14 de Febrero de 2012. (Lola)

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14 de Febrero de 2012. (Lola)

“De enamorado a loco va muy poco” (Refranero español)

-      ¿Te falta mucho, princesa?

-      No seas pesado cariño, la perfección requiere su tiempo.

Era la enésima vez que César le preguntaba y Lola estaba empezando a mosquearse. Es cierto que estaba tardando, pero él no tenía que maquillarse adecuadamente y pintarse las uñas.

Nada más enterarse de que su chico le había preparado un plan romántico sorpresa para hoy, Lola se había duchado y secado el pelo. Se había enfundado en un vestido rosa bastante ceñido y había comenzado a ponerse guapa para él. Mientras tanto César había utilizado el otro baño del piso y había acabado de arreglarse hace tiempo.

-      Estoy lista – Dijo saliendo del baño imitando a una modelo para impresionar a César.

-      Vaya… ha merecido la pena la espera – Contestó César embobado.

A Lola siempre le hacía gracia la expresión de su novio cuando se arreglaba. Daba gusto ver que aún le sorprendía y excitaba. Cogiendo una chaqueta roja y un bolsito a juego se dirigió junto a su novio al coche. César abrió caballerosamente la puerta a su novia y esta se sintió halagada. Mientras César conducía Lola pensaba en que estaba viviendo su sueño de pequeña, tener una relación estable con un chico que la trababa como una princesa. Sabía que muchas de sus amigas la envidiaban.

Se puso a recordar el inicio de su relación con César. Las pequeñas quedadas para tomar café o ir al cine pronto se transformaron en largas charlas por teléfono, tanto hablando o por WhatsApp. El primer beso que se dieron tras acompañarla amablemente a su casa. La conversación sobre lo que buscaban cada uno en ese momento, donde ambos decidieron que querían algo serio. Las charlas íntimas que tuvieron mientras pasaban los días juntos, donde se sinceraron respecto a las relaciones anteriores. La primera vez que tuvieron sexo… no, sexo no, pensó Lola, ellos hicieron el amor, porque estaban enamorados, eso se dijeron. El momento en el que César le dijo que se llevase ropa para pasar la noche y cambiarse allí, cediéndole un cajón para guardar sus cosas. Debido a esto, ahora pasaba más tiempo en casa de César que en la suya propia.

Llegaron a la zona de la plaza de la Merced y César metió el coche en el parking que hay allí. Cogiéndola de la mano se encaminaron dirección al restaurante.

 Lola seguía sumida en sus pensamientos. Miraba al chico que la acompañaba, que tantas alegrías le había dado. Y es guapo pensó Lola, muy guapo. Le encantaba como llevaba la melena rubia y el gesto que hacía con la cabeza para apartarla de sus ojos azules. Era alto como a ella siempre le han gustado.

Pero debía admitir que no todo había sido un camino de rosas. La familia del chico no había parecido aceptar bien que empezase una relación con ella. Pero ese problema había conseguido fortalecer los lazos de su amor y hacer más interesante su historia romántica, a ojos de Lola. Ahora bien, los amigos de César, a Lola siempre le habían dado la impresión de que no la tomaban en serio y que esperaban que en cualquier momento se rompiese su amor. Lola tenía miedo de que ellos influyesen en César, aunque por ahora no había ninguna muestra de ello.

Sin darse cuenta, estaban ya en la plaza Uncibay, allí César la dirigió al restaurante “Sacacorchos” y le preguntó al camarero por su reserva. Éste amablemente les llevó a una mesa que había en el fondo al lado de una ventana. Lola sabía que era un restaurante algo caro para ellos y agradeció el detalle de César de traerla aquí. La noche estaba saliéndole perfecta. Se puso a mirar la carta intentando decidir que quería cenar.

-      Estás muy callada princesa. ¿Te ocurre algo? – Preguntó de pronto César.

-      Es la alegría de estar aquí contigo amor, me ha dejado sin palabras.

-      ¿Sabes ya lo que quieres tomar?

-      Creo que voy a comer el churrasco de pollo con salsa asiática ¿Tu que comerás cariño?

-      Me he decantado por el entrecot de buey.

-      ¿Quieres que pidamos también una “ensalada césar” para los dos? – Dijo guiñándole el ojo.

-      Lo que tú quieras, princesa.

-      Lo que yo quiero es el postre. – Dijo mojándose los labios con la lengua y guiñándole el ojo.

Le encantaba como César se ponía nervioso y cambiaba de tema cuando ella hacía una insinuación así. Pese a todo lo vivido, aún se cortaba cuando ella se lanzaba.

El camarero llegó y les tomó nota. César empezó a hablar sobre el día que habían pasado y sobre ideas para viajes juntos si conseguían trabajo y podían ahorrar. Y ese era un gran pero ahora mismo, estaban limitados a lo que podían hacer. Lola se planteaba incluso hacer un módulo de FP de estilista, pero para eso tendría que esperar un año.

-      Por cierto, el domingo he quedado con mis amigos para ver el partido en casa de Mario. – Comentó César de improviso.

-      ¿Qué? Yo quería que estuviésemos todo el día juntos. – Dijo poniendo cara de pena.

-      Pero amor, llevamos toda la semana juntos, y hace mucho que no los veo.

-      ¿Y yo no puedo ir también a verlo con vosotros?

-      No se princesa…. Creo que mejor no, te aburrirías, como otras veces y tenemos que hablar también de nuestras cosas, y contigo delante no lo harán, los conozco.

-      Vale… veré que hago yo en esas dos horas.

-      Queda con alguna de tus amigas, también hace mucho que no las ves.

-      Sí… eso haré.

A partir de ese momento Lola, no hablo mucho, sólo contestaba y sonreía de vez en cuando. Como había pensado los amigos de César no la soportaban, seguro que intentaban ponerlo en su contra. Pero no lo conseguirían. No permitiría que nadie arruinase su historia de amor.

Volvió a observar a César, era todo lo que espera de un chico, todo lo que buscaba en una relación. Le daba todo lo que quería. Pero no podía dejar de tener la sensación de que le faltaba algo, de que necesitaba algo más, para que su historia de amor fuese perfecta, como la de las protagonistas de los culebrones que tanto le gustaban.

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Gracias a todos por leerme y en especial a los que me dan un voto. Con esta escena ya si están presentados todos los personajes, aunque antes alguno hubiese aparecido más secundario. ¿Qué futuro aguarda a estos chicos? Iremos viéndolo poco a poco. ;)

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