo en volver a hacerlo. Toma el desayuno que su suegra ha preparado, pese a que en su estado no tiene las ganas, por educación toma lo más ligero. Cuando terminan, Clare le acompaña a la habitación para ofrecerle la solución maravillosa para curar su problema actual. La madre de la chica les avisa que debe salir, que ellos pueden quedarse porque no tardará en regresar.

UN GREY ENAMORADO Where stories live. Discover now