Capitulo 5

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Charlotte ingreso al inmenso salón acompañada de sus padres y hermano, esa noche se celebraba un baile en honor a la recién estrenada condesa de Chester y al parecer nadie se lo había querido perder, más que todo por el hecho que su enlace fue uno de los mayores escándalos la temporada pasada. Su doncella se había esmerado en su peinado y su madre se encargó de seleccionar el mejor vestido, ambas alegaban que debía sorprender a su prometido, como si ella estuviera interesada realmente en él.

-Recuerda debes mostrarte solicita y complacida con la presencia de Lord Granby, bailaras con él dos piezas, le sonreirás y conversaras con él todo lo que sea necesario- dijo su padre con ese tono que no daba lugar a replicas.

Drake a su lado mantenía una expresión seria, cada tanto apretaba los puños y desviaba la mirada a cualquier lugar que no fuera Lord Beaufort.

-Charlie, si necesitas mi ayuda sabes que puedes contar conmigo- se atrevió a decir Drake una vez su padre se había retirado a la sala de juegos.

-Gracias hermano, pero creo que esta vez no puedes salvarme- respondió con una sonrisa triste y conteniéndose para no lanzarse a llorar en su hombro.

Dominik ingreso al salón siguiendo a sus padres. Después de la visita a casa de los Lowelace intentó pensar en otra cosa pero su mente traicionera siempre volaba hacia el momento que la doncella había interrumpido, y por más que quiso concentrar su atención en la mujer que visitaría después del baile, o en el libro de cuentas, no pudo.
El salón estaba bastante abarrotado, pero encontrar a Lady Lowelace no fue un gran reto, sin proponérselo su vista seguía cada uno de sus movimientos, debía admitir que se miraba esplendida, la tristeza que vio en sus ojos esa mañana cuando partió de la mansión, parecía un fantasma, al ver la sonrisa que adornaba su rostro al hablar con Lady Browing y su hermano el libertino Lord Worcester.

-Milady se ve hermosa esta noche- dijo irrumpiendo en la amena conversación.

-Gracias, es un gusto verlo milord- soltó Lady Browing al ver que su amiga era incapaz de responder.

-El gusto es mi milady- respondió con el entrecejo fruncido por la confusión.

-Lord Granby es un placer coincidir otra vez- intervino también Lord Lowelace fingiendo amabilidad.

-Lord Worcester siempre es un placer- dijo utilizando el mismo tono hipócrita -Lady Lowelace, veo que el paseo por los jardines le sentó de maravilla, la veo con otros aires- volvió a probar esta vez dirigiéndose a su principal objetivo.

-Gracias milord, creo que si- respondió haciendo ese movimiento inquieto con sus manos y la vista en cualquier lugar que no fuera él.

Charlotte estaba más que nerviosa, se había preparado para verlo de nuevo y mostrar indiferencia y desprecio, pero al recordar que estuvo a punto de besarla dentro de aquel templete, la dejaba descolocada y lograba que se ruborizara violentamente.

-Me gustaría que me apartara un baile milady- dijo Lord Granby con la vista clavada en Charlotte.

-Milord, me halaga pero mi carnet ya se encuentra lleno- intervino Sophia tratando de ayudar a la castaña que parecía incapaz de responder nuevamente.

-Es una verdadera pena Lady Browing- contesto Lord Granby con el ceño fruncido en señal de molestia por las inoportunas intervenciones de la rubia.

-Si milord, una pena- contesto su amiga con una sonrisa de lo más cínica.

-Lady Lowelace veo que su carnet también está casi lleno solo quedan disponibles los únicos dos vals de la noche- volvió a probar dirigiéndose a ella específicamente.

Complicando al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora