¿Caperucita enamorada de el lobo?

Capitulo 15

Les prometí algo largo así que espero que les guste... Los quiero

-Bueno Emily Will ha sido contagiado por un org, pero estará así sólo por unas semanas, ser contagiado por un org te convierte en casi uno de ellos, poco a poco la enfermedad se cura.

A menos que una Alfa org se convierta en su pareja.

-Will nunca haría eso.-dije recordando que nos amábamos el uno al otro.

-Por supuesto que no, pero el Will contagiado no es precisamente tu Will, las manadas de org están atentos a los contagiados, pues saben que con ellos su manada sería más fuerte y numerosa.

-Pero sí yo encuentro a Will antes que otra lo encuentre, ganare, ¿cierto?

-Tal vez, puede que te recuerde como recuerda su propio nombre, o puede que simplemente no recuerde nada de ti.- ¿Cómo se suponía que iba a enfrentarme a eso?

3 días después.

El tío de Will me dio las suficientes explicaciones como para encontrar a Will y recuperarlo.

Tendría que ir literalmente a vivir a las montañas. Pero por Will, lo que sea.

Salí de mi casa, sin preocupaciones por mis padres, pues otra vez más, estaban de viaje.

Ya arriba de mi caballo negro, con mi cazadora negra, pantalones de camuflaje, botas de montaña, una trenza y mi backpack estaba lista.

Cuando llegue a lo más alto de la montaña el sol ya se estaba metiendo, puse mi carpa de campaña prendí una fogata y amarre mi caballo a un árbol, mientras iba obscureciendo iba pensando en lo que me dijo el tío de Will, según el, yo, por haber tendió grandes vínculos con Will antes del contagio, lo atraería de una forma natural. También me dijo que oyera muy bien los aullidos, y en cuanto a los org, podían atacarme, pero lo más probable era que no lo hicieran, pues no están interesados en campistas o algo así, pero por sí acaso no se olvido de darme armas especiales para ellos.

Me metí en la carpa de campaña y me comi una barrita energética, mañana empezaría a buscarlo, a recuperarlo.

Cuando el sol ya se colaba por la carpa, me levanté y desayune algo de fruta, decidí ir a buscar huellas y a explorar.

Todo el día busqué y busque hasta el último centímetro, en esa zona no había nada, pero el plan era inspeccionar una zona cada día e ir buscando en diferentes zonas, así que no perdí todos los ánimos... Por ahora.

Ya exhausta, decidí ir a cenar pero no sin antes enjuagarme el cuerpo y cabello en algún estanque o cascada; tome una toalla y ropa limpia para irme a "bañar" camine hasta un cascada, sabía que era grande, la podía escuchar, pero aún no la veía, un pequeño sendero me guió hasta la orilla de la cascada, estaba apunto de llegar, cuando veo una espalda desnuda y fuerte, de un hombre, su cabeza con un hermoso cabello obscuro está agachada e inclinada hacia sus manos y su cuerpo está arrodillado en la orilla, tomando algo de agua con las manos. Will.

No me lo creía.

-¿Will?.- pregunte con la voz quebrada.

Volteo su cabeza y nuestras miradas se encontraron, sus ojos ámbar me estudiaron de arriba abajo.

-¿Quien eres?-dijo levantándose, con un tono tan frío que me heló la sangre. Así que no me recordaba; en un intento fallido de no llorar, hablé.

-Bueno es que vengo a decirte que yo...- me interrumpió.

-Oye, ¿puedes dejar de chillar por un momento y explicarme que haces en mi territorio?-dijo cruzando los brazos.

Auch! Eso me dolió y mucho. Y aunque fuera el hombre al que más amaba, me dolió y no lo iba a dejar así, ¿chillar? ¿qué no sabia lo que me pasaba? De hecho no lo sabía, pero en un ataque de tristeza y enojó e irá me valió un rábano que no lo supiera.

-¡Oye tu! ¿que no sabes como se le trata a una mujer?.-dije golpeándole con mi dedo índice en su pecho.

-Hmm déjame pensar...-se puso la mano el la barbilla fingiendo que estaba pensando.-Sí lo sé, otra cosa es que no lo ponga en práctica.-dijo sonriendo, orgullosa de su "gran" respuesta.

No podía creer que el mismo Will que hace unos días hablaba con palabras dulces y tiernas me estuviera diciendo eso mismo.

-¡Pues deberías!- dije empujando su cuerpo para atrás, pero con más fuerza.

-¡Oye cálmate! deberías respetarme sabes?- dijo tomándome por los hombros.

-No puedo creer que...

-Niña chiflada deberías dejar de empujar! Estamos a punto de caee...

-Deja de darme órdenes!- y lo empuje aún más.

Sí hubiera razonado sus palabras hubiera sabido que estábamos apunto de caer, pero ahora estábamos los dos cayendo al estanque.

Mi cuerpo se hundió y la corriente me llevo a un lugar al cual desconocía, cuando pude sacar una parte de mi cabeza, pude ver que estaba a punto de caer a una segunda cascada, sí lo de abajo no estaba lo suficientemente profundo, moriría.

Volví a sacar mi cabeza y grite lo más fuerte que pude.

-Will! Ayudaa!!

-Espera un segundo.

Después de unos 4 segundos sentí unos brazos rodeando mi cuerpo completamente, un segundo después caíamos por la cascada.

Aún con la ayuda de Will batalle en salir, me arrastre a la orilla tosiendo; es como sí nos hubiéramos vuelto a conocer, del mismo modo, en un estanque, sólo que esta ves mucho más peligroso, y con un Will muy diferente.

Lo que me saco de mis pensamientos fueron unas voces que provenían de arriba de nuestras cabezas.

-Lo hemos encontrado.