21.- Epilogo

739 62 4
                                    

Carolina

—¿Ya me dirás a donde vamos? – le dije a Agustín, quien me había vendado los ojos y me dirigía a un destino del que no tenía idea.

Hoy festejábamos nuestro cuarto aniversario, 4 años a su lado, se decían fáciles pero no lo era, pasamos por mucho, pero estaba completamente agradecida por seguir a su lado, si de algo estaba segura es de que amaba a este ser.

Aguarda un poco pequeña, y confía en mí, pronto llegaremos– me dijo y de pronto paro de conducir y apago el coche — Te ayudaré a bajar, aún tenemos que caminar un poco.

No sé cuánto caminamos, subimos y bajamos, pero a mí se me hizo eterno el camino, sentía que estaba en medio de un laberinto.

Llegamos – dijo por fin y sentí como se posaba tras de mí y quitaba delicadamente la venda de mis ojos.

Agustín – dije con una sonrisa enorme cuando me di cuenta del lugar en el que estábamos.

El invernadero había sido el lugar en el que más tiempo pasábamos mientras grabábamos la serie, nadie de los chicos sabía de su existencia lo cual lo hacía más especial.

Recuerdo habernos quedado varías noches solo viendo las estrellas.

Extrañaba este lugar, a pasado tienpo desde la última vez que estuvimos aquí – dije

Dos años – susurró — Recuerdas la primera vez que te traje aquí.

Un sin fin de imagines volaron por mi mente, desde ese dia todo había cambiado entre el y yo, aunque en el momento no nos dimos cuenta.

¿como conseguiste que abrieran el estudio esta noche? – pregunté de la nada.

Tengo contactos – fanfarroneo – Este lugar es tan especial para ambos que no podíamos estar en otro lado una noche como hoy.

Yo sonreí, estaba por hablar cuando me tomo las manos y comenzo a hablar de nuevo.

Un día hace cuatro años, te pedí aquí mismo que fueras mi novia, no tuve que pensarlo mucho, sabía que estaba enamorado de ti, que me había atrapado tu dulzura y tu sencillez – oírlo hablar así de mi me conmovía demasiado.

Hoy sigo a tu lado por qué en todo este tiempo descubrí qué hay más cualidades de ti de la que crei que tendrías– prosiguió — Y porque estoy seguro de que te amo y te quiero en mi vida siempre.

Por eso, cuatro años después me encuentro en el mismo lugar para pedirte que te cases conmigo — En ese mismo instante rompí en llanto, esto era tan lindo que no parecía real.

De pronto se puso de rodillas —Carolina Kopelioff Bajdacz ¿Quieres Casarte Conmigo? –.

Las lágrimas caían por mis mejillas, solo atine a asentir, ni siquiera podía hablar, al segundo mi futuro esposo se encontrando uniendo nuestro labios, dejándose llevar por todos los sentimientos que experimentábamos.

Siiiii! Por su puesto que quiero casarme contigo – Dije por fin y el Enseguida el comenzó a festejar conmigo.

Y yo solo podía pensar en lo afortunada que me sentía y que no me arrepentía de nada, si la vida me diera otra oportunidad volvería a llegar tarde al primer día de talleres para que el el estupido chico que más amaba se burlara de mi de nuevo.

F I N

I Love\Hate You {Aguslina}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora