Inesperadamente ¿Tú?

Problemas y anuncio

Definitivamente la familia de Annie era como me la imaginaba, unida, sencilla y sobretodo amorosa, y eso que aun no conocía a sus abuelos y por su puesto a la festejada, por un momento cuando salieron sus hermanos creí que saldría mal parado pero gracias a dios todo salió bien, no creo que hubiera sido una buena primera impresión si golpeaba a sus hermanos. Cuando Ari y Maggie se llevaron a Annie a la cocina sabia que vendrían el típico interrogatorio.

 —     Y Mark, hace cuanto que conoces a mi hija — La pregunta vino del papa de Annie.

—     5 años señor.

—     Ese es mucho tiempo, donde se conocieron.

—     Trabajamos en la misma compañía — No sabía cómo tomaría la familia de Annie la noticia de que yo era su jefe y sobre todo el dueño de la compañía, es por eso que no dije mas.

—     Oh, ahora sé porque la conoces hace tiempo y no hemos escuchado de ti.

—     ¿A qué te dedicas?

—     A la industria de la construcción, soy arquitecto.

—     Sabes que Annie es la más pequeña de la casa ¿verdad? por lo tanto la mas protegida, por lo que no espero nada menos que lo mejor para ella, como piensas mantenerla.

—     Ya basta de preguntas incomodas John, no es como si nuestra hija se vaya a casar en una fecha próxima — Dijo Catherine, si ella supiera que esa era mi intención. — Además de que ya sabes que Annie tiene novio.

Al parecer Annie no les había dicho que Robert era historia.

—     Creo que se te está pasando un pequeño detalle Cathy — Dijo John — Porque a mí no se me ha pasado desapercibido la manita sudada que han tenido estos muchachos desde el momento de su llegada, y si no porque lo ha traído.

—     Si mama, desde que llegaron, se noto que Annie está con Mark y no con bobo, a menos que esté haciendo una doble jugada — dijo Randy encogiéndose de hombros.

—     Pero bobo me llamo ayer diciendo que… — Catherine estaba tratando de darle sentido a lo que le decían, no termino de decir la frase cuando el timbre sonó, al parecer ya estaba aquí la festejada.

Annie salió a prisa de la cocina con dirección a la puerta, se nota que extrañaba mucho a su hermana si corría para recibirla, Catherine aun no terminaba de entender que pasaba.

De repente escuche a Annie levantar la voz desde la puerta, al parecer no era la festejada, no pude evitarlo y me acerque a ver qué pasaba y ahí estaba bobo el idiota.

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 Maldición, maldición, maldición, maldición, repetía una y otra vez en mi mente, como se le ocurría a Robert presentarse en casa de mis padres después de lo que paso, que no entendía que esa era su peor jugada, tenía que hacerlo irse antes de que Mark y mis hermanos lo vieran, aunque mis hermanos no supieran el por qué había terminado con él, ni siquiera les había dicho que había terminado con él.

Salí lo más rápido que pude a la puerta, y una vez que la abrí ahí fuera estaba Robert con un enorme ramo de rosas rojas y una sonrisa en sus labios.

 —     ¿Que haces aquí Robert?

—     Hola a ti también, yo estoy muy bien ¿y tú? — dijo el acercándoseme para darme un beso, pero antes de que lo hiciera me aleje y volví a repetir:

—     ¿Que haces aquí Robert?

—     Pues como dijiste que no podíamos vernos para hablar porque tenías que venir con tus padres, pensé que sería buena idea venir. — dijo muy quitado de la pena.