Capitulo VI: Fiesta de sangre

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 La fiesta estaba en su máximo momento.

Lydia vio como la gente se sacudía alrededor de la hoguera en el patio trasero de la casa, también habían algunos en la piscina y más atrás pudo ver lo que le había dicho Stiles, parejas se encontraban besuqueándose en la oscuridad del bosque, aunque eran fácilmente reconocibles de lejos.

—¡Has venido! —ella casi se salió de su piel al ver a Jackson junto a ella, llevaba dos vasos de plástico rojo en las manos, tenían un liquido transparente, de lejos lo olio, alcohol.— ¡Tomá!

Ella lo acepto sonriendo, nunca había tomado así que no sabía como era beber. Dio un sorbo, sintiendo la bebida quemar su garganta.

—¿Qué es?—pregunto arrugando el ceño

—Tequila—dijo este— pareces una chica arriesgada.

Tuvo que gritar debido a la música que se escuchaba a alto volumen, ella miró alrededor, la gente parecía divertirse, se preguntó cómo sería divertirse. No había tenido infancia, no sabía como se sentía el estar alrededor de la gente, más allá del resto de los pacientes y los doctores.

—¿Has visto a Stiles? —preguntó ella casi gritando.

Este frunció el ceño, como si el simple nombre del chico pareciera ser inadecuado en ese momento. 

—Creo que Heather se lo llevó a las bodegas —dijo este— ya sabes, para enrollarse.

Esta asintió, sabía lo que significaba enrollarse. Miró fijamente le vaso y luego a la gente.

—¿Quieres bailar? —preguntó Jackson dando una de sus sonrisas de galán.

—Ehh... —miró a la pista y luego la mano que este le tendía— no sé bailar.

Este frunció nuevamente el ceño, Lydia tuvo que admitir que a pesar de eso, Jackson era bastante apuesto. Tenía ese rostro de los modelos de las revistas, las que solían mirar las enfermeras diciendo comentarios completamente fuera de lugar para una niña.

—Solo déjate llevar—dijo este tironeando de ella hasta la pista. Y ella le hizo caso, como si fuera natural. Y incluso rio mientras lo hacía, era...como si una parte de ella supiera cómo se hacía. Algo natural, se pregunto si para todos era igual. Si era posible ello, también si de pequeña le gustaba hacerlo, antes de irse al psiquiátrico.

—Esto es una tontería —dijo la voz a su lado— ¿bailar con el chico de sonrisa de imbécil?

Ella ignoro la voz, pero esta seguía presionando. Era una constante visita a su alrededor.

—¿No quieres descubrir porque soñaste lo que soñaste? —la voz sonó más tentadora aun—  la casa, es real...esta aquí, en el bosque. ¿No quieres ir a verla? ¿No quieres saber si tus sueños son reales?

Eso hizo que se detuviera, Jackson frunció el ceño.

—¿Sabes dónde queda el baño?—pregunto ella fingiendo una sonrisa

—Por el pasillo, la primera puerta a la derecha —dijo este— te esperare allí

Ella camino rápidamente hacia el pasillo y dejando el vaso sobre una mesa de allí, abrió la puerta y el cerro detrás de si. Respiro agitadamente.

—Bien, dime ¿dónde está?

—Sabía que te interesaría —dijo la voz, sonaba burlona y sarcástica— muy sencillo Lydia, intérnate en el bosque, la encontraras. Así debe ser.

—¿Cómo se que no es otro de tus juegos? —pregunto ella— ¿Qué no estás haciendo esto por una enferma razón tuya?

Supongo que tendrás que confiar ¿no?—rio— vamos Lydia, te reto a ver si te animas... Es tu decisión, si seguirás escondiéndote como una cobarde de tu destino, o lo aceptaras.

Grita | Teen Wolf #1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora