Niall's little princess [z.h] [D.K]

#43:MI chico.

Recién escrito jé.

Capitulo patrocinado por mi crisis pos culminio de vacaciones, comienzo de clases, ¡ME REUSO A ENTRAR A CLASES MALDICIÓN!

Tobías odia el inicio de las vacaciones, solo por el hecho de que ya no tiene nada que hacer más que estar vagando en las redes sociales y engordar como lechón para las navidades.

Por lo menos en épocas escolares se entretiene entre las tareas, molestar a Zayn y quejarse de que ya quiere el comienzo de las vacaciones.

También odia el final de las vacaciones, por el simple hecho de que ¡Ya se ha acostumbrado a ser un maldito flojo que duerme tarde, se levanta tarde y pasa todo el día en YouTube, Instagram y Facebook! Y de la nada todos los días pasan rápido y de nuevo se ve en clases gruñón deseando con ansias la llegada de las vacaciones.

Quien carajos entiende a este muchacho.

Ahora mismo se esta quejando de su aburrida vida en esa enorme casa vacía.

Tranquilamente puede ir a visitar a Zayn, pero sabe y comprende perfectamente que Zayn necesita un descanso de la presencia de su mejor amigo y claro, tiene mejores cosas que hacer con su Daddy.

Y como buen amigo, quiere que Zayn pierda la virginidad este verano y no piensa interrumpirlo.

Pero son momentos como estos en lo que desea tener más amigos.

Decide acabar con sus lamentos y con la auto-compasión, y salir a ver la luz del sol.

Porque desde que salió de vacaciones, hace tres días, solo esta encerrado en su pieza.

Sale con su celular en mano, audífonos, que son indispensables, y algo de dinero.

Llega a esa plaza en donde se reúnen todos los adolescentes idiotas de la cuidad, o por lo menos los que viven por los alrededores, mira las tontas tiendas abarrotadas de tontos turistas y los mismo idiotas adolescentes que alguna vez vio en la escuela y solo quiere regresar a casa, meterse a Facebook y seguir riendo como tonto retrasado con los memes y estupideces que llega a publicar la gente.

Todos están tan felices, sonrientes, hablando sobre sus planes para estas nuevas vacaciones y Tobías solo quiere pisar con piedras grandes las cabezas de todos.

Pero para eso no debe tener la garganta seca y menos frío, así que va ha por algo para calmar la sequía en su boca y el frío en sus huesos.

Llega a una de esas cafeterías lindas y modernas, en las que los adolescentes imbéciles van solo a tomarles fotos a los envases con sus nombres escritos en ellos, o simples selfies en el lugar.

Tobías siempre piensa que si el trabajara ahí y fuera el encargado de servir el café, escribiría los nombres mal, o pondría cosas tontas como "Puto el que lo lea" ó el clásico "Soy una zorra" tan solo para arruinar las fotos.

Claro que por eso sería despedido, pero no le importaría, el pelirrojo espera "paciente" a que llegue su turno.

En realidad está maldiciendo a las mil personas que se encuentran delante de él, número de personas que en realidad es una hipérbole, pues solo son seis personas.

Ya cuando está a un solo paso de hacer su pedido, la tonta pareja delante de él no se decide entre muffins y cupcakes y para Tobías ¡es la misma mierda!