Cazadores de sombras Un don del cielo

Capitulo 20 Las hadas pueden mentir

Valeria se metió en su habitación un tanto perturbada... había momentos en los que creía que no volvería a ver a alguien como alguien de fiar pero tal vez había encontrado a una persona en quien pudiera confiar...
Entonces un pensamiento extraño invadió su mente
Ve al lago le indicó la voz con cierto encanto y dulzura,Valeria agitó la cabeza un tanto desorientada haz lo que te digo... las respuestas están en el lago  parpadeó se levantó de la cama y se dirigió al lago.

Valeria se encontró caminando hacia el lago East River sin tener muy claro porque, lo hacía pero creía que no lo necesitaba solo necesitaba respuestas que nadie parecía darle, sintió que el vacío dentro de ella lanzaba chispas... como si decidiera tomar control de las situación y encontrar el pedazo de corazón que le faltaba, alguien o algo se lo había llevado aunque tal vez le reconfortara la idea de que alguien se lo hubiera llevado y posiblemente alguien lo hubiera hecho.

Miró el lago con melancolía, casi no hubiera creído que alguien le diera las respuestas en un lugar como ese el lago, se había teñido de azul ultramar casi negro pero con una fina capa de plata, le había encantado ir con Antonette al parque y dibujar el lago, mientras su tía diseñaba un vestido utilizando los colores del lago, extrañaba esas épocas, extrañaba esa vida donde sólo tenía que preocuparse por la escuela, por sus clases de dibujo, por saber qué modelo posaría, por las discotecas, por lo libros, por Thomas

<<Thomas>>

no se soltó a llorar... pensó que estaba ahí por él, que su vida tomaba un giro inesperado por él ya no debía llorar sino afrontar lo que tenia adelante, y eso haría 

Entonces alguien la jaló, se dio un golpe en la espalda al caer y chilló pataleaba mientras la arrastraban por el lodo  encajaba las uñas de sus manos al césped intentando que se atoraran en algo pero la mano que la sostenía no la soltaba y la jalaba con una fuerza asombrosa, ella divisó el lago, se dirigían al lago, sólo tuvo tiempo de gritar antes de ser arrastrada al fondo del lago y el agua le cubriera la cabeza

Ahogo fue lo único que ella pudo pensar después de hundirse y ser arrastrada hacia el fondo , ella intentaba desesperadamente tragar aire, el pecho se le cerraba. No podía llenar los pulmones pues tenían agua adentro. Los ojos y la garganta le ardían. El agua sabia a sal dulce, notó el sabor del agua y tosió tragando más agua, el corazón le golpeaba muy fuerte dentro del pecho. Le dolía todo el cuerpo, entonces vio una luz al fondo del lago radiando con magia

Ven conmigo hermanita, estarás mejor aquí

y eso fue lo único que escuchó antes de desvanecerse

Llovía ,caminaba con un pañuelo en la cabeza, un pañuelo muy mojado y el cabello saliéndole de la coleta mal hecha, la pequeña traía el cuchillo Serafín en la mano sosteniéndolo con fuerza , mientras temblaba, lo que no sabía si era por frío o por miedo, estaba escondida detrás de un árbol  Ithuriel susurró la pequeña y vio como el cuchillo cobraba vida, resplandecía con fuerza ,se tranquilizó con sus respiraciones, y el ritmo de su corazón se aceleraba más sabía que él vendría por ella y la tranquilizaría pero mientras eso pasaba seguía el miedo, abrazó sus piernas y dejó en cuchillo en sus rodillas, el fuego celestial que manaba no debía ser tocado ni siquiera por los cazadores de sombras, ya que quemaba y le hacía daño pero en la pequeña el fuego parecía ni siquiera querer hacerle daño ella había aprendido a controlarlo, ya que su padre la había visto tocarlo, ella lo acarició y el fuego siguió a sus dedos

--¿Qué estás haciendo aquí?-- le preguntó el hombre mirándola con sus ojos de color carbón --deberías estar entrenando-- la pequeña se encogió más

--no quiero entrar a esa jaula-- dijo la pequeña, el hombre le sonrió y le tocó el pelo con dulzura

-- ¿tienes miedo?-- ella asintió -- bueno el miedo no se vence sin hacer las cosas, el miedo se vence haciendo las cosas con valentía poniéndole esfuerzo a lo que le temes-- el hombre se levantó y le tendió la mano-- yo te ayudaré a entrenar

Y entonces una bocanada de aire la hizo despertar abrió los ojos y vio a Jace y a Alec

--por el Ángel --dijo Jace mirando a Valeria con los ojos llenos de alivio -- creí ... eso no importa, lo que importa es que estas bien -- dijo él tomando su cara

Vio la hermosa cara angelical que la veía, Jace estaba mojado, mugriento una sonrisa se asomó por los labios del joven, ella vio todo el amor que él tenìa dentro en sus ojos, había tenido miedo... tal vez miedo  perderla y que jamás pudiera volver a encontrarla, el modo en la que él la tomaba a ella era de amor, amor puro  y luego vio el alivio, el alivio de saber que ella estaba viva, que no lo dejaría en un buen rato y sabía que debía disfrutar cada momento con ella, Dios mío ella también lo amaba ni siquiera sabía si eso era amor ,lo único que sabía era que él la amaba de una manera irrevocable ,  pero había cosas que impedía el amor entre esos dos jóvenes, una de esas cosas era Clary, ella no quería dañar a Clary, ¿ Clary había hecho algo para merecer eso? ¡no! nunca en la vida le haría eso, se había encariñado con ella de manera especial como si hubiera un lazo que las uniera... volvió a ver a Jace que le sonreía abiertamente como si nada más existiera que ellos dos y Valeria por un momento creyó que era verdad y deseaba con todo su corazón que lo fuera pero a veces los deseos eran invisibles y  creyó que era lo más hermoso que ella había visto en toda su vida, tosió con fuerza y se volvió a desvanecer